Revitalización de la gobernanza para la adaptación

Para ser efectiva, la gobernanza para la adaptación debe ser multidimensional y participativa, lo que implica involucrar a agricultores, municipalidades, ministerios y otras instituciones públicas en la zona, líderes comunitarios, unidades de salud y educadores en los procesos de gestión del agua y adaptación. En Sumpul esto se logró particularmente a través de los procesos de “aprender haciendo” y de revitalización del Comité Comunitario Binacional de la Subcuenca. La labor y legitimidad local del Comité Binacional se enriqueció con la integración de instancias comunitarias que estuvieron por años desarticuladas y sin mayor participación, como los Comités de Agua, que son importantes en cada comunidad. También se generaron nuevos instrumentos de gestión, se impulsaron liderazgos y la participación activa de jóvenes y mujeres dentro del Comité Binacional, y se realizaron capacitaciones e intercambios de experiencias para el aprendizaje colectivo. Otros aportes a la gobernanza provinieron de los productores que implementaron medidas de AbE en sus fincas (quienes ahora son voceros por los beneficios derivados de dichas medidas) y de las municipalidades (La Palma y San Ignacio) que integraron el enfoque de AbE en sus políticas, con la formulación de Planes Locales de Adaptación.

  • La existencia previa (2012) del Comité Binacional es un factor habilitante clave, ya que no se comenzó de cero, sino que se fortaleció una estructura existente, impulsando su re-estructuración en base a un diagnóstico sobre su funcionamiento y actores/liderazgos clave.
  • Para que los Comités de Agua puedan contribuir a una gestión compartida con visión de cuenca en el Comité Binacional, se requiere primero mejorar sus propias capacidades de organización y gestión, antes que puedan tomar la batuta como voceros y representantes de sus comunidades.
  • El contar con estudios biofísicos e información técnica específica sobre recursos hídricos y AbE, facilitó los procesos de sensibilización, participación, logro de acuerdos y realización de acciones focalizadas, lo que a su vez ayudó a evitar la dispersión de recursos.
  • Aumentar la efectividad y sostenibilidad, de los procesos de gobernanza, conlleva un trabajo constante de muchos años, que a menudo sobrepasa la duración de los proyectos de cooperación. Por ende, es conveniente buscar, por un lado, maximizar las sinergias entre proyectos y, por otro lado, mantener la presencia y el acompañamiento en el territorio a través de proyectos sucesivos.  
Habilidades de facilitación

Para una aplicación eficaz, se requiere un facilitador altamente cualificado y experimentado que trabaje con diversas partes interesadas, como alumnos, profesores y miembros de la comunidad.

1. uso de un facilitador existente

2. uso de la institución existente

3. Uso de un enfoque multilateral

1. hay que tener en cuenta el interés institucional cuando se trabaja con muchas partes interesadas

2. se necesita tiempo para que el personal de campo comprenda, adquiera experiencia y confianza para facilitar este proceso.

Diseño integrado del uso del suelo

Se trata de un proceso inclusivo y participativo que las comunidades escolares utilizan para desarrollar un diseño integral del terreno escolar y un bosque de alimentos que satisfaga sus necesidades.

Implica trabajar con toda la comunidad escolar/partes interesadas (alumnos, profesores, padres, líderes locales y del entorno).

1. Utilización de los recursos locales disponibles

2. Implicación de alumnos, profesores y padres que conduzca a un aprendizaje intergeneracional

3. Utilización de la estructura y los sistemas institucionales existentes

4. Responsabilidad conjunta

5. Se basa en las necesidades sentidas por la comunidad

1. mejora de las relaciones de trabajo entre las partes interesadas

2. Es un buen enfoque para abordar otros problemas sociales que afectan a las comunidades, como la actitud negativa hacia la agricultura entre los jóvenes, el desempleo juvenil y la delincuencia.

Desafíos

1. Tarda en despegar, porque hay que movilizar y concienciar a las distintas partes interesadas.

2. 2. Actitud negativa hacia la agricultura en la escuela.

