5. RECONOCIMIENTO DE EXPERIENCIA EXITOSA EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

La postulación de la Red Mujeres Naturaleza y Paz en la convocatoria que se realizó en abril de 2023 a la que se presentaron 43 casos, 12 de ellos correspondientes a prácticas en Colombia, fue el inicio del camino del reconocimiento del trabajo en equipo realizado. En el año 2025, fue seleccionada como uno de las 25 casos de experiencias exitosas en el tema de Fortalecimiento de capacidades y gestión comunitaria rural, reconocida en la publicación titulada “Buenas Prácticas Enfocadas en Ciencia, Tecnología e Innovación para la Resiliencia, el Liderazgo y la Autonomía de las Mujeres y las Niñas en la Reducción del Riesgo de Desastres, en la región de América Latina y el Caribe” publicado por la UNDRR (Red de América Latina y el Caribe de Mujeres para la Reducción del Riesgo de Desastres, 2023). 

 

Esta es una puntada de las muchas que han tejido los y las integrantes de la red y que ha permitido su resistencia para visibilizar el valor de las áreas protegidas y conservadas en el territorio Chingaza, específicamente en el Municipio de La Calera (departamento de Cundinamarca) y la cordillera de los andes en Colombia. El reconocimiento como Buena Práctica lo clasificó como un Caso de innovación social: se refiere a la creación de soluciones innovadoras paraa bordar desaríos sociales y mejorar la calidad de vida de las personas; con impacto positivo y tangile, con liderazgo comunitario que favorece mujeres y niñas. Además conjuga acciones para los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el Marco de Sendai.  

 

 

  1. La comprensión del riesgo como generador de capital emocional permite generar experiencias transformadoras en los procesos sociales de comunicación y educación comunitaria 
  2. El diálogo de saberes, intercambio de prácticas y experiencias aporta a la resiliencia y sostenibilidad de las áreas protegidas y conservadas, especialmente con el liderazgo y autonomía de las mujeres y las niñas.

El reconocimiento de la infraestructura y elementos expuestos en las áreas rurales es un punto de partida para identificar debilidades en el conocimiento del riesgo y falta de capacidades para el afrontamiento y atención de desastres en las comunidades rurales. Ser conscientes del por qué y para qué sirven los procesos de sensibilización y fortalecimiento de capacidades es riesgo climático y de desastres es primordial como primer paso para reducir pérdidas y daños relacionados con efectos adversos del cambio climático, incluidos los fenómenos meteorológicos extremos y los fenómenos de evolución lenta con medidas focalizadas y diferenciadas de acuerdo a las dinámicas de las áreas protegidas y conservadas y su zona adyacente que cumple una función amortiguadora. 

4. CONFORMANDO RED DE COLABORACIÓN Y APRENDIZAJE

El punto de inicio lo marcó la necesidad de articular diferentes actores para ampliar los conocimientos en riesgos de desastres y estar mejor preparados para estas situaciones de riesgo, más allá de las instancias formales que existen a nivel de Colombia como los Consejos Municipales y Departamentales de Gestión de Riesgos de Desastres. Con el propósito de dar forma y consolidar esta articulación de actores se generó la Red de aprendizaje Naturaleza y Paz del Municipio de La Calera (Cundinamarca) con el ánimo de generar aprendizaje colaborativo y experiencial y a través de prácticas conjuntas, para así lograr cohesión social y estar preparados para afrontar el riesgo climático, adaptarse al impacto de la variabilidad climática y los desastres que de manera subyacente pueden afectar los medios de vida, las actividades de la comunidades y en general su buen vivir en el territorio Chingaza.

La ventaja de la red, es que se reconoce y valora la riqueza de ecosistemas en el municipio representada en áreas protegidas de carácter nacional como el PNN Chingaza y áreas regionales como los Distritos de Manejo y áreas conservadas de carácter privado, que por sí mismas aportan como soluciones basadas en la naturaleza, pero que requieren de co-gestión para generar su manejo eficiente, de manera que se reduzca el riesgo a partir de acciones de restauración, conservación, conversión evitada de bosques, restauración de turberas en áreas del páramo, regeneración natural asistida y más de estas acciones que se consideran a la vez soluciones naturales del clima. Las principales ventajas se relacionan con el fortalecimiento de capacidades que los actores unidos puedan diseñar estrategias a su medida y de acuerdo al contexto bajo un enfoque multisectorial e intergeneracional, permitiendo reducir vulnerabilidades a través del fortalecimiento de la resiliencia a los riesgos ambientales. 

