Toma de decisiones de gestión comunitaria
  • Tras recibir asesoramiento de Blue Ventures, los líderes de las asociaciones de cada aldea organizaron una reunión para debatir e identificar la estrategia de gestión y las medidas de gestión basadas en los resultados de la evaluación y las percepciones de la comunidad.

  • La reunión, presidida por las asociaciones y/o los líderes de los pueblos, se celebra en condiciones no excluyentes y a ella asisten todos los pescadores, mujeres y hombres. En primer lugar, los participantes proponen las medidas que deben tomarse, que luego se votan a mano alzada si hay muchas ideas divergentes. Puede ocurrir que los pescadores pospongan la reunión para reflexionar y discutir las decisiones a tomar dentro de su clan o familia.

  • En presencia de la administración pesquera, los representantes del Comité de Dina, el Comité de Gestión y los patrulleros comunitarios, la comunidad local validó la estrategia y, en particular, las medidas.

  • En el futuro, estas medidas podrían adaptarse en función del resultado de la aplicación y del seguimiento participativo de los desembarques.

  • Las medidas de conservación de las praderas marinas se combinaron con actividades catalizadoras, como el cierre temporal del pulpo, que aportó beneficios económicos y contribuyó a crear un fuerte compromiso local.
  • Algunos de los líderes de la asociación habían participado en una visita de intercambio para aprender de las estrategias de otras comunidades
  • La asociación de pescadores ya contaba con diferentes estructuras, a saber, el comité de gestión, el comité Dina y los patrulleros comunitarios.

  • El plan de gestión de la pesca ya contenía algunas medidas relacionadas con los pastos marinos.
  • Para poner en marcha medidas de gestión o una nueva actividad, es útil realizar una visita de intercambio a otros lugares. Es más fácil que la comunidad local acepte o ponga a prueba una nueva idea si uno o varios líderes comunitarios ya están convencidos de ella o existen pruebas de éxito de otros lugares;

  • La implicación de la comunidad local en el sistema y el proceso de toma de decisiones es más probable cuando los miembros de la comunidad local ven beneficios tangibles directos.

  • La información y el debate sobre las medidas de gestión tienen lugar en dos reuniones distintas, lo que da tiempo a los miembros de la comunidad a reflexionar sobre los puntos presentados y las medidas apropiadas correspondientes.

Información e interpretación de los datos
  • Analizamos e interpretamos los datos recogidos durante el seguimiento, la cartografía y las reuniones comunitarias;

  • Durante las reuniones comunitarias locales, utilizando enfoques visuales a través de imágenes, proyección de diapositivas y debates, se presentan a la comunidad los resultados y las interpretaciones de la cartografía y el seguimiento de las praderas marinas, así como las percepciones del estado de las praderas marinas. De este modo, la comunidad recibe información sobre los datos recogidos y su interpretación.

  • La información sobre los datos puede ayudar a los miembros de la comunidad local a comprender mejor sus actividades pesqueras y los hábitats relacionados, promover el debate entre ellos y sugerir medidas adecuadas;

  • Los pescadores que participaron en la formación y la recogida de datos dieron una visión general de la recogida de datos durante la reunión de la comunidad local, destacando que entendían el objetivo y el enfoque relacionado. Esto fue clave para generar entusiasmo y apropiación por parte de la comunidad.

  • La participación de las comunidades en las distintas etapas es esencial. Por lo tanto, en esta etapa relacionada con la interpretación de los resultados, participarán de forma progresiva, ya que requiere una mayor variedad de competencias.

