Metodología

Sembrando Ciudades posee dos grandes componentes, el proceso técnico y el proceso participativo con la comunidad e intervención del espacio público, para ello cada uno de los equipos consultores posee expertiz en uno de los dos ámbitos, y combinados, se logró potencializar su alcance e impacto. 

Como equipos consultores se contó con dos organizaciones civiles, para el ámbito técnico se tuvo a la Red de Viveros de Biodiversidad (REVIVE) y para el componente participativo e intervención del espacio público se contó con Colectivo Tomate. 

El proceso se dividió en diversas etapas, descritas a continuación:

  • Preliminar

Primer acercamiento entre funcionarios locales, población y sociedad civil, en el cual se expuso el objetivo y alcance de la iniciativa Sembrando Ciudades, se generó un mapeo de actores estratégicos, así como la construcción de una red de comunicación para la logística en la implementación de todas las acciones del proyecto. 

Asimismo, se realizó un diagnóstico del sitio seleccionado en términos de infraestructura verde y suelo, generando mapas espaciales del polígono que conformarán una caja de herramientas para la toma de decisiones en torno al arbolado urbano; este análisis fue acompañado de un scouting en sitio para confirmar la factibilidad de implementación de la acción demostrativa en espacio público, alineado a los objetivos del proyecto. 

  • Sensibilización

Procesos participativos en donde se busca la integración de la comunidad a través de actividades y encuentros que permitieran genera un espacio de confianza y conversación para conocer las necesidades locales y la creación de una propuesta colaborativa suficiente para ejecutar una acción demostrativa en el espacio público.

  • Socialización y capacitación

Conjunto de actividades y talleres dirigidos a la niñez y comunidad para socializar conceptos alineados a la gestión integral de riesgos y desastres, y brindar educación ambiental empleando una metodología socio artística.

Fortalecimiento de capacidades mediante un taller práctico y teórico para el diagnóstico y gestión del arbolado urbano, impartido a funcionarios, asociaciones civiles, académicos, empresas privadas del sector turístico y alianzas ciudadanas que tuvieran la autoridad, compromiso y capacidad de incidir en la toma de decisiones sobre el arbolado urbano y áreas verdes.

  • Implementación

Ejecución de las acciones demostrativas en espacio público que atendiera alguna necesidad local, y favoreciera la conectividad social y ambiental del sitio. Esta acción demostrativa de soluciones basadas en la naturaleza fue acompañada de pinta de murales y piso que lograron intervenir con color los sitios seleccionados, siendo elementos de concientización y difusión en torno al cuidado de la biodiversidad y comprensión del riesgo.

  • Cierre

Entrega final y formar de las acciones en espacio público dirigido a todas y todos actores clave, dando reconocimiento a cada persona que hizo posible la ejecución de la iniciativa.

Metodología

Sembrando Ciudades posee dos grandes componentes, el proceso técnico y el proceso participativo con la comunidad, para ello cada uno de los equipos consultores posee expertiz en uno de los dos ámbitos, y combinados, se logró potencializar su alcance e impacto. 

Esta simbiosis entre los dos equipos consultores trajo también su propia y particular metodología para poder cumplir los objetivos planteados. Adicional que al ser un proyecto multisectorial, mediante un proceso de cooperación técnica entre la federación, gobiernos locales, iniciativa privada y sociedad civil, se trabajó en colaboración con funcionarios locales, población y sociedad civil para la creación de una propuesta colaborativa suficiente para ejecutar una acción demostrativa en el espacio público.

 

Las etapas que conformaron el proceso fueron:

  • Preliminar

Análisis y diagnóstico espacial del sitio propuesto. Determinando su factibilidad con base en los criterios del proyecto, el cual debería incluir determinados factores sociales, ambientales, de equipamiento, vulnerabilidad climática e infraestructura urbana. 