 

1. Creación de redes de aprendizaje colaborativo e intergeneracional como estrategia para la gestión integral del riesgo climático

2. Cogestión de áreas protegidas y fortalecimiento de capacidades locales como motor para soluciones basadas en la naturaleza

La experiencia en el Municipio de La Calera demuestra que el trabajo colaborativo entre comunidades locales, instituciones públicas, organización civil, empresa privada y actores académicos, bajo un enfoque multisectorial e intergeneracional, permite no solo compartir saberes y experiencias, sino también diseñar e implementar estrategias adaptadas al contexto territorial. Esta forma de gobernanza participativa fomenta la apropiación social de los procesos de gestión del riesgo, facilita la adopción de soluciones basadas en la naturaleza, y contribuye a reducir vulnerabilidades, conservar ecosistemas estratégicos y mejorar el bienestar colectivo. Todo ello en el marco de la implementación del Plan  de Manejo del PNN Chingaza (2017), en proceso de actualización.

3. SINERGIA ENTRE CONSERVACIÓN DE ÁREAS PROTEGIDAS Y LA REDUCCIÓN DEL RIESGO DE DESASTRES

Armonizar el sentir, pensar y actuar en los procesos de formación de personas, sociedades y ecosistemas resilientes, requiere la aplicación de principios comunes, sinérgicos y complementarios entre biodiversidad y reducción del riesgo de desastres, que implica abordar los factores indirectos y sistémicos de la vulnerabilidad, la exposición y la capacidad de reacción. Esto implica reconocer fragilidades , comprender los procesos y funciones de los ecosistemas del Páramo de Chingaza y la incidencia de los conflictos socioambientales y los aspectos mencionados anteriormente en la vulnerabilidad de dichos ecosistemas y las personas. 

Las áreas protegidas y conservadas son refugio para la biodiversidad, capturan carbono y conservan el stok; de allí provienen las contribuciones de la naturaleza para las pesonas y con los diversos actores estratégicos se pueden establecer mecanismos colaborativos y de asociación multiactor para su administración y manejo, el bienestar, la calidad de vida de las personas y el desarrollo sostenible de la región.  En el Plan de Emergencias y Contingencias por Desastres Naturales y Socionaturales del PNN Chingaza se reconocieron las siguientes amenazas, haciendo su evaluación a través de la estimación de la intensidad, frecuencia y territorio afectado: 1) Procesos de remoción en masa, 2) Inundaciones, 3) Heladas, 4) Incendios de cobertura vegetal, 5) Sismos, 6) Vendavales, 7) Avenidas torrenciales y 8) Tormentas eléctricas. De igual manera se realizó la evaluación de la vulnerabilidad y el riesgo y se socializó con actores estrtégicos y la red de aprendizaje como una de las 21 actividades establecidas en el plan en sus 3 componentes de 1) conocimiento del riesgo, 2) reducción del riesgo y 3) atención del desastre. Conocer el instrumento mencionado anteriormente y planear la formulación o actualización del plan de emergencias a nivel veredal, constituyó un avance para fortalecer la capacidad de respuesta de las comunidades rurales de este municipio. Aunque el PNN Chingaza tiene jurisdicción en 11 municipios en los departamentos de Meta y Cundinamarca y existe articulación con los demás, este experiencia exitosa cobija unicamente el municipio de La Calera.

Discernir el papel del monitoreo del riesgo permite valorar los comportamientos y la cultura preventiva frente al riesgo y reconocer la importancia de las alertas tempranas emitidas por las entidades competentes y las alertas comunitarias, como primer instrumento en las áreas rurales dispersas.