Inclusión financiera

Incluso con todos los demás mecanismos de cogestión en marcha, los pescadores no pueden adoptar prácticas pesqueras sostenibles si su vulnerabilidad económica sencillamente no se lo permite. Por esta razón, Rare apoya las actividades de inclusión financiera. Esto incluye pequeñas subvenciones para empresas comunitarias. Algunas de ellas proporcionan fuentes de ingresos alternativas, como las panaderías y la cría de gallinas y huevos. Otras empresas, como las de procesamiento de pescado y servicios de refrigeración, mejoran los ingresos de las actividades pesqueras al tiempo que disminuyen la cantidad de residuos y pérdidas que merman los ingresos de los pescadores y los recursos naturales de las comunidades.
Rare también trabaja con Clubes de Ahorro, impartiendo formación financiera y creando un entorno social en el que quienes carecen de cuentas bancarias pueden acceder a ahorros y pequeños préstamos respaldados por la comunidad.
Juntas, estas medidas de inclusión financiera aumentan los ingresos familiares y la resistencia financiera, reduciendo la vulnerabilidad de los pescadores a las crisis económicas. Esto, a su vez, favorece la pesca sostenible al permitir a los pescadores tomar decisiones basadas en sus intereses a largo plazo y no en las presiones financieras a corto plazo que pueden impulsar la sobrepesca.

La cohesión social es un factor clave de la inclusión financiera. Ya se trate de pequeñas empresas gestionadas colectivamente por un grupo o de clubes de ahorro que dependen de la afiliación activa y la acción colectiva, la inclusión financiera y la adopción de comportamientos se basan en las conexiones entre las personas. En este sentido, la implementación eficaz de la inclusión financiera sólo puede producirse cuando el personal del programa se compromete con los miembros de la comunidad a generar confianza, aumentar la capacidad local y solucionar los problemas que surjan.

Una lección importante es que, como en muchas otras cosas, el esfuerzo no basta para que la inclusión financiera tenga éxito. La simple financiación inicial de microempresas o la creación de un club de ahorro no conducirán a un cambio financiero significativo y duradero. Sin embargo, si estos comienzos van seguidos de cursos de formación para aumentar la capacidad y los conocimientos financieros, y si se capacita a los grupos comunitarios para aprender de los errores a medida que se embarcan en nuevas actividades financieras, la inclusión financiera puede ser realmente poderosa.

También aprendimos sobre la importante superposición de la inclusión financiera y la equidad de género. Las mujeres de las comunidades costeras mozambiqueñas suelen ser víctimas de violencia económica y física, y a veces se les impide ganar dinero propio o decidir cómo gastar los ingresos del hogar. Dado que los clubes de ahorro son mayoritariamente femeninos, ofrecen una oportunidad única para que las mujeres aumenten su poder económico en los hogares y en las comunidades. Esto ofrece oportunidades apasionantes, y ahora estamos trabajando para identificar estrategias específicas, dirigidas y basadas en pruebas para reforzar el liderazgo de las mujeres y la equidad de género en los medios de subsistencia de la pesca mozambiqueña.

Campañas de adopción de conductas

Rare utiliza su experiencia en marketing social para diseñar campañas de adopción de comportamientos, aprovechando los datos de las ciencias sociales para fomentar prácticas pesqueras sostenibles, empoderar a los defensores locales e impulsar planes de zonas pesqueras gestionadas por la comunidad, incluidas las reservas marinas de veda. Estas campañas se adaptan al contexto local y pueden adoptar la forma de actos de celebración que reconozcan la importancia de los pescadores, mensajes públicos a través de vallas publicitarias, programas de radio y televisión, campañas de mensajes de texto SMS, etc.

Para que las campañas de adopción de conductas sean eficaces es necesario conocer a fondo las técnicas que la investigación en ciencias sociales ha demostrado que influyen en un "empujón", modificando las conductas de toda una comunidad y generando un cambio duradero. Rare cuenta con un centro de investigación sobre Comportamiento y Medio Ambiente dedicado a comprender la ciencia que subyace al cambio de comportamiento, y un Centro de Conocimiento dedicado a formar al personal de Rare en estrategias concretas y probadas que puedan aplicarse a contextos locales.

Adaptarse a los contextos locales es crucial y, por lo tanto, es importante contar con personal de ejecución sobre el terreno y con socios que establezcan relaciones, identifiquen a los líderes y defensores de la comunidad y proporcionen información sobre los tipos de actividades y mensajes que probablemente tengan eco en una comunidad determinada. Estas estrategias deben ser adaptables. Cuando comenzó la pandemia de COVID-19, muchos actos presenciales resultaron imposibles de celebrar. Al adaptarnos a estas condiciones y a las restricciones cambiantes, pudimos identificar nuevas estrategias que en algunos casos aportaron aún más concienciación y potencial para la adopción de comportamientos: reuniones virtuales que permitieron que más personas asistieran a los eventos; desfiles socialmente distanciados y al aire libre; y el uso de mensajes de texto SMS y programas de radio para llegar a cientos de miles de mozambiqueños de la costa. Por último, aprendimos lecciones importantes sobre la importancia de los líderes locales. La iniciativa Coastal 500 de Rare aprovecha los compromisos de los alcaldes y otros funcionarios locales, situándolos como fuerza motriz de un cambio duradero.