  • Sensibilización

Dar a conocer la esencia del proyecto a todas las personas involucradas (funcionarios locales, población y sociedad civil), así como definir roles y necesidades para la construcción en conjunto de la solución a implementar en el espacio público. Y brindar educación ambiental de los conceptos pertinentes al proyecto como vulnerabilidad climática, gestión integral de riesgos, adaptación climática y resiliencia urbana.

  • Socialización y capacitación

Procesos participativos con las infancias y comunidad para la transformación colectiva del espacio público (con perspectiva de género). Y el fortalecimiento de capacidades a personas funcionarias y tomadoras de decisiones para el manejo y diagnóstico del arbolado urbano.

  • Implementación

Ejecución de un proyecto demostrativo en conjunto con el municipio y la comunidad, que permita potencializar la conectividad ambiental y social del sitio, incluyendo elementos de infraestructura verde, creación y pinta de murales que retraten la biodiversidad local y la relación necesaria entre la comunidad y el medio natural.

  • Cierre

Entrega del proyecto a la comunidad y al municipio. 

Comunicación y difusión de los resultados

La difusión y comunicación de las intervenciones se realizó a través de ruedas de prensa a nivel loca, organizadas por Colectivo Tomate como socio implementador,  en compañía gobiernos locales, COMEX, GIZ  y otros aliados estratégicos.

Adicionalmente, se crearon micrositios en Google Sites que sirven como hubs de información accesible y actualizada sobre el proyecto. Estos micrositios proporcionan detalles de las intervenciones, metodologías empleadas, resultados obtenidos y próximos pasos. Además, ofrecen recursos educativos como guías y herramientas relevantes para la gestión del arbolado urbano y la reforestación. 

  • El respaldo de la GIZ y el gobierno federal de México como impulsores del proyecto aportó seriedad y relevancia, lo que favoreció su aceptación.
  • Todos los actores compartían un interés común en la sostenibilidad urbana y la reforestación, lo que facilitó una coordinación efectiva y un compromiso conjunto.
  • La creación de micrositios permitió una difusión continua de información sobre el proyecto, accesible desde cualquier lugar y en cualquier momento.

     

  • La difusión a través de ruedas de prensa locales y la colaboración con socios estratégicos demostraron ser efectivas para aumentar la visibilidad y aceptación del proyecto. 
  • Los micrositios en Google Sites fueron herramientas efectivas para compartir información detallada durante el proyecto y después de finalizarlo. 
  • La experiencia del proyecto resaltó la necesidad de estar abiertos al aprendizaje continuo y a la adaptación de estrategias según las condiciones locales y los resultados obtenidos.
  • La implementación exitosa del proyecto proporcionó un modelo replicable y escalable para otras ciudades y comunidades interesadas en iniciativas similares de reforestación y gestión sostenible del arbolado urbano.
Capacitación técnica-operativa en el diagnóstico y manejo del arbolado urbano

El fortalecimiento de capacidades técnicas y operativas de los actores clave en la gestión del arbolado urbano y áreas verdes, se realizaron tres talleres presenciales y un curso virtual. Estos eventos estuvieron dirigidos a gobiernos locales, académicos, empresas privadas, organizaciones no gubernamentales y miembros de la sociedad civil con capacidad e interés en influir en la toma de decisiones sobre el paisaje urbano de cada ciudad beneficiada por el proyecto. 

El objetivo principal fue incrementar capacidades en el diagnóstico y manejo del arbolado urbano, proporcionando conocimientos y herramientas esenciales para una gestión eficiente y sostenible de los de la infraestructura verde. En cada evento presencial se abordó la siguiente temática, con variaciones adecuadas al nivel de conocimientos de los participantes: 

  • Presentación del proyecto Sembrando Ciudades
  • Toolkit de infraestructura verde y niñez, resultados para cada ciudad.
  • Plan Integral de Manejo del Arbolado.
  • Macro y micro diagnóstico.
  • Inventarios y censos.
  • Normatividad.
  • Zonificación de las necesidades de reverdecimiento.
  • Área de intervención, estrategias y objetivos.
  • Selección de especies y plantas en vivero.
  • Involucramiento comunitario.
  • Pilotos que inspiran: ejecución de las intervenciones.
  • Pasos críticos en la reforestación urbana.
  • Evaluación y medidores de éxito. 
  • Calidad del aire y su relación con la infraestructura verde. 
  • Dictaminación y recomendaciones de manejo para el arbolado urbano.

