
Aumentar la contribución comunitaria al delta del Buna

El Paisaje Protegido del Velipoje del río Buna (BRVPL), en el noroeste de Albania, se extiende por más de 20.000 hectáreas y abarca la laguna de Viluni, el río Buna y el golfo de Drini, que bordea el mar Adriático. El lugar ha sido designado zona protegida y, en virtud de la Convención de Ramsar, humedal de importancia internacional. El paisaje alberga especies endémicas de aves y plantas amenazadas y es un importante corredor migratorio entre el Mar Adriático y las zonas del interior.
La zona tiene unos 30.000 habitantes, con actividades como la agricultura, la ganadería, la pesca y el turismo. La población está cada vez más concienciada para proteger y preservar la riqueza natural del paisaje, pero las prácticas y prioridades locales siguen amenazando los valores naturales.
La solución consiste en ofrecer actividades que aumenten las ideas y la capacidad de la comunidad para contribuir a la protección y gestión del paisaje protegido.
Contexto
Défis à relever
La mayor parte del daño causado al paisaje protegido de Buna procede del turismo, la agricultura y las actividades cotidianas que no se apoyan en métodos o infraestructuras sostenibles. La invasión de la zona por nuevos desarrollos y prácticas destruye directamente la flora y la fauna y contamina la tierra y el agua.
Económicamente, la comunidad pierde con el tiempo cuando se pierden los recursos naturales, sin embargo esto no es evidente financieramente a corto plazo, y las decisiones se toman en función de la necesidad financiera inmediata.
Existe una clara preocupación social porque las grandes empresas suelen explotar y destruir la tierra, mientras que otros miembros de la comunidad no tienen un acceso justo a los recursos. Es más probable que estas personas locales y respetuosas con los valores naturales de su zona estén interesadas en empresas más pequeñas o en usos más sostenibles, pero no disponen de recursos para desarrollar iniciativas competitivas. El resultado es una batalla en la que la gente siente que debe elegir entre su sustento y el medio ambiente.
Ubicación
Procesar
Resumen del proceso
La inclusión y secuencia de los componentes básicos es muy importante para la calidad de los resultados.
Las sesiones de formación son fundamentales como base de un nuevo programa de subvenciones, especialmente cuando los beneficiarios carecen de experiencia. Garantizan que conozcan el proceso de solicitud de una subvención y en qué debe centrarse y qué debe conseguir su proyecto. Las sesiones de formación sobre política y estrategia, prioridades locales y solicitud de subvenciones tienen la ventaja de que proporcionan a la comunidad las herramientas necesarias para solicitar futuras subvenciones y oportunidades de financiación, una vez finalizado el proyecto actual.
El programa de subvenciones permite a la gente poner en marcha iniciativas sostenibles o mejorar las prácticas existentes, así como mejorar las capacidades de seguimiento y elaboración de informes. Además, puede servir para establecer nuevas conexiones útiles dentro de la comunidad y con los socios del proyecto, organizaciones más grandes, representantes gubernamentales y donantes.
Iniciar una oportunidad adicional hacia el final del programa de subvenciones, en este caso la feria del Día de la Buna, es beneficioso para dar a los beneficiarios la oportunidad de tomar la iniciativa en la organización de un evento que contribuya a un acontecimiento más amplio, y para que algunos presten servicios profesionales.
Bloques de construcción
Programa de formación para la Comunidad y las OSC
Las sesiones de formación estaban dirigidas a los miembros de la comunidad y las OSC, y pretendían sentar las bases para que pudieran desarrollar y proponer ideas de proyectos de forma eficaz.
Como el objetivo era la protección y gestión colaborativas del paisaje protegido, el plan de gestión del área protegida del río Buna fue el primer tema, para una comprensión compartida del plan y de los objetivos locales de gestión.
En segundo lugar, se hizo hincapié en las amenazas a los valores naturales, lo que ayudó a los participantes a comprender en qué podían centrar sus esfuerzos para tener un impacto más positivo.
A continuación se presentó un próximo programa de subvenciones y se celebró una sesión sobre cómo desarrollar ideas de proyectos y solicitar subvenciones acordes con la convocatoria. Se destacaron algunos de los principales problemas medioambientales de la zona, así como las actividades clave del plan de gestión.
Factores facilitadores
1. Financiación del programa de formación
2. Comprensión del puesto y de los conocimientos existentes, además de las lagunas de conocimiento del público destinatario
3. Personas que desean implicarse a través de la acción comunitaria
4. Un plan de gestión aprobado para garantizar la coherencia de las acciones comunitarias con las emprendidas por las responsabilidades.
Lección aprendida
El programa de subvenciones se convocó dos veces, y la primera no hubo formación introductoria. La segunda convocatoria contó con talleres preparatorios, en los que orientamos los temas y ayudamos a los proyectos a garantizar la coherencia con las acciones del plan de gestión. La calidad de las solicitudes fue mucho mayor en la segunda convocatoria.
