Cada cuatro años se realiza el "Atlas del Priolo", en el que 50 voluntarios cuentan todos los priolos del mundo en uno o dos días. Este Atlas permite hacer una estimación más sólida del tamaño de la población de priolos.
Anualmente, un técnico del proyecto realiza un censo de priolos en mayo y junio, y en septiembre un censo de juveniles para evaluar el éxito reproductor de la especie. Cada cuatro años se realiza también un censo invernal. Este seguimiento permite evaluar las tendencias poblacionales del ave y actuar con rapidez si se detecta algún problema.
La evolución de la vegetación autóctona se evalúa anualmente en todas las zonas de intervención, comparando la composición de cuadrados aleatorios de 10 x 10 metros de vegetación entre las zonas restauradas y las zonas de control. También se hace un seguimiento de las nuevas plantaciones para evaluar su éxito e identificar problemas. Cuando una zona de intervención presenta otras cuestiones delicadas, como la proximidad de conducciones de agua, se ponen en marcha nuevos sistemas de seguimiento, por ejemplo análisis del agua, para garantizar el éxito y la seguridad de todas las intervenciones.
Por último, también se supervisan las repercusiones socioeconómicas del proyecto en términos de inversión y prestación de servicios ecosistémicos.
- Financiación de la Comisión Europea a través del Programa LIFE;
- Apoyo científico por parte de un consejo asesor.
- Una buena planificación y una ejecución regular de las acciones de seguimiento son esenciales para obtener resultados buenos y sólidos;
- El apoyo científico a las acciones de seguimiento es muy importante, sin embargo, y dado que las acciones de conservación reales son prioritarias, este seguimiento debe adaptarse a la menor disponibilidad de recursos económicos y de tiempo para llevarlas a cabo. A veces, es necesario encontrar formas más sencillas de obtener las respuestas que necesitamos para seguir trabajando a pesar de no ser totalmente rigurosas desde el punto de vista científico. Este es el caso de la evaluación de la provisión de servicios ecosistémicos, que se realiza en términos cualitativos, con alguna valoración cuantitativa y monetaria, cuando se dispone de la información necesaria.
- Las acciones de seguimiento permiten identificar las mejores prácticas, redefinir nuevas intervenciones y mejorar la eficacia, pero también son una buena herramienta de comunicación, que nos permite mostrar la importancia y el éxito del proyecto y presentarlo al público en general. El Atlas do Priolo se ha convertido en un gran evento de comunicación y compromiso.