  1. Entendimiento del valor de la naturaleza en la reducción del riesgo de desastres
  2. Complementariedad entre la gestión institucional y las prácticas comunitarias que protegen la naturaleza como medio de vida de las comunidades rurales

Cuando las comunidades se reconocen como parte de los socioecosistemas, son capaces de entender que se requieren estrategias para restaurar la composición, estructura, función y servicios de los ecosistemas, la valoración y protección de los sistemas sociales en conjunto y de manera interdependiente. Así, se canalizan esfuerzos en acciones locales para generar cambios transformadores en respuesta al clima cambiante y los desastres, y se promueve la cooperación en materia de la reducción del riesgo de desastres basada en ecosistemas y la adaptación al cambio climático basada en ecosistemas que integra restauración ecológica, manejo sostenible y conservación.

2. GOBERNANZA TERRITORIAL INTEGRAL: BASE DE LA INNOVACIÓN SOCIAL

El enfoque comunitario en la gestión integral del riesgo climático y de desastres se orienta hacia la consolidación de la corresponsabilidad civil adaptandose a las dinámicas socioeconómicas, basados en procesos de participación de la comunidad y su organización, acciones colectivas, fortalecimiento de la capacidad de liderazgo y gestión, interacción con el sector gubernamental e incorporación de la perspectiva de género.  La gobernanza integral del territorio debe ser fortalecida desde sus diferentes aristas para abordar conflictos socioambientales y evitar que se multipliquen y se transmita en cascada los riesgos.  Se requiere en la gestión una visión holística e integradora que incluya elementos para una buena y eficiente administración de los recursos naturales, gestión del cambio climático, gestión del riesgo de desastres y administración de las áreas protegidas. La gestión incluye pactos, consensos, acuerdos, formación de redes, apropiacion y empoderamiento de los actores organizados para la ejecución de estrategias e implementación de planes y acciones en escenarios de manejo horizontal, no jerárquico, donde se aborden las diferentes tendencias del subsistema ambiental e institucional

 Bajo estas premisas, se puede aprovechar las oportunidades, comprender las brechas para desarrollar capacidades y utilizar mecanismos de incidencia y coordinación prácticos, transparentes,  efectivos y eficientes que reduzcan la degradación de las áreas protegidas y las pérdidas en ecosistemas como factor subyacente con enfoque a las comunidades.

  1. Articulación multiactor, multiescalar e intersectorial como base de una gobernanza colaborativa y adaptativa, con un enfoque de abajo hacia arriba "bottom.up"
  2. Enfoque territorial holístico e integrador para la gestión sostenible de los recursos naturales, el riesgo de desastres y la gobernanza climática

Las comunidades que reconocen, valoran sus ecosistemas y áreas protegidas y conocen la dinámica de los fenómenos hidrometeorológicos de su territorio pueden generar procesos de adaptación al cambio climático a partir de la comunicación e información de sus efectos, mejorando la resiliencia comunitaria con nuevas prácticas y formas de organización, nuevos modelos de co-creación, nuevas redes de cooperación y colaboración, nuevos procesos para el desarrollo de capacidades de innovación social entorno a la gestión del conocimiento y los ciclos de aprendizaje en la base comunitaria.

1. PNN CHINGAZA COMO GESTOR DE RESILIENCIA Y PAZ

La incorporación de la perspectiva de género es importante en el manejo eficiente de los recursos naturales, la gestión de la variabilidad, cambio climático y los riesgos por desastres asociadas a estas condiciones de cambio, puesto que propicia la reducción de brechas de la vulnerabilidad, exposición y las desigualdades para mujeres y grupos minoritarios.  Estos casos de participación de la mujer se deben resaltar y comunicar, junto con los resultados en diferentes medios y ser un ejemplo de caso exitoso para la región, como incubadoras de emprendimientos y prácticas de abordaje de la interseccionalidad. El reconocimiento de los líderazgos de mujeres y otros grupos, permiten el empoderamiento y enriquecimiento de la gestión comunitaria para la conservación de la naturaleza y la construcción de paz en Colombia, bajo principios de solidaridad y corresponsabilidad.

  1. Incorporación del enfoque de género como herramienta transversal para la gestión ambiental y climática
  2. Participación comunitaria activa en procesos de conservación y construcción de resiliencia comunitaria

Las comunidades que entienden y gestionan sus riesgos climáticos e identifican las amenazas naturales y socionaturales, no solo asumen un papel protagónico en la reducción de su vulnerabilidad, sino que también se convierten en agentes transformadores en escenarios de posconflicto y sostenibilidad.