Programa de pequeñas subvenciones
El programa de pequeñas subvenciones era un mecanismo financiero que permitía convertir las ideas en proyectos beneficiosos para el medio ambiente y la población local. Permitía a los miembros de la comunidad demostrar que el turismo sostenible, la agricultura, la gestión del agua y el ocio eran viables y cómo beneficiaban a la zona.
Tanto particulares como ONG tuvieron la oportunidad de solicitar subvenciones de hasta 20.000 euros para iniciativas locales. Los posibles beneficiarios recibieron directrices, entre ellas el requisito de que la propuesta implementara objetivos o actividades de la administración, especialmente en áreas prioritarias. También se exigía a los beneficiarios que consultaran con la autoridad de áreas protegidas, responsable de la gestión del paisaje protegido del Velipoje del río Buna.
Un panel formado por los socios del proyecto y las autoridades locales trabajó conjuntamente para evaluar y decidir las subvenciones concedidas.
Para la actividad final de un proyecto secundario de Buna, centrado en la participación de los jóvenes y la comunidad, reunimos a los beneficiarios para que lideraran la organización de un fin de semana de actos comunitarios para celebrar la naturaleza de Buna. Los actos incluyeron una gira mediática para el ecoturismo, un concierto en el río y un día de educación y visitas para escolares en la zona protegida.
Factores facilitadores
1. Población local comprometida o interesada
2. Apoyo de las autoridades locales
3. Financiación
Lección aprendida
Las expectativas deben estar claras por ambas partes. Los mecanismos de subvención suelen ser muy laboriosos, tanto para los beneficiarios como para la organización facilitadora, pero pueden ser eficaces; sólo es importante que se disponga de los recursos necesarios para garantizar que los beneficiarios reciban el apoyo necesario para llevar a cabo proyectos de alta calidad.
Impactos
La solución aúna la necesidad de sustento de la población y actividades que mejoran la protección y gestión del entorno natural.
Los impactos ambientales negativos se redujeron directamente gracias a las iniciativas que mejoraron la sostenibilidad de las actividades existentes, como la agricultura y el turismo. Otras iniciativas mejoraron directamente los valores de la biodiversidad, a través de la restauración y la protección. Los proyectos debían contribuir a la aplicación del plan de gestión de la zona protegida, lo que supuso un beneficio social adicional, ya que la sociedad civil colaboró más estrechamente con las autoridades. También aumentó la capacidad de los miembros de la comunidad para solicitar con éxito otros mecanismos de subvención, al aprender a redactar propuestas acordes con la política y la estrategia existentes.
Entre las repercusiones concretas cabe citar
- Reducción del uso de agua y productos químicos en la agricultura - aumento de la calidad y disponibilidad del agua
- Mayor concienciación sobre el impacto del clima en la agricultura y soluciones prácticas para adaptarse a nivel de explotación agrícola.
- Mayor publicidad y visibilidad de los valores naturales y las oportunidades para el turismo de naturaleza a través de campañas nacionales.
- Mayor disponibilidad de instalaciones ecoturísticas y opciones de actividades
- restauración ecológica directa mediante la revegetación de 2,5 hectáreas de la zona protegida por parte de los participantes locales
Beneficiarios
Miembros de la comunidad local, operadores de turismo sostenible, gestores de la zona protegida y organizaciones de la sociedad civil preocupadas por la protección del medio ambiente.
Objetivos de Desarrollo Sostenible
Historia

Samela Vata creció en la pequeña comunidad de Velipoje, a pocos minutos de la entrada al paisaje protegido. Desde muy joven reconoció la importancia del entorno natural de su localidad y vio la belleza del paisaje más allá del popular turismo de playa. Participó en actividades locales para proteger y restaurar el paisaje, incluidos proyectos juveniles en los que la población local restauraba y protegía directamente zonas de dunas propensas a la erosión.
Samela tiene la visión de diversificar el interés de la gente por la zona y aumentar el valor percibido de la naturaleza, especialmente a través del ecoturismo. Solicitó con éxito una subvención a través del programa de pequeñas subvenciones Living Buna, para desarrollar actividades en su iniciativa de ecoturismo, Farm 3B - Bed, Breakfast and Birdwatching, en Velipoje. El proyecto es único en la zona, ya que las demás ofertas son zonas de playa muy urbanizadas, que ofrecen actividades intensivas y dan lugar a playas masificadas en verano, pero completamente desiertas fuera de temporada.
El negocio ofrece alojamiento y alquiler de equipos para el ocio pasivo en la naturaleza: bicicletas, kayaks y equipos de senderismo. Samela y su familia también ofrecen actividades guiadas para conocer el paisaje protegido. Este tipo de turismo puede utilizarse todo el año, lo que reduce los problemas de estacionalidad. La granja 3B también dispone de un espacio para presentaciones sobre conservación de la naturaleza y reuniones.
El negocio tiene margen para crecer y, lo que es más importante, establece un modelo que puede tenerse en cuenta en las comunidades vecinas.
Cuando se celebró la actividad final de nuestro compromiso con los jóvenes de Buna, una Feria del Día de Buna que duró todo el fin de semana, se pudo contratar a Samela para que organizara un día de actividades para los jóvenes en la zona protegida, y también para que acogiera al personal con alojamiento.