El riego por gravedad (riego por surcos o riego superficial) es la principal técnica de riego utilizada en Tayikistán para los cultivos anuales. Para evitar la erosión, el riego debe realizarse por surcos que sigan curvas de nivel ligeramente inclinadas. La entrada de agua debe ser lenta, para aumentar la infiltración del agua en el suelo y reducir el riesgo de erosión a lo largo del surco de riego. Además, deben aplicarse medidas para que el riego por gravedad sea más eficaz, por ejemplo, forrando los canales de riego con láminas de plástico para reducir la pérdida de agua por infiltración o distribuyendo el agua a los surcos mediante tuberías de plástico para lograr una distribución homogénea.
Debe prestarse especial atención a evitar un riego excesivo; el agua sobrante debe evacuarse adecuadamente, ya que puede provocar la erosión del suelo, la formación de cárcavas o atraer plagas.
En un sistema de riego por gravedad, es crucial romper la superficie del suelo entre los surcos para destruir los capilares y preservar así la humedad.
Las técnicas de riego más sofisticadas y eficaces, como el riego por goteo y por aspersión, no son económicamente viables en la mayoría de los casos en cultivos anuales de regadío.
El agua es un recurso escaso en Tayikistán y la situación empeora con el crecimiento demográfico y a raíz del cambio climático. Por ello, los agricultores están interesados en aplicar técnicas de riego que ahorren agua. El medio elegido es mejorar el riego por gravedad, ya que en la mayoría de los casos resulta demasiado caro instalar sistemas de riego por goteo o aspersión para los cultivos anuales.
Muchos agricultores riegan los cultivos anuales por gravedad, dejando que el agua simplemente fluya cuesta abajo y no son conscientes de que ese procedimiento provoca erosión. Deberían recibir formación sobre la aplicación del riego por surcos siguiendo las curvas de nivel.