Redes CMA+R

Las zonas de Acceso Gestionado por la Comunidad y Reserva (CMA+R) son una herramienta de cogestión espacial de la pesca en la que comunidades y gobiernos colaboran para identificar lugares de pesca restringida. Las zonas de acceso gestionado permiten a las comunidades establecer normas y restricciones a la pesca, como la prohibición de artes destructivos, el establecimiento de vedas estacionales o la limitación del número de pescadores autorizados a faenar en la zona; además, permiten a las comunidades participar en la vigilancia y el cumplimiento de estas normas. Las áreas de reserva son zonas de veda en las que las comunidades pesqueras acuerdan no pescar nunca, protegiendo así hábitats críticos y permitiendo la recuperación de las poblaciones de peces. Los dos tipos de zonas protegidas funcionan conjuntamente, permitiendo a las comunidades pescar de forma sostenible en zonas de CMA adyacentes a Reservas cuya integridad ecológica alimenta la pesca. Las "redes" de múltiples áreas de CMA+R a lo largo de una costa tienen el mismo efecto de retroalimentación positiva en una geografía más amplia.

Las zonas de CMA+R deben legitimarse mediante mecanismos jurídicos que hagan explícitamente exigible este enfoque. Deben existir órganos de gestión comunitaria funcionales y formalmente reconocidos, y éstos deben tener capacidad institucional para gestionar la pesca. Por último, tanto los órganos de gestión comunitaria como los socios gubernamentales deben tener acceso a datos pesqueros precisos que les permitan tomar decisiones adecuadas basadas en una comprensión clara del número de pescadores, la cantidad de pescado que se captura, los ingresos que obtienen los pescadores y los cambios en estas tendencias.

El diseño de CMA+R es un proceso complejo y debe tener en cuenta el impacto ecológico, social y económico de las restricciones pesqueras. Rare ha descubierto que el uso de un modelo de dispersión de larvas ayuda a determinar las zonas ecológicamente más ventajosas para la designación de CMA+R, ya que la dispersión de larvas muestra los hábitats donde es más probable que los peces jóvenes recluten, crezcan y, por tanto, repongan las poblaciones pesqueras. Sin embargo, sólo la consulta reiterada a la comunidad y las encuestas exhaustivas a los hogares pueden revelar las preocupaciones sociales y económicas que entraña el diseño de las CMA+R, así como los conocimientos ecológicos locales que los modelos larvarios pueden pasar por alto. Una sólida participación comunitaria es absolutamente esencial para establecer límites eficaces que la gente pueda y quiera apoyar. Por esta razón, los esfuerzos constantes e intencionados de participación de la comunidad son cruciales para el éxito del diseño y la aplicación de CMA+R.

Política de habilitación

La política de habilitación establece las condiciones que hacen legal la cogestión pesquera, implementables los diseños de zonas de "Acceso Gestionado" con reservas de no captura, y funcional la gestión basada en datos.

Este elemento básico requiere relaciones con el gobierno a múltiples escalas, incluidos los niveles nacional, provincial y de distrito. También requiere relaciones con las instituciones comunitarias, cuyas aportaciones pueden establecer las prioridades políticas y cuya funcionalidad demuestra su valor a los responsables de la toma de decisiones en el gobierno. Por último, una política habilitadora depende de una estrategia política claramente definida que identifique los objetivos clave, las soluciones basadas en pruebas, las partes interesadas que se verán más afectadas por los cambios políticos y las mejor posicionadas para defender y promulgar el cambio.

