Educación y sensibilización

Hasta hace poco, la cría de reptiles en granjas tenía pocos precedentes y la mayoría de la gente prefería las alternativas silvestres. Desde entonces, Vietnam ha celebrado el éxito de la industria de cría de reptiles, y el público en general está ahora bien informado sobre el sector y los productos finales. Los reptiles de cría se venden en la mayoría de los mercados y en los menús de muchos restaurantes. Uno de los retos pendientes es que no ha habido ningún intento de regular o informar a los clientes sobre lo que los criadores dan de comer a sus reptiles. Los piensos más comunes son los de origen silvestre (por ejemplo, roedores capturados en arrozales), los comerciales (por ejemplo, pellets de pescado) y los residuos proteínicos de las cadenas agroalimentarias (por ejemplo, cerdos nacidos muertos y pollitos machos de incubadoras). Es necesario seguir investigando y evaluando los riesgos asociados a estos piensos. El riesgo de blanqueo de reptiles silvestres también persiste, pero su escala y probabilidad se han reducido significativamente gracias a modelos de producción más lucrativos (por ejemplo, cría selectiva en línea para mejorar la genética de producción) y a una mejor aplicación de la ley.

Apoyo institucional, talleres, redes sociales y medios de comunicación gubernamentales (por ejemplo, la televisión nacional). Teléfonos inteligentes baratos y acceso a Internet.

La comunicación se ha limitado a los beneficios sociales, económicos y nutricionales directos. El público sigue desconociendo en gran medida los beneficios menos tangibles de la cría de reptiles, como los relacionados con los nuevos retos mundiales (por ejemplo, las enfermedades zoonóticas, el cambio climático y la sostenibilidad medioambiental). Los contenidos de base científica a través de plataformas de medios sociales pueden ser una poderosa herramienta educativa para temas complejos y transversales. La investigación y el desarrollo continuos de los aspectos sanitarios y veterinarios de la cría de reptiles son necesarios para ajustarse a las normas ganaderas internacionales.