Volunteer Engagement and Corporate Social Responsibility in Protected Areas

This building block focuses on harnessing the power of volunteerism and corporate social responsibility (CSR) programs to enhance the management of protected areas in Ecuador. By engaging both national and international volunteers and collaborating with tourism companies under CSR initiatives, the project leverages diverse skills and resources to support conservation efforts. These programs ensure the operational sustainability of these areas while providing volunteers with valuable experience and the opportunity to contribute to environmental stewardship in a uniquely beautiful country.

  • Strategic Partnerships with Tourism Companies: Establishing collaborations with tourism enterprises that view CSR as integral to their business model helps ensure ongoing support for conservation efforts. These partnerships often result in financial and in-kind contributions to the protected areas.
  • Structured Volunteer Programs: Developing well-organized volunteer programs that attract both local and international participants. These programs are designed to match the skills and interests of volunteers with the needs of the protected areas, such as monitoring biodiversity, environmental education, and infrastructure maintenance.
  • Promotion and Outreach: Effective marketing of volunteer opportunities and CSR programs to target demographics that are most likely to contribute positively to conservation efforts.
  • Commercial Alignment with Conservation Goals: Tourism companies benefit commercially from the well-maintained and biologically rich environments that attract tourists. Their involvement in CSR ensures that their business interests align with conservation objectives, creating a symbiotic relationship.
  • Skill Development for Volunteers: Volunteers gain significant skills and experiences that enhance their personal and professional growth. The practical experience gained in diverse conservation activities such as species monitoring and environmental education is invaluable.
  • Enhanced Conservation Impact: The energy and efforts of volunteers significantly strengthen the management of protected areas. The diverse tasks they perform, from scientific research to public engagement, amplify the overall conservation impact and ensure the sustainability of these initiatives.
  • Community and International Engagement: The inclusion of local communities and international participants in volunteer programs fosters a greater understanding of global conservation challenges and encourages a collaborative approach to solving environmental issues.
Effective Infrastructure Management in Protected Areas

Effective infrastructure management in Ecuador's protected areas has been essential for enhancing functionality and sustainability. This strategic approach has streamlined the alignment of various projects funded by different sources to improve construction, equipment, and maintenance of essential facilities. Key infrastructures such as high mountain shelters and community-managed souvenir shops have been pivotal in promoting sustainable livelihoods and supporting local initiatives.

  • Integrated Project Management: Leveraging funding from diverse donors and coordinating these efforts ensured that infrastructure projects were not only well-supported but also aligned with broader conservation goals.
  • Community Concessions and Engagement: Facilitating concession agreements with local communities for managing facilities like souvenir shops directly linked economic benefits to conservation efforts, ensuring community buy-in and support.
  • Capacity Building and Training: Providing essential training to local communities in managing concessions and maintaining infrastructure was crucial for the successful and sustainable management of these projects.
  • Infrastructure Maintenance Manual: The development of a comprehensive manual for the maintenance of infrastructure across various climates within SNAP has been a critical tool for standardizing maintenance practices and ensuring durability.
  • Management Models for High Mountain Shelters: Implementing tailored management models for high mountain shelters helped in maintaining these crucial facilities, which are vital for both safety and tourism.
  • Contract and Concession Definitions: Clearly defining the terms for contracts and concessions facilitated transparent and effective partnerships with local communities and businesses, ensuring that these agreements support long-term sustainability.
  • Support Mechanisms for Sustainability: Establishing robust support systems for community-led initiatives has enabled these projects to transition into concession-managed enterprises, enhancing their sustainability and economic viability.
  • Legal Framework for Long-Term Concessions: The creation of a solid legal framework for long-term concession agreements with expert firms has been instrumental in strengthening local economies by ensuring that businesses operating within protected areas contribute to conservation and community development.
Competitive Funding Mechanism for Community Initiatives

The competitive funding mechanism within the SNAP project has been a cornerstone in promoting sustainable community-led initiatives across protected areas in Ecuador. This strategic approach focused on diversifying income sources and transforming local challenges into tangible outcomes. By supporting projects related to ecotourism, restoration, reforestation, sustainable livestock farming, organic gardening, and sustainable fishing, the mechanism has improved the quality of life for local communities while enhancing the conservation of biodiversity.