En el curso virtual tiene el mismo objetivo que los talleres, por lo que se complementan y refuerzan. Sin embargo, en este evento se enfoca en:

  • Calcular y valorar económicamente los servicios ecosistémicos proporcionados por el arbolado urbano.
  • Generar información para promover una gestión urbana informada, a través de la identificación y caracterización de árboles, así como la identificación de espacios plantables.
  • Conocer la normatividad, las entidades involucradas en la gestión del arbolado urbano, así como las oportunidades de financiamiento y recursos para promover la reforestación de zonas urbanas.
  • Desarrollar un plan integral de manejo del arbolado urbano con el fin de garantizar la conservación y el desarrollo sostenible del entorno urbano.

 


 

  • Los talleres presenciales y el curso virtual ofrecieron capacitación exhaustiva y actualizada sobre múltiples aspectos de la gestión del arbolado urbano en las ciudades beneficiadas por el proyecto, lo cual despertó un gran interés entre los participantes.
  • Se necesita programar talleres regulares para mantener actualizados a los profesionales y actores involucrados en la gestión del arbolado urbano. La capacitación continua, especialmente de los recursos humanos del gobierno municipal garantizará que el personal esté al tanto de las últimas tendencias, prácticas y tecnologías relacionadas con la gestión sostenible del arbolado urbano.
  • La integración de los ciudadanos, el gobierno local, la sociedad civil, la academia y el sector privado es esencial para establecer alianzas sólidas con la capacidad de actuar de manera eficiente en términos de financiamiento, recursos humanos y técnicos. En este sentido, es esencial promover espacios de diálogo y encuentro periódicos donde todas las partes interesadas puedan compartir conocimientos, experiencias y recursos. Además, es importante establecer mecanismos formales de cooperación y coordinación entre estas instituciones para facilitar la implementación de proyectos conjuntos.

     

Pilotos que inspiran: la reforestación escolar como medida de adaptación al cambio climático

Una vez identificados los espacios con mayor necesidad de reforestación urbana, se seleccionaron centros educativos con potencial para desarrollar intervenciones de reforestación escolar. Posteriormente, el proyecto se compartió con la Secretaría de Educación correspondiente para verificar la viabilidad de las escuelas elegidas. De esta manera, la escuela primaria Alfonso Arroyo Flores, ubicada en el municipio de Boca del Río, fue seleccionada para esta actividad. Se realizó una visita al instituto para presentar y socializar la iniciativa ante las autoridades escolares, asegurando su colaboración y apoyo en la implementación de las actividades de reforestación.

El siguiente paso fue la elaboración de un estudio diagnóstico de la zona de intervención para analizar la fertilidad del suelo, complementado con un vuelo de dron para generar el diseño de las intervenciones. Este diseño, validado por la comunidad escolar, se basó en el Método Miyawaki, un enfoque de forestación de alta diversidad y densidad que acelera el desarrollo de la vegetación y otros procesos ecológicos.

La implementación de las actividades de reforestación se dividió en dos etapas. La primera etapa se centró en la concientización y educación ambiental. Se llevó a cabo una explicación a la comunidad estudiantil, que incluía a niños, jóvenes y docentes, sobre la importancia de los árboles en entornos urbanos y los principios de los bosques Miyawaki, así como los puntos críticos en el proceso de reforestación. Se utilizó un lenguaje accesible y apropiado para el grupo de edad, promoviendo la participación activa para facilitar un aprendizaje significativo. En la segunda etapa, se pusieron en práctica los conocimientos adquiridos durante la etapa anterior y se llevó a cabo la reforestación escolar en conjunto con los niños.

