Agroforestería y reforestación

Se emprendió la reforestación y revegetación de laderas degradadas y de los alrededores de un lugar de tratamiento de aguas para reducir la erosión y el riesgo de inundaciones. Para proporcionar plantones para la reforestación y la agrosilvicultura, se crearon viveros comunitarios.

La agrosilvicultura comunitaria se estableció en 15 ha para proporcionar medios de subsistencia adicionales a 20 hogares. Se basa en un ciclo rotativo de 8 años de producción de cultivos y silvicultura (en 8 parcelas, una añadida cada año), lo que permite una gestión sostenible de la tierra y la reducción de la erosión del suelo. En cada parcela se cultivan tres tipos de plantas: acacia, mandioca y caupí, que aportan beneficios complementarios. También se practica la apicultura. El producto de todo ello aumenta anualmente los ingresos de todos los hogares, que lo gestionan conjuntamente. Las familias, el propietario de las tierras y la asociación han llegado a un acuerdo por el que el 50% de los rendimientos son para los agricultores, el 25% para la asociación y el 25% para el propietario de las tierras.

Ingresos esperados de 1ha, año 1: 3.000 USD de la producción de 100 bolsas de carbón vegetal a partir de tocones + 6.250 USD de la cosecha de 2.500 kg de caupí; año 2: 9.615 USD de 6.410 kg de yuca; años 3-7: 7.000 USD de 1.000 litros de miel; año 8: 35.000 USD de 1.750 bolsas de carbón vegetal producido a partir de acacias maduras.

Se utilizó el método de valoración "Valoración Integrada de los Servicios Medioambientales y las Compensaciones" (InVest) para determinar los lugares de intervención sobre el terreno mediante la modelización del potencial de erosión del suelo con diferentes opciones de gestión. Los requisitos de datos relativamente bajos del modelo InVest y el hecho de que tenga en cuenta tanto las características geofísicas como ecológicas de la zona a la hora de medir el potencial de erosión del suelo hacen que el modelo InVest sea muy adecuado para la planificación EbA/Eco-DRR y para los países con escasez de datos.

Ofrecer múltiples beneficios y aportar pruebas tangibles de ello es importante para que la comunidad los asimile. Antes del proyecto, las principales actividades eran la producción de carbón vegetal y la agricultura de roza y quema. Los agricultores no estaban familiarizados con la agrosilvicultura y creían que la tierra elegida para el proyecto no era apta para la agricultura.

El éxito general quedó patente por la gran aceptación de las intervenciones por parte de la comunidad, guiada por socios locales experimentados, y la elevada tasa de supervivencia (98%) de los árboles agroforestales plantados.

Sin embargo, al tratarse de lugares de demostración, los miembros de la comunidad no elegidos y, por tanto, sin acceso a los beneficios, se mostraron descontentos. En un caso, se provocó deliberadamente un incendio para destruir un lugar de reforestación. Así pues, en el futuro es importante tener en cuenta las sensibilidades locales y velar por que los beneficios del proyecto se repartan de la forma más amplia posible, a fin de minimizar los conflictos entre los usuarios de los recursos. También pone de relieve las limitaciones de los proyectos piloto.