La Biorremediación

La biorremediación incluye el empleo de organismos para eliminar contaminantes del suelo o agua. En el sistema de biorremediación el agua proveniente del canal de Chonta pasa primero por pozas sedimentadoras y luego por otras más grandes donde se instalaron totorales y juncos -plantas locales - que absorben el óxido del agua por medio de sus raíces. También se usan bacterias que reducen la acidez del agua. Finalmente, el canal provee de 120 L de agua purificada por segundo para toda la población. Su implementación se dio gracias a la colaboración de instituciones a partir de la demanda comunal. Se diseñó bajo criterios de conocimiento tradicional y científico: los lugares apropiados para construir las pozas de sedimentación, la zona de humedales, la selección de las plantas como la totora y la tecnología para el trasplante a los humedales. La municipalidad apoyó proveyendo la maquinaria. Los miembros del CIAL y la comunidad realizan la limpieza de las pozas de sedimentación una vez al año entre abril y mayo. Al iniciarse las lluvias dejan ingresar un mínimo de caudal, solo para el mantenimiento de los humedales y el uso de algunos agricultores.

El CIAL realiza el monitoreo de la calidad del agua del sistema dos veces al año; miden principalmente el pH y la conductividad eléctrica.

  • Partió de un proceso impulsado localmente para solucionar un tema de prioridad local.
  • La medida es parte de una estrategia mayor: el Plan de Desarrollo Comunal (PDC).
  • Organización de la participación local a través del comité.
  • Relación previa de confianza entre la comunidad y el Instituto de Montaña, que apoyó en la implementación.
  • El monitoreo continuo de la calidad y el buen funcionamiento del sistema de biorremediación por parte de los integrantes del comité.
  • Se requiere planificar el abastecimiento de insumos, ya sea confirmando si existen las fuentes donde adquirirlos o si será necesario producirlos, como las bacterias sulfo-remediadoras en las plantas de tratamiento de agua residuales. Si bien las plantas existen, no hay un buen manejo ni bacterias suficientes por lo que el laboratorio necesita producirlas especialmente para instalarlas en las pozas de humedales.
  • La tecnología  también requiere reglas para el uso adecuado del agua tratada.
  • La operatividad del comité de agua es un factor clave y requiere de fortalecimiento institucional y asesoría.
  • Un rol importante del comité es el seguimiento al sistema a través del monitoreo y el mantenimiento de la infraestructura.
  • La implementación necesita ser acompañada de capacitación, como por ejemplo en el monitoreo y el mantenimiento de la infraestructura (limpieza de pozas de sedimentación y humedales) y manejo de sedimentos.