3. 3. Tiempo insuficiente para actividades extraescolares en las escuelas.

Implementación comunitaria de medidas de adaptación en bosques y sistemas agroforestales

Las medidas de AbE implementadas en la subcuenca estuvieron enfocadas en los servicios ecosistémicos de agua y suelos, en la diversificación productiva y en paliar los impactos del cambio climático en los cultivos y bienes de las comunidades. Junto a >100 productores/as de la parte alta de la subcuenca, se introdujeron árboles frutales y maderables en sistemas agroforestales aledaños a 7 fuentes de agua y se fomentó la agricultura orgánica, permitiendo a las familias diversificar sus ingresos y reducir la vulnerabilidad de sus cultivos, infraestructura productiva y viviendas ante los fuertes vientos que les afectan. Esto en combinación con prácticas de conservación de suelos y agua (acequias de ladera, no-quema e incorporación de rastrojos) ha ayudado a disminuir la erosión del suelo ocasionado por lluvias extremas, así como mejorado la retención de humedad en los cultivos, la fertilidad de los suelos, y la infiltración y captación de agua en la zona. Las medidas de AbE no sólo generan agro-ecosistemas más resilientes, sino que también aumentan la disponibilidad de agua, lo que beneficia a >400 familias de la subcuenca. Estas acciones han generado conciencia sobre la necesidad de una visión ecosistémica y adaptativa ante el cambio climático en la gestión del territorio.

  • Mejorar el estado de los suelos no sólo es una manera de asegurar aumentos en la productividad, sino que también a mediano plazo, ayuda a disminuir la tendencia a la agricultura migratoria ya que se asegura que las familias puedan trabajar muchos años en las mismas parcelas. Este influyente factor favorece la adopción de prácticas de conservación de suelos por parte de las familias.
  • Plan Trifinio inició hace años un esquema de incentivos a propietarios de bosques con el objetivo de contribuir a su protección y con eso, a la cosecha de agua.
  • La siembra escalonada con árboles frutales y maderables, es una forma muy efectiva de aumentar conciencia sobre los beneficios de asociar árboles con cultivos. Permite ver de forma palpable cómo los sistemas agroforestales ayudan a enfrentar los impactos del cambio climático y diversificar los ingresos familiares.
  • La implementación de sistemas agroforestales y prácticas de conservación de suelos debe permitir que la diversificación e incremento de ingresos dé resultados a corto plazo (con granos básicos, aguacate, etc.) y no sólo a mediano y largo plazo (con árboles de pino y ciprés). Materializar esto implica una planificación conjunta entre el productor y el asesor técnico.
  • Debe tomarse en cuenta la tenencia de la tierra en donde se ubican las fuentes de agua. Las municipalidades comúnmente son propietarias únicamente de los ojos de agua y no de las tierras que los rodean. Esto implica trabajar con los propietarios de los bosques y predios que rodean las fuentes de agua para proteger y/o restaurar esas tierras y permitir la instalación de tuberías para proveer agua a las comunidades.
“Aprender haciendo” y monitoreo para incrementar capacidades y conocimientos

Al apoyar a productores a implementar medidas de AbE que mejoran sus prácticas productivas y aumentan la resiliencia de los agro-ecosistemas, se genera un proceso de “aprender haciendo” que permite a otros actores presenciar los beneficios de dichas medidas y crea condiciones para su sostenibilidad y escalamiento.

  • Se examina, participativamente, la vulnerabilidad socio-ambiental de las comunidades y sus medios de vida, para luego priorizar las medidas de AbE y su ubicación
  • Se brinda apoyo técnico a los productores, complementado con sus conocimientos tradicionales, para planificar e implementar las medidas de AbE (mejoras en los sistemas agroforestales)
  • Se realizan capacitaciones e intercambios de experiencia sobre cooperación transfronteriza; gestión integrada del recurso hídrico; AbE; marcos de política y legislación sobre agua y cambio climático; e incidencia y comunicación
  • Se lleva a cabo un monitoreo de la seguridad alimentaria e hídrica con 14 familias
  • Se fortalece la capacidad de gobernanza y gestión de instancias comunitarias y municipales vinculadas al manejo del recurso hídrico

El incremento de capacidades y conocimientos fortalece el capital social y contribuye al empoderamiento comunitario y a valorar los servicios ecosistémicos y su gestión en beneficio de todos. 

  • El cambio climático y en particular, la disponibilidad del agua, son factores que preocupan a los actores de la subcuenca, lo que hace que aumente su disposición al diálogo, al aprendizaje constante, a la búsqueda de soluciones y a realizar acciones conjuntas.
  • Plan Trifinio lleva años implementando medidas de conservación en el territorio y trabajando de cerca con los productores y actores locales. Tiene también amplia experiencia con procesos participativos, que es otro factor habilitante para procesos exitosos de “aprender haciendo”.
  • Para lograr cambios a nivel de paisaje, se debe primero trabajar con las bases a nivel comunal. En esto, ha sido clave el fortalecimiento de las capacidades de los Comités de Agua, que forman parte de las Asociaciones de Desarrollo Comunal (ADESCOs) para que puedan ampliar el alcance de su actuar más allá de las necesidades de saneamiento.
  •  Los intercambios de experiencia (e.g. con actores de la cuenca del Río Goascorán y con otras ADESCOs de otras partes de la cuenca) fueron un mecanismo efectivo para reforzar el aprendizaje colectivo y demonstrar las ventajas de la colaboración transfronteriza.
Desarrollo de una estrategia de cambio climático para el parque

Sobre la base de la evaluación de la vulnerabilidad al cambio climático y de los usos del suelo, se definieron objetivos y estrategias de adaptación al cambio climático para mejorar la resistencia de los parques al cambio climático.

Los objetivos y estrategias de adaptación al cambio climático fueron revisados por las partes interesadas en un taller celebrado en Lusaka en octubre de 2017, al que asistieron gestores de parques del Departamento de Parques Nacionales y Vida Silvestre, el Parque Nacional de Nsumbu y otros. Las aportaciones de las partes interesadas se utilizaron para seguir desarrollando los objetivos y estrategias de adaptación en una estrategia de cambio climático del parque. La estrategia incluía una meta, alcance y objetivos, estrategias de adaptación, así como planes de aplicación y seguimiento. También se incluyeron indicadores y parámetros clave para el seguimiento de los cambios en la vulnerabilidad y la resiliencia.

En diciembre de 2017 se celebró otro taller en Lusaka para validar la estrategia de cambio climático. Al taller asistieron el Ministerio de Turismo y Artes y los Ministerios responsables de Medio Ambiente y Recursos Naturales, así como los principales Departamentos y Agencias. También asistieron representantes del Parque Nacional de Nsumbu, del Área de Gestión de Nsumbu-Mweru Wantipa y del Proyecto de Desarrollo del Lago Tanganica. La estrategia final sobre cambio climático del parque debía integrarse y adjuntarse al GMP.

  1. Participación de las partes interesadas con conocimientos sobre la variabilidad y el cambio climáticos y la biodiversidad
  2. Facilitación por parte de un experto en cambio climático y recursos naturales.
  3. Acceso a información actualizada sobre el clima (y la biodiversidad)
  1. La participación de las partes interesadas es clave para diseñar medidas de adaptación adecuadas con el potencial de mejorar la resiliencia al cambio climático. Por ello, las partes interesadas, incluidas las comunidades adyacentes a las áreas protegidas, deben participar en la identificación y validación de las medidas de adaptación y mitigación del cambio climático.
  2. La identificación de medidas relevantes de adaptación y mitigación requiere que el proceso sea facilitado por un experto cualificado en cambio climático con un buen conocimiento del contexto regional, nacional y local.
  3. La disponibilidad de datos de referencia actualizados, tanto científicos como autóctonos, sobre