Parque Nacional Vicente Pérez Rosales es el primer parque nacional en Chile en incorporar infraestructuras de uso público inclusivo con material reciclado
CONAF en colaboración con diversas entidades, diseñaron una estructura para un nuevo sendero en el Parque Nacional Vicente Pérez Rosales utilizando material totalmente reciclado.
La obra, un plan piloto inédito en un área protegida, emplea plástico y envases de Tetra Pack para crear un material similar a la madera. Algunos de estos residuos se obtienen del propio parque, impidiendo su disposición en vertederos y convirtiéndolos en un material de alta calidad. El material utilizado es duradero, resistente a las condiciones climáticas adversas, absorbente térmico y acústico, ignífugo, sanitizable y no se corroe. Es más eficiente y de menor costo de matención que la madera tradicionalmente utilizada.
Esta solución presenta características para ser replicadas tanto en Chile como en otras áreas protegidas del mundo. Genera alianzas multisectoriales, ahorra recursos financieros y reduce el trabajo de mantención de los Guardaparques, al tiempo que mejora la gestión de visitantes, fomenta la inclusión y favorece la biodiversidad.
Contexto
Défis à relever
Ubicación
Impacts
1.- Articulación público-privado para contribuir en la búsqueda de soluciones científicas amigables al medio ambiente y a la adaptación frente a nuevos requerimientos ambientales de materiales en la construcción de infraestructuras en espacios de uso público.
2.- Minimizar los costos económicos con materiales que tienen una mayor vida útil, como así también de personal, ya que al tener una vida útil mayor, no se necesitan reparaciones periódicas como en el caso de la madera que ha sido históricamente el material predominante en la zona sur del país para la construcción de infraestructura de uso público y que demanda reparaciones permanentes por el equipo de Guardaparques.
3.- Con la contrucción con material reciclado se evitaron cortar cerca de 40 árboles adultos y ahorrar 16 millones de litros de agua destinados a su riego, ahorrar 183 m3 de espacio en un relleno sanitario por el reciclaje de materiales y evitar el consumo de 45.600 Kw/hora de energía como también 20.352 litros de petróleo en su proceso de fabricación.
4.- Habilitación de nueva infraestructura en zonas de uso público para visitantes, lo que ofrece más alternativas de visitación para los turistas como también ayuda a descongestionar los Saltos del Petrohué, el cual es el más visitado de dicha área protegida.
5.- Aumento de un 20% en la red de senderos habilitados con infraestructuras de accesibilidad universal.