
Exploración de la viabilidad de los humedales flotantes para la recuperación medioambiental en Bombay

Earthwatch India ha llevado a cabo una investigación en tres ciudades de la India para abordar las lagunas de conocimiento en la gestión de lagos, humedales y espacios verdes urbanos. La investigación aporta información sobre cómo estos ecosistemas pueden aumentar la resistencia climática de las zonas urbanas, al tiempo que siguen proporcionando beneficios a las personas y la vida silvestre en el futuro. En Bombay, Earthwatch colabora con el Instituto Indio de Tecnología de Bombay para estudiar la viabilidad de soluciones basadas en la naturaleza que contribuyan a la mejora ecológica de los lagos de Powai y Banganga. Los resultados se están utilizando para apoyar un modelo de negocio sostenible para estas importantes masas de agua, que sirven como importante patrimonio cultural y centros recreativos para la población de Mumbai.
Impactos
Este proyecto de investigación estudió las ventajas de los humedales artificiales flotantes para regular la calidad del agua. Formaba parte de un estudio más amplio destinado a determinar las posibles ventajas de integrar infraestructuras verdes y azules para mejorar los lagos de la ciudad e invertir el proceso de degradación de estos ecosistemas críticos debido a la contaminación por aguas residuales no tratadas, la escorrentía urbana y el vertido ilegal de efluentes industriales. Al realizar mediciones en lagos con distintas zonas verdes de amortiguación y diferentes cargas contaminantes, el proyecto ayudó a demostrar fuertes contrastes en la calidad del agua. En un lugar, el agua estaba clasificada como apta para el consumo, pero en otra parte del mismo ecosistema, la afluencia de aguas residuales urbanas y prácticas culturales como la inmersión en ídolos dieron lugar a condiciones muy comprometidas, con bajo oxígeno disuelto y pH y sólidos disueltos totales elevados. El estudio mostró cómo se ha deteriorado la calidad del agua del lago con el paso del tiempo y, por tanto, la necesidad de compartir la responsabilidad a la hora de recopilar la información necesaria para desarrollar una estrategia adecuada de tratamiento de las aguas residuales. Se formó a ciudadanos científicos para que vigilaran los indicadores ambientales en todos los lugares del estudio, lo que permitió a los equipos de investigación recopilar más datos de los que hubieran podido reunir por sí solos.