El cambio político es lento, y Rare ha aprendido que los procesos gubernamentales suelen funcionar según sus propios calendarios, independientemente de los planes del proyecto. Este es el caso de la elaboración de documentos políticos, la aprobación de leyes y la aprobación de planes y propuestas presentados. En todos los casos, Rare descubrió que el compromiso constante y regular con los socios gubernamentales era clave para mantener el impulso. Asimismo, Rare aprendió la importancia de trabajar simultáneamente a múltiples escalas geográficas. La legislación nacional es esencial para una gestión eficaz, pero es insuficiente para una aplicación significativa. Para ello son necesarias políticas provinciales y de distrito, incluida la asignación de presupuestos locales, los procedimientos de los organismos de ejecución y el apoyo activo de los cargos electos locales. Por último, constatamos que la estrategia más eficaz es un enfoque adaptativo de la labor política. Las prioridades del gobierno pueden cambiar rápidamente cuando las elecciones y los nombramientos traen nuevos responsables a la conversación, y cuando las circunstancias requieren la atención inmediata del gobierno.

Plan de gestión de la biodiversidad de seis plantas medicinales amenazadas en el distrito de Ehlanzeni, provincia de Mpumalanga, Sudáfrica.

Este plan de gestión se ha elaborado siguiendo las normas y estándares de BMP-S, pero además responde a la necesidad de los ciudadanos sudafricanos de acceder a largo plazo a especies de plantas medicinales para el cuidado de la salud. El plan se ha llevado a cabo para seis especies de plantas medicinales presentes de forma natural en el distrito de Ehlanzeni de la provincia de Mpumalanga: Alepidea cordifolia, Bowiea volubilis, Dioscorea sylvatica, Haworthiopsis limifolia, Siphonochilus aethiopicus y Warburgia salutaris. Ha sido elaborado por un amplio abanico de partes interesadas, entre ellas autoridades de conservación, horticultores, investigadores, responsables de la aplicación de la ley, usuarios de medicinas tradicionales, participantes en la cadena de valor de la medicina tradicional (comerciantes y curanderos tradicionales) y organizaciones sin ánimo de lucro interesadas en apoyar los medios de subsistencia rurales.

Este informe detalla los resultados de un proceso de desarrollo colaborativo de un Plan de Gestión de la Biodiversidad para las seis especies. Dado que muchos médicos tradicionales (THP) de la zona ya cultivan ciertas plantas medicinales en sus huertos familiares, y que muchos otros están dispuestos a hacerlo. Este plan explora opciones en torno al cultivo como posible herramienta para conservar y utilizar de forma sostenible estas plantas. La aceptación de las plantas medicinales cultivadas depende de la especie y de sus usos, así como de su importancia sociocultural dentro de las comunidades.

Las BMP-S se aplicarán en un entorno complejo y dinámico; por lo tanto, los principios generales regirán el éxito de la aplicación global y proporcionarán el contexto para la futura gestión adaptativa.

Seguimiento participativo
  • Proporcionamos formación de refresco sobre los servicios ecológicos de las praderas marinas;

  • Formamos a representantes de los pescadores locales en protocolos de seguimiento (metodología Seagrass Watch (McKenzie et al., 2003));

  • Llevamos a cabo la evaluación de las praderas marinas con pescadores formados que recopilaban datos sobre la ubicación de los límites/borde, las especies, el porcentaje de cobertura, el tipo de sedimento y la profundidad;

  • Recogimos los datos en papel y los introdujimos en una base de datos informática antes de analizarlos.

  • Gracias a las diversas actividades de concienciación sobre la conservación, las comunidades se interesaron cada vez más por la salud de los ecosistemas, a los que se referían como su "despensa" cuando hacía mal tiempo.

  • Aunque la metodología se adaptó para que la utilizaran los pescadores locales, fue necesario impartir formación de refresco para que pudieran llevar a cabo el seguimiento.

Cartografía participativa
  • Trabajamos con la comunidad para evaluar la percepción del estado de las praderas marinas y las amenazas locales;

  • Durante una reunión de la comunidad local, dibujamos los límites de las praderas marinas en una imagen de satélite proyectada con la ayuda de los participantes;

  • Junto con los representantes de los pescadores locales, los líderes de la comunidad/asociación y los ancianos del pueblo que conocen bien la zona, recogimos las coordenadas GPS de las praderas marinas (puntos del perímetro alineados con los mapas comunitarios creados en el paso anterior);

  • A continuación, proyectamos las coordenadas GPS recogidas en imágenes por satélite para que la comunidad local las validara durante una segunda reunión.

