Co-manejo en la pesca sostenible de langosta del caribe en Bahía Asención, México

Se ha reconocido que los esfuerzos colectivos y/o grupos bien organizados con una visión común y objetivos alineados logran alcanzar mayores beneficios. Para impulsar y promover la sostenibilidad en las pesquerías se ha utilizado este mismo principio y añadiendo la participación multisectorial como eje central; teniendo así un grupo integrado por diversos sectores de la región trabajando de manera conjunta para tener una pesquería sostenible en toda la red de valor. En la pesquería de langosta, se ha conformado un grupo amplio de pescadoras y pescadores ejerciendo fuertes alianzas con instituciones de investigación (ECOSUR, Cinvestav, UNAM, SISIERRA, Universidad Marista), Organizaciones civiles (COBI), gobierno (INAPESCA, CONAPESCA y Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an) y la institución FAO para implementar diversas mejoras en la pesca (monitoreos pesqueros, definir puntos de referencia límite para la pesquería, establecimiento participativo de la talla mínima, intercambios entre cooperativas y comercializadores, generación de fondos de ahorro) y así tomar mejores decisiones. Estas relaciones de colaboración se han formalizado a través de diversos acuerdos y/o convenios que han permitido la relación entre instituciones y organizaciones pesqueras de acuerdo con las necesidades cambiantes de la pesquería.

  1. Integración de todos los sectores que puedan estar inmersos en la pesquería; no dejar a ninguno fuera asegura el camino hacia la sostenibilidad.
  2. Transparencia sobre los objetivos e intereses de cada sector genera alianzas más robustas y de larga durabilidad para seguir colaborando.
  3. Organización entre pescadoras y pescadores, instituciones académicas, agencias de gobierno, y OSC, ya que la langosta espinosa en el Caribe es un recurso de alto valor económico que se encuentra inmerso bajo una compleja red de actores interesados.
  1. Es necesario identificar las áreas de oportunidad de la pesquería encontradas bajo la evaluación del estándar MSC y generar en conjunto un plan de acción, en el que cada uno de los actores involucrados pueda involucrarse por los intereses en común.
  2.  Dar seguimiento cercano al avance del plan de acción y a los acuerdos establecidos con todos los sectores involucrados (organizaciones pesqueras, agencias de gobierno, instituciones académicas, OSC) permite fortalecer la credibilidad del proyecto y generar la confianza para el logro de objetivos en común.
  3. Monitorear de manera constante las necesidades identificadas por las pescadoras y pescadores respecto a la parte social y financiera, de manejo, y ambiental de las pesquerías, de esta manera se abordan los desafíos de manera oportuna.
  4. El tener una gobernanza fuerte al interior y de la organización pesquera mejora el conocimiento sobre el beneficio para la pesquería y la toma de decisiones (p.ej., reglamento interno, proceso de sanciones por incumplimiento de normas, leyes, y/o acuerdos de asambleas).