Colaboración con el rancho Olgulului Olalarashi Group y KWS

El Parque Nacional de Amboseli alberga algunas de las mayores poblaciones de elefantes de Kenia, que dependen de las tierras comunitarias circundantes para migrar. En 2008, los interesados en las tierras reconocieron que las amenazas de pérdida, degradación y fragmentación del hábitat conducirían a la pérdida de medios de subsistencia e ingresos por turismo y optaron por garantizar la sostenibilidad del ecosistema. Por ello, el IFAW se asoció con las partes interesadas pertinentes para asegurar corredores críticos y zonas de dispersión para los elefantes en áreas comunitarias del paisaje de Amboseli. Para lograrlo, el IFAW asumió el compromiso plurianual de asegurar 26.000 acres como tierras de migración y dispersión de la fauna silvestre en el paisaje de Amboseli (el corredor de Kitenden, uno de los últimos corredores migratorios de elefantes que quedan y que conecta Kenia y Tanzania).

La estrategia para la tierra arrendada fue desarrollar la Kitenden Community Wildlife Conservancy, que seguirá ofreciendo un triple beneficio a la vida silvestre y su hábitat, a la comunidad local (a través de proyectos ecológicos, de turismo compatible y empresariales) y a los inversores a través del desarrollo del turismo y la inversión. En 2017, el IFAW trabajó con la comunidad maasai local para registrar el Kitenden Conservancy Trust, un paso importante para asegurar esta porción de tierra como una reserva de propiedad comunitaria que apoya medios de vida sostenibles.

El IFAW se asoció con la comunidad del Olgulului Olalarashi Group Ranch (OOGR, que rodea el 90 por ciento del parque) para garantizar que los beneficios de la protección de la vida salvaje estuvieran conectados con mejoras del bienestar humano. Por ejemplo, la protección del corredor de Kitenden no habría sido posible sin el compromiso del IFAW de firmar acuerdos independientes con 2.600 propietarios indígenas. Ello ha reportado notables beneficios tanto a los habitantes de la comunidad como a la fauna salvaje del Parque Nacional de Amboseli. Combinar la experiencia de las iniciativas de conservación y desarrollo de la fauna silvestre con base científica dentro de la comunidad resultó esencial y debería aplicarse a futuros proyectos. Incorporar las aportaciones de la comunidad de forma estructurada y profunda ha dado lugar a intervenciones únicas adaptadas a esta comunidad específica e intervenciones que son sostenibles y populares entre la comunidad. Tanto los dirigentes locales como la comunidad han estado muy implicados desde el principio del proyecto.