  • Community Engagement: The active participation of local communities in designing and implementing projects ensured that the initiatives were well-aligned with local needs and conservation goals.
  • Diverse Funding Sources: Leveraging funds from various donors, including international grants and private sectors, provided the necessary financial support to kickstart and sustain these initiatives.
  • Training and Capacity Building: Providing communities with training in project management, sustainable practices, and financial literacy empowered them to successfully manage and expand their projects.
  • Economic Leverage: For every dollar invested in these community projects, more than double was leveraged through additional funding and in-kind contributions, demonstrating a high return on investment and the economic viability of conservation efforts.
  • Problem Transformation: By converting local challenges into opportunities, the projects not only addressed environmental and social issues but also fostered a sense of ownership and responsibility among local stakeholders.
  • Network Expansion: The success of the funded projects attracted more partners and fostered a wider network of conservation stewards, expanding the guardianship over protected areas and ensuring long-term sustainability.
Establishment of sea turtle hatcheries

Ecological Challenges 

One of the documented challenges in the sea turtle’s conservation is the looting of nests, along with the impacts of climate change (rising sea levels), which visibly affect the chances of hatchlings reaching adulthood. This is particularly concerning given that only a small percentage of hatchlings reach the first years of life.

To address this issue, FUNDECODES and the hotel sector has supported the construction of nurseries on different beaches. These beaches have permanent security, which allows for adequate protection of the nests, as well as carrying out effective monitoring of key nesting areas. This monitoring helps document high density nesting zones natural predation, looting and births in situ. Additionally, some females that nest on the beach have been tagged with metal plates for research purposes. On the other hand, these activities are linked to tourism activities, allowing hotel guests to enjoy the release of the turtles, generating an awareness process.

One of the key messages is the engagement of civil society actors, which allows to implement private investment mechanisms in biodiversity conservation and management. This experience demonstrates that the articulation and investment of private companies in biodiversity conservation management is possible, ensuring the protection and sustainability of vital ecosystem services

Hatcheries are a useful tool in in-situ sea turtle conservation, helping to protect nests that may be affected by poaching, natural predation and climate change impacts related to rising sea levels. They also play a crucial role in monitoring nesting success, tracking data such as  number of eggs laid vs. hatched , arrival and hatching dates, becoming an effective mechanism for the conservation of these important species.

To safeguard vulnerable nests, a nursery was built on the beach following current regulations, especially for the protection of nests that needed to be protected ex situ due to the risk of anthropogenic activities. The nursery was located close to the hotels to benefit from permanent security. It has a rectangular shape, 50 m wide and 20 m long, and 1.9 m high to facilitate accessibility and management. The structure is light and up to 100 nests can be relocated in the space at a density of 1 nest per square meter. The clutches have codes that are listed in the logbook.

Responsible code of conduct for whale sharks (Rhincodon typus) responsible tourism.

This protocol is contained in Resolution 0841 of 2024, issued by the Corporación Autónoma Regional para el Desarrollo Sostenible del Chocó (Codechocó), which seeks to define behavioral actions and establish measures for  responsible whale sharks tourism (including other species) to safeguard their welfare. It is aimed at fishermen, tourists and the community in general. 

Measures include the number of boats allowed with a shark or group of sharks at the same time, the maximum time and minimum distance, the mandatory use of life jacket and the carrying capacity of the area. It also prohibits feeding sharks, swimming near them,  free-diving, and throwing garbage in places not designated for it. 

In addition to drafting the protocol, which was subsequently approved and adopted by Codechocó, the initiative also developed an outreach strategy in which infographics (digital and printed) were designed that summarize the main guidelines of the protocol and the ecological characteristics of  whale sharks, highlighting the importance of protecting the species.  This material is used to support education and outreach activities (e.g. workshops, lectures) involving fishermen, local communities, tourists and tour operators. 

The main contribution of this tool has been changing the behavior of tour operators, visitors, fishermen, and the community at large to adhere to these minimum measures for the protection and conservation of whale sharks. This shows a considerable degree of effectiveness and receptiveness to this type of measure, as well as the creation of positive perceptions of a scientific, responsible, and conservation-oriented tourism model.