Esta experiencia no solo permitió la mejora tangible de la infraestructura verde, sino que también brindó la oportunidad de concientizar a los estudiantes y permitirles experimentar de manera sensorial el proceso de reforestación.

  • La colaboración y respaldo de la Secretaría de Educación y las autoridades escolares fueron fundamentales para asegurar la viabilidad de las intervenciones.
  • La involucración activa de la comunidad escolar, incluyendo estudiantes, docentes y padres de familia, fomentó un sentido de pertenencia y responsabilidad hacia el proyecto.
  • Considerar la opinión de los niños como principales usuarios y beneficiarios del espacio escolar.
  • Involucrar a toda la comunidad escolar desde el inicio del proyecto aumenta el sentido de pertenencia y responsabilidad hacia los espacios verdes.
  • Utilizar la reforestación escolar como una herramienta pedagógica es esencial para asegurar la sostenibilidad a largo plazo de estos proyectos. Las actividades prácticas de plantación y cuidado de árboles proporcionan lecciones valiosas sobre ecología, sostenibilidad y responsabilidad ambiental.
Toolkit de infraestructura verde y niñez: herramienta para la toma de decisiones informadas sobre las necesidades de reverdecimiento urbano.

El objetivo de esta fase consistió en generar un compendio de herramientas para guiar la toma de decisiones informadas sobre las necesidades de reforestación urbana en cinco ciudades costeras Mexicanas (Boca del Río, Veracruz; Mérida, Yucatán; San Mateo del Mar, Oaxaca; Tepic, Nayarit; Tijuana, Baja California). 

  1. Se preparó un compendio de herramientas a escala de paisaje con los productos:
  • Valoración económica de los servicios ecosistémicos proporcionados por el arbolado urbano 
  • Mapa de Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada (NDVI)
  • Mapa de Índice de Vista Verde (GVI)
  • Mapa de Fuentes Fijas de Contaminación (FFC)
  • Mapa de Índice de Equidad de Acceso Infantil a la Naturaleza.
  • Mapa de Islas Urbanas de Calor (IUC)
  1. La línea base para la gestión eficiente del arbolado urbano se elaboró a través del componente detalle calle por calle de un inventario digital de alta resolución, representativo de los ejes e islas viales de cada ciudad. Este inventario no solo registró los árboles existentes y sus necesidades de mantenimiento, sino que también identificó los espacios plantables, se identificaron y catalogaron los espacios plantables disponibles, especificando las características adecuadas de cada área, así como el tipo de árbol que se puede plantar en cada sitio. Este enfoque integral garantiza una planificación más precisa y sostenible, optimizando la selección de especies y mejorando la salud y biodiversidad del arbolado urbano.

     

  2. Adicionalmente, se prepararon herramientas de educación y diseño. Se elaboró un guía práctica de reforestación urbana y dos paletas vegetales para la reforestación climáticamente inteligente. 
  • Disponibilidad de datos geoespaciales y estadísticos precisos.
  • Apertura de los gobiernos locales para recibir y utilizar la información. 
  • Las herramientas y datos proporcionadas complementan las estrategias actuales de de planificación urbana
  • La colaboración entre diversos campos de estudio, como ecología, urbanismo y cambio climático, es crucial para abordar los desafíos complejos de la reforestación urbana de manera integral.
  • Es importante no solo identificar problemas, sino también proponer soluciones concretas y viables. Las recomendaciones deben ser prácticas y enfocadas en resolver los desafíos planteados.
4. Sumar socios estratégicos para diversificar las ofertas de actividades para el visitante.

 Al principio se generó una nueva unidad de negocio, con el fin de ofrecer servicios de gastronomía, para lo cual, se realizaron algunas inversiones dirigidas a la restauración de infraestructura.

