



Para lograr la sostenibilidad pesquera, es preciso contar con la participación de todos los actores involucrados en la toma de decisiones. De ese modo comparten responsabilidades y derechos por el uso y manejo de los recursos, la resolución de conflictos, e intercambian conocimiento. Es esto lo que se conoce como co-manejo pesquero; donde los involucrados se convierten en aliados y colaboran para alcanzar un mismo objetivo.
Para lograr esto, primero se identificaron a todos los aliados potenciales: las comunidades pesqueras, el sector de gobierno, academia, organizaciones de la sociedad civil y el mercado. Se les invitó a colaborar y se realizaron una serie de reuniones con participación de todos los actores, en donde se diseñó el proyecto, sus objetivos y metas. Se invitó a los actores a formar parte del proyecto y a que aportaran a éste desde su experiencia y campo de trabajo. Esto se formalizó firmando un memorándum de entendimiento. Ahora, se realizan reuniones semestrales en donde se presentan los avances generados y se establecen las siguientes metas, siempre buscando la transparencia y fomentando la confianza y participación equitativa.
- Involucrar a todos los diferentes actores que participan: pescadoras y pescadores, sector gobierno, academia, organizaciones de la sociedad civil y mercado.
- Establecer roles y responsabilidades dentro del proyecto a cada actor involucrado para formar un ambiente de alianza entre todos.
- Realizar reuniones, por lo menos dos al año, para presentar los avances generados y proponer nuevos objetivos entre todos.
- Reconocer y validar los acuerdos tradicionales y comunitarios de las pesquerías ante el sector de gobierno.
- Capacitar a las pescadoras y los pescadores sobre las herramientas de manejo, normatividad, biología del recurso y la importancia de generar información sobre su pesquería. Conocer los derechos y obligaciones derivados del derecho de acceso a los recursos pesqueros, genera un mayor sentido de responsabilidad.
- Mantener una comunicación eficiente con las partes interesadas para identificar oportunidades y retos. También, esto mantiene la motivación del grupo para seguir participando e involucrándose en el proyecto.
- Además de las mejoras que se han realizado en la pesquería por iniciativa de los productores, con el respaldo del sector de gobierno, academia y organizaciones de la sociedad civil, este trabajo en equipo ha generado efectos positivos en la estructura social de las comunidades, brindándoles más y mejores capacidades para tomar sus decisiones.
- También, se transfiere el conocimiento a nuevas generaciones, se incrementa el interés por participar y se genera información y conocimiento, promoviendo a su vez un sentido de pertenencia hacia el ecosistema y los recursos.