Seguridad alimentaria e hídrica en comunidades de la sub-cuenca compartida del Río Sumpul
La escasez de agua y los eventos climáticos extremos ya son un hecho en la subcuenca del Río Sumpul, compartida entre Honduras y El Salvador, y se agravarán conforme se intensifiquen los impactos del cambio climático. Esto hace necesario respuestas de adaptación que permitan aumentar la resiliencia de los sistemas productivos y asegurar la provisión de agua. Para esto, se combinaron 3 ejes de trabajo: fortalecer capacidades y conocimientos por medio de un enfoque de “aprender haciendo”; aumentar la resiliencia de los ecosistemas y medios de vida aplicando medidas de adaptación basada en ecosistemas (AbE); y revitalizar la gobernanza de la subcuenca. Esto llevó a examinar las vulnerabilidades de las comunidades; implementar medidas de AbE en fincas aledañas a las fuentes de agua; reforzar la capacidad de gobernanza y gestión de instancias locales; articular acciones por medio del Comité Comunitario Binacional de la subcuenca; y promover la AbE como respuesta ante el cambio climático.
Contexto
Défis à relever
- La subcuenca enfrenta problemas de degradación ambiental debido a la deforestación y contaminación de suelos y agua. También han surgido conflictos entre vecinos fronterizos por el uso del agua del río Sumpul.
- La naturaleza binacional de la cuenca implica retos de colaboración y coordinación entre Honduras y El Salvador.
- Existen debilidades en la gestión local del recurso hídrico y escaso conocimiento de tomadores de decisiones y líderes locales acerca de la adaptación basada en ecosistemas y cómo la gestión del agua es parte central de ésta.
- Las principales amenazas climáticas son: fuertes variaciones en el régimen de lluvias, fluctuaciones extremas en las temperaturas (“heladas”) y vientos fuertes; también se producen deslizamientos, inundaciones y sequías recurrentes. Todo ello perjudica la infraestructura (viviendas, viveros, etc.), alimentación y medios de vida locales (principalmente hortalizas y granos básicos) y aumenta la vulnerabilidad y la migración de personas.
Ubicación
Procesar
Summary of the process
En la subcuenca compartida del Río Sumpul (El Salvador-Honduras), se logró fortalecer la gobernanza para la adaptación (BB3) e implementar medidas AbE con productores (BB2) bajo un enfoque de “aprender haciendo” (BB1) que combina acciones de campo, intercambio de experiencias, participación, diálogo, alianzas y una visión ecosistémica (BB2 y 3) y genera capital social. Por ende, la solución presenta 3 Building Blocks (BB). Al combinarlos, se logran avances en la gobernanza comunitaria de un territorio binacional (BB3), la capacidad adaptativa de las comunidades locales y la resiliencia de sus medios de vida (BB1 y 2), en especial de los sistemas agroforestales. Al demonstrar la relación entre provisión de agua y adaptación, se facilita también el escalamiento del enfoque de AbE (BB3) y su institucionalización en instrumentos de política y gestión, como el Plan Estratégico del Comité Comunitario Binacional de la Subcuenca del Río Sumpul y los Planes Locales de Adaptación de las Municipalidades de Las Palmas y San Ignacio (El Salvador). Así se cumplen varios objetivos de desarrollo sostenible al articular el capital social con el capital natural para una mayor resiliencia socio-ambiental ante el cambio climático.
Building Blocks
“Aprender haciendo” y monitoreo para incrementar capacidades y conocimientos
Al apoyar a productores a implementar medidas de AbE que mejoran sus prácticas productivas y aumentan la resiliencia de los agro-ecosistemas, se genera un proceso de “aprender haciendo” que permite a otros actores presenciar los beneficios de dichas medidas y crea condiciones para su sostenibilidad y escalamiento.
- Se examina, participativamente, la vulnerabilidad socio-ambiental de las comunidades y sus medios de vida, para luego priorizar las medidas de AbE y su ubicación
- Se brinda apoyo técnico a los productores, complementado con sus conocimientos tradicionales, para planificar e implementar las medidas de AbE (mejoras en los sistemas agroforestales)
- Se realizan capacitaciones e intercambios de experiencia sobre cooperación transfronteriza; gestión integrada del recurso hídrico; AbE; marcos de política y legislación sobre agua y cambio climático; e incidencia y comunicación
- Se lleva a cabo un monitoreo de la seguridad alimentaria e hídrica con 14 familias
- Se fortalece la capacidad de gobernanza y gestión de instancias comunitarias y municipales vinculadas al manejo del recurso hídrico
El incremento de capacidades y conocimientos fortalece el capital social y contribuye al empoderamiento comunitario y a valorar los servicios ecosistémicos y su gestión en beneficio de todos.
Enabling factors
- El cambio climático y en particular, la disponibilidad del agua, son factores que preocupan a los actores de la subcuenca, lo que hace que aumente su disposición al diálogo, al aprendizaje constante, a la búsqueda de soluciones y a realizar acciones conjuntas.
- Plan Trifinio lleva años implementando medidas de conservación en el territorio y trabajando de cerca con los productores y actores locales. Tiene también amplia experiencia con procesos participativos, que es otro factor habilitante para procesos exitosos de “aprender haciendo”.
Lesson learned
- Para lograr cambios a nivel de paisaje, se debe primero trabajar con las bases a nivel comunal. En esto, ha sido clave el fortalecimiento de las capacidades de los Comités de Agua, que forman parte de las Asociaciones de Desarrollo Comunal (ADESCOs) para que puedan ampliar el alcance de su actuar más allá de las necesidades de saneamiento.
- Los intercambios de experiencia (e.g. con actores de la cuenca del Río Goascorán y con otras ADESCOs de otras partes de la cuenca) fueron un mecanismo efectivo para reforzar el aprendizaje colectivo y demonstrar las ventajas de la colaboración transfronteriza.
Resources
Implementación comunitaria de medidas de adaptación en bosques y sistemas agroforestales
Las medidas de AbE implementadas en la subcuenca estuvieron enfocadas en los servicios ecosistémicos de agua y suelos, en la diversificación productiva y en paliar los impactos del cambio climático en los cultivos y bienes de las comunidades. Junto a >100 productores/as de la parte alta de la subcuenca, se introdujeron árboles frutales y maderables en sistemas agroforestales aledaños a 7 fuentes de agua y se fomentó la agricultura orgánica, permitiendo a las familias diversificar sus ingresos y reducir la vulnerabilidad de sus cultivos, infraestructura productiva y viviendas ante los fuertes vientos que les afectan. Esto en combinación con prácticas de conservación de suelos y agua (acequias de ladera, no-quema e incorporación de rastrojos) ha ayudado a disminuir la erosión del suelo ocasionado por lluvias extremas, así como mejorado la retención de humedad en los cultivos, la fertilidad de los suelos, y la infiltración y captación de agua en la zona. Las medidas de AbE no sólo generan agro-ecosistemas más resilientes, sino que también aumentan la disponibilidad de agua, lo que beneficia a >400 familias de la subcuenca. Estas acciones han generado conciencia sobre la necesidad de una visión ecosistémica y adaptativa ante el cambio climático en la gestión del territorio.
Enabling factors
- Mejorar el estado de los suelos no sólo es una manera de asegurar aumentos en la productividad, sino que también a mediano plazo, ayuda a disminuir la tendencia a la agricultura migratoria ya que se asegura que las familias puedan trabajar muchos años en las mismas parcelas. Este influyente factor favorece la adopción de prácticas de conservación de suelos por parte de las familias.
- Plan Trifinio inició hace años un esquema de incentivos a propietarios de bosques con el objetivo de contribuir a su protección y con eso, a la cosecha de agua.
Lesson learned
- La siembra escalonada con árboles frutales y maderables, es una forma muy efectiva de aumentar conciencia sobre los beneficios de asociar árboles con cultivos. Permite ver de forma palpable cómo los sistemas agroforestales ayudan a enfrentar los impactos del cambio climático y diversificar los ingresos familiares.
- La implementación de sistemas agroforestales y prácticas de conservación de suelos debe permitir que la diversificación e incremento de ingresos dé resultados a corto plazo (con granos básicos, aguacate, etc.) y no sólo a mediano y largo plazo (con árboles de pino y ciprés). Materializar esto implica una planificación conjunta entre el productor y el asesor técnico.
- Debe tomarse en cuenta la tenencia de la tierra en donde se ubican las fuentes de agua. Las municipalidades comúnmente son propietarias únicamente de los ojos de agua y no de las tierras que los rodean. Esto implica trabajar con los propietarios de los bosques y predios que rodean las fuentes de agua para proteger y/o restaurar esas tierras y permitir la instalación de tuberías para proveer agua a las comunidades.
Revitalización de la gobernanza para la adaptación
Para ser efectiva, la gobernanza para la adaptación debe ser multidimensional y participativa, lo que implica involucrar a agricultores, municipalidades, ministerios y otras instituciones públicas en la zona, líderes comunitarios, unidades de salud y educadores en los procesos de gestión del agua y adaptación. En Sumpul esto se logró particularmente a través de los procesos de “aprender haciendo” y de revitalización del Comité Comunitario Binacional de la Subcuenca. La labor y legitimidad local del Comité Binacional se enriqueció con la integración de instancias comunitarias que estuvieron por años desarticuladas y sin mayor participación, como los Comités de Agua, que son importantes en cada comunidad. También se generaron nuevos instrumentos de gestión, se impulsaron liderazgos y la participación activa de jóvenes y mujeres dentro del Comité Binacional, y se realizaron capacitaciones e intercambios de experiencias para el aprendizaje colectivo. Otros aportes a la gobernanza provinieron de los productores que implementaron medidas de AbE en sus fincas (quienes ahora son voceros por los beneficios derivados de dichas medidas) y de las municipalidades (La Palma y San Ignacio) que integraron el enfoque de AbE en sus políticas, con la formulación de Planes Locales de Adaptación.
Enabling factors
- La existencia previa (2012) del Comité Binacional es un factor habilitante clave, ya que no se comenzó de cero, sino que se fortaleció una estructura existente, impulsando su re-estructuración en base a un diagnóstico sobre su funcionamiento y actores/liderazgos clave.
- Para que los Comités de Agua puedan contribuir a una gestión compartida con visión de cuenca en el Comité Binacional, se requiere primero mejorar sus propias capacidades de organización y gestión, antes que puedan tomar la batuta como voceros y representantes de sus comunidades.
Lesson learned
- El contar con estudios biofísicos e información técnica específica sobre recursos hídricos y AbE, facilitó los procesos de sensibilización, participación, logro de acuerdos y realización de acciones focalizadas, lo que a su vez ayudó a evitar la dispersión de recursos.
- Aumentar la efectividad y sostenibilidad, de los procesos de gobernanza, conlleva un trabajo constante de muchos años, que a menudo sobrepasa la duración de los proyectos de cooperación. Por ende, es conveniente buscar, por un lado, maximizar las sinergias entre proyectos y, por otro lado, mantener la presencia y el acompañamiento en el territorio a través de proyectos sucesivos.
Impacts
- Implementación de medidas de AbE en sistemas agroforestales (diversificación de cultivos, obras y prácticas de conservación de suelos y protección de fuentes de agua) beneficiando a >100 productores/as en la subcuenca.
- Mayor articulación entre actores clave de la subcuenca vinculados a la temática de manejo integrado del recurso hídrico.
- Fortalecimiento de 4 Comités de Agua de la parte alta de la subcuenca (Municipios de La Palma y San Ignacio, El Salvador) y reglamentación interna de los sistemas de abastecimiento de agua para consumo humano.
- Formulación participativa y adopción de nuevos instrumentos de planificación y gestión para las plataformas de gobernanza existentes (Comité Comunitario Binacional de la Subcuenca del río Sumpul y los 4 Comités de Agua, que localmente son conocidos como "Juntas de Agua" y forman parte medular de las Asociaciones de Desarrollo Comunal, ADESCOs).
- Acompañamiento técnico por parte de las Municipalidades de La Palma y San Ignacio (El Salvador).
- Mayores capacidades de comunicación e incidencia luego de capacitaciones a 38 líderes comunitarios en negociación, incidencia política y comunicación.
Beneficiaries
- >400 familias de la cuenca alta del Río Sumpul, en particular >100 productores/as.
- Comités de Agua de las ADESCOs de 4 comunidades
- Municipalidades de La Palma y San Ignacio (SV)
- Comité Comunitario Binacional de la Subcuenca del Río Sumpul
Sustainable Development Goals
Story
Sr. Eduardo Santamaría S.: “Durante 36 años fui agricultor de repollo y terminé cambiando de patrimonio por la producción de aguacate.” En el bosque de aguacate de Don Eduardo se observa abundante hojarasca y material de poda, lo que reduce la escorrentía, mejora la infiltración de agua y retención de humedad en los suelos, evita la erosión y provee nitrógeno al descomponerse. Hoy Don Eduardo produce aguacate, repollo y granos básicos y posee amplia experiencia en obras y prácticas de conservación de suelos, como el uso de: acequias (o zanjas) a desnivel, acequias y trazado de curvas a nivel, barreras vivas, cortinas rompevientos, manejo de rastrojos, y lombricultura.
“El agricultor necesita ser supervisado y ayudado por un técnico. Es fundamental la unión de ambos en aras a producir alimentos más sanos y respetuosos del medio ambiente. El objetivo es garantizar la sustentabilidad de los sistemas agrícolas y con ello reducir los impactos del cambio climático.”
Sr. Ignacio Salguero: “La agricultura química sólo me trajo dolor de cabeza…” Hace 8 años, Don Ignacio opta por cambiar sus métodos agrícolas convencionales y se reta por aprender agricultura orgánica. Habiendo heredado suelos desequilibrados, plagas y enfermedades, hoy es el referente de la agricultura orgánica en la zona alta de la cuenca, al producir un sinfín de alimentos de forma ecológica. Su parcela ha sido visitada por funcionarios públicos, estudiantes, personas de Honduras, Guatemala, Nicaragua, Alemania, El Salvador, con el objetivo de conocer las medidas de sostenibilidad y prácticas de conservación de suelos que en ella se desarrollan.
“La agricultura agroecológica es vida, es salud, es bienestar, es integrar a la familia, es calidad de vida y esta no está en la riqueza, sino en la paz, tranquilidad, estabilidad, seguridad, mejores mercados, reducción en los costos de producción. Y esto mismo me ha llevado a superar la crisis financiera que me dejó la agricultura química… Hoy duermo feliz y trabajo a mi ritmo.”
Sr. Noé Alvarenga: “Plan Trifinio y UICN nos entregaron pinos y cipreses para sembrar… que ayudan a proteger el nacimiento de agua que se ocupa para regar cuatro parcelas productivas; además nos entregaron 110 árboles de aguacate que sembramos en una parcela totalmente desierta. El terreno era sólo rastrojo, era un matorral. ¡Hoy es una chulada! Hoy ya es una parcela demostrativa. El aguacate nos ha venido a fortalecer; ayuda al medio ambiente y nos ayuda económicamente.”