Desde la Fundación, llevar a cabo la administración y logística de una unidad de negocios gastronómica, superaba las capacidades de gestión, por lo que se decide buscar un socio estratégico que ofrezca este servicio en el Parador Villavicencio, abonándole a la Fundación un derecho de concesión. Luego se continúa buscando otros socios estratégicos para ampliar la oferta turística con actividades de aventura. Es así que se decide trabajar con Martur SA, agencia de turismo emisivo y receptivo local, que ofrece el servicio de Andes Truck en un principio, con excursiones overlanding a la Reserva y luego decide invertir en un parque de aventura creando el Villavicencio Park con arborismo, tirolesa y zipline.

Con el tiempo, esta misma empresa incursiona en eventos deportivos y toman el desafío de organizar un ultra trail en la Reserva, con todos los cuidados y medición de impacto que implica realizarlo en un área natural.

 De esta forma, el socio aporta el know how de la actividad, traccionando visitantes para la Reserva, que se traducen en tickets de ingreso; y desde la Fundación se continúa con la gestión y cuidado del área.

Hay varios factores que suman y facilitan el avanzar en este proyecto, el primero es disponer de espacios físicos e infraestructura para ofrecer servicios. Ser un sitio con precedente de visitación turística local y nacional facilita la atención y permite ir construyendo la imagen sumando atractivos para lograr la re-visitación.

Contar con un equipo de perfil profesional que permita la creación y gestión del área y tenga la iniciativa de crear nuevas experiencias.

Al intentar diversificar la oferta turística, entendimos que excedía a la capacidad de gestión de la Fundación, por lo que se decidió incorporar socios estratégicos que desarrollaran la oferta garantizando la calidad.

Es más eficiente y productivo delegar o tercerizar a quienes tienen el know how y la capacidad de gestionar actividades específicas y no distraer el manejo y la gestión de la Reserva por querer ampliar demasiado el espectro. Sumar socios que nos acompañen y que velen por seguir los parámetros de medir el impacto y el compromiso con la conservación es clave para poder seguir avanzando en acciones que nos permitan la sustentabilidad del área natural.

3. Creación de la Fundación Villavicencio

Como la personería jurídica de la compañía, no contemplaba dentro de sus actividades la turística, no se podía emitir factura a consumidor final, ni cobrar los tickets de ingreso a la Reserva. Por lo tanto, se decide crear la Fundación Villavicencio, para gestionar de manera más ágil y adecuada el área protegida.

Por las características de la gestión de la Reserva, fue necesario una estructura más ágil para gestionar proveedores, pagos y demás. Si bien todo siguió siendo monitoreado y aprobado por el área financiera de Danone, desde la Fundación se podían iniciar los procesos y darle seguimiento.

Desde Aguas Danone Argentina S.A. (ADA), no se podía cobrar a consumidor final, porque en su estatuto no estaba contemplada la actividad turística. 

ADA no podía demostrar cuántos fondos destinaba a la Reserva, porque se diluían con los costos de funcionamiento de la planta embotelladora, ya que se compartían proveedores, lo que generaba problemas administrativos y de gestión.

Gestionar una fundación es un aprendizaje continuo, en los inicios la adaptación fue ardua, se debía administrar el presupuesto para lograr avances de mejora y ampliación de la infraestructura y a la par conformar un equipo que diera soporte a la actividad turística. A través de la experiencia, errores y aciertos, enfrentar desafíos no previstos, se aprende a mejorar continuamente la gestión financiera. Este aprendizaje permite asignar más recursos a la conservación, el manejo de áreas protegidas, y el mantenimiento de infraestructuras, fortaleciendo el impacto de la fundación en el largo plazo."  

2. Creación de un Business Case de turismo.

La Reserva Villavicencio en un principio contaba solo con dos áreas dentro de su estructura de gestión:  guardaparque y educación ambiental. 

Se desarrolló el proyecto turístico, con estimaciones de presupuesto e ingresos anuales. Se planteó crear el Área de Turismo y contratar guías de sitio dedicados a la atención al visitante. Esto se presentó como business case a la compañía para solicitar soporte financiero (inversión inicial). 

En el año 2013 el Hotel es declarado Monumento Histórico Nacional, por una iniciativa del gobierno nacional. Esta declaración implica un mayor compromiso de conservación y un reconocimiento al patrimonio histórico cultural, sumado al natural, biológico y paisajístico de la Reserva. 

 

El haber realizado la prueba piloto, permitió conocer el comportamiento del visitante y la predisposición a abonar un ticket para ingresar a los predios. Además, el plan de manejo planteaba la creación del área de uso público, lo cual era una necesidad. Por otro lado, ser un atractivo turístico mendocino y contar con un ícono dentro de la propiedad, como el Hotel Villavicencio (a su vez, imagen y marca de un producto muy conocido por los argentinos), fue una gran ventaja para sustentar la idea.  

 

Se logró cumplir lo que se planteó, pero en el camino hubo que realizar ajustes y cambios a lo previsto ya que se había sobreestimado ingresos y, por lo tanto, estructura de personal, entre otras cosas.

También se fueron planteando cambios en el servicio y con el tiempo se detectaron nuevas oportunidades y necesidades asociadas, como la de generar una forma diferente de gestión, por lo que se decidió crear una Fundación.

 

1. Prueba Piloto: Cobro de ticket de ingreso con experiencia de visita al Hotel Villavicencio

Hasta 2014, el acceso al predio del Hotel Villavicencio era libre. Esto cambió con una prueba piloto en alianza con una empresa local de turismo. Esta iniciativa propuso visitas guiadas por el predio con aportes voluntarios, con guías capacitados por la Reserva, marcando un enfoque innovador hacia la conservación y la educación ambiental. El objetivo era demostrar a Danone, compañía del sector alimenticio y propietaria de la Reserva, la posibilidad de obtener rentabilidad del Área Natural Protegida (ANP) para promover el desarrollo turístico que sustente la conservación. Este movimiento buscaba la aprobación de Danone para expandir las actividades turísticas, un área totalmente nueva para la empresa, enfatizando el potencial de un turismo responsable y educativo. 

La colaboración con la empresa de turismo implicó compartir ingresos y reportes de ventas, evidenciando cómo la conservación puede coexistir con la generación de ingresos. Este proyecto piloto no solo enriqueció la experiencia de los visitantes, sino que también estableció un modelo sostenible de gestión turística, demostrando el valor agregado de integrar la conservación ambiental con la viabilidad económica en el marco del turismo sostenible.

Un factor que facilitó la prueba piloto es que la Reserva ya era un punto turístico establecido en la región, implicaba un volumen de visitantes espontáneos, de agencias de turismo y particulares, lo que nos daba el aliciente de que era posible, la duda era cómo iban a tomar la arancelización de un espacio que había tenido acceso liberado durante tanto tiempo. 

Por otro lado, la prueba piloto la realizó una organización que aceptó la propuesta y sus riesgos, sin que la compañía tuviese que realizar una inversión o comprometer capital.

Cobrar por visitas guiadas resaltó la importancia de un sistema de control de visitantes para monitorear ingresos reales, evidenciando una brecha en nuestro entendimiento financiero. La resistencia inicial de las agencias de turismo, que hasta el momento vendían la excursión a Villavicencio disponiendo libremente del espacio, fue un desafío significativo. La negociación se convirtió en una herramienta crucial para armonizar intereses y organizar la actividad turística de manera sostenible. Estas experiencias subrayan la necesidad de infraestructura adecuada para la gestión y la importancia de establecer relaciones sólidas con socios del sector turístico, asegurando que ambos aspectos sean fundamentales para el éxito y la sostenibilidad del turismo en áreas protegidas. 

También nos marcó la importancia de comunicar en primera persona la historia y riqueza natural del sitio, como así también el compromiso con la conservación y no dejarlo en manos de terceros.