El alto grado de compromiso asumido e involucramiento por parte de la comunidad han sido factores determinantes en el éxito de este caso, es dable mencionar que este proyecto fue impulsado y materializado por personas que son mayormente oriundas de la región, lo que genera un mayor sentido de pertenencia y de compromiso.
Esto ha sido posible gracias a la capacidad de decisión en todo el proceso, la gestión ha sido primordial para alcanzar los niveles de autogestión y consolidación actuales. Específicamente para la gestión del ACUS se ha conformado un comité de gestión ambiental integrado por el DMQ (Distrito Metropolitano Quito) y los actores del territorio logrando una fuerte cohesión de la comunidad regional.
La lección que ha dejado esta herramienta es que a mayor grado de invocramiento, mejores son los resultados y si bien son muchos los obstáculos a sortear, es posible superarlos con ese gran sentido de pertenecia y compromiso con el proyecto y nuestro territorio.