  • La cartografía participativa no era completamente nueva para las comunidades, ya que anteriormente se habían llevado a cabo ejercicios similares durante la cartografía de las zonas de pesca y la implantación de reservas temporales;

  • La implicación de las comunidades locales a lo largo de todo el proceso conduce a una verdadera aceptación;

  • Integración de los conocimientos de las comunidades locales para una recopilación de datos fiable.

  • La primera reunión de la comunidad local fue muy útil para hacerse una idea de los límites y facilitó la validación durante la segunda reunión. La comprobación sobre el terreno mediante la recogida manual de puntos GPS proporcionó datos más precisos;

  • Los datos eran más fiables gracias a los conocimientos de la comunidad local.

Gestión y protección de la población reproductora silvestre

Las aves criadas en cautividad tienden a utilizar el mismo tipo de nido en el que se criaron. Basándose en esta teoría, se instalaron cajas nido a lo largo de los acantilados y de una cantera en funcionamiento adyacente al lugar de liberación. Ronez, los propietarios de la cantera, pagaron la visita a Jersey de un experto británico que les ayudó a planificar, diseñar e instalar las cajas.

Los primeros nidos, en 2015, estaban dentro de los edificios de la cantera, no en las cajas. Las cajas empezaron a utilizarse a medida que aumentaba la competencia por los emplazamientos de los nidos. Cuando dos nidos fracasaron por estar construidos sobre maquinaria peligrosa, el personal instaló cajas y animó con éxito a las parejas a anidar en ellas, lo que permitió al personal de la cantera continuar con las operaciones.

La actividad de nidificación se vigila estrechamente, lo que permite al personal estimar las fechas de incubación, eclosión y desove basándose en el comportamiento de las parejas en la alimentación suplementaria y/o en observaciones directas de los nidos. Cuando es posible, se anilla a los pollos y se les asigna el sexo por ADN en el nido. Alternativamente, los pollos volantones que visitan el comedero suplementario pueden ser atrapados en el aviario cuando son llamados para comer, anillados y liberados inmediatamente. Esta opción se utilizó en 2020 y 2021 cuando COVID-19 impidió el acceso a la cantera.

La ley de fauna salvaje de Jersey, recientemente revisada, otorga plena protección a los nidos de chova piquirroja. El personal trabaja ahora para aumentar la concienciación pública y ofrecer cajas nido como mitigación cuando las chovas piquigualdas anidan en propiedades privadas.

  • Recurrir a expertos externos
  • Ronez nombró a un funcionario de enlace que trabaja con Durrell para acceder a los nidos, vigilarlos y protegerlos.
  • Un equipo entusiasta dispuesto a ir más allá por la especie.
  • Lugares de nidificación accesibles con una opción alternativa para el anillamiento de juveniles/adultos, es decir, la pajarera en el lugar de alimentación suplementaria.
  • Un público solidario con conocimientos sobre la especie, medios para informar de avistamientos y respetuoso con la legislación sobre fauna salvaje.
  • La concienciación y el apoyo del público han dado lugar a datos adicionales de incalculable valor sobre dispersión, selección de dormideros y nidos y uso del hábitat. En 2021, se descubrió un nuevo dormidero en una hípica cuando el propietario se puso en contacto con el responsable del proyecto preguntando por la presencia de un "cuervo inusual". Se identificó una única chova hembra posada en los establos con una pareja visitante intentando anidar cerca. A pesar de esto, una evaluación de la reintroducción en 2019 identificó una falta general de conciencia pública. A medida que la población reintroducida crezca y se formen nuevos territorios lejos del lugar de liberación protegido, será cada vez más importante contar con un público informado y comprometido que apoye la gestión de la conservación.

  • La dotación de personal ha sido muy limitada y restrictiva. No existe un equipo especializado en marketing o divulgación educativa. Durante la temporada de cría, el seguimiento de varios lugares sólo es posible si hay un estudiante en prácticas ayudando al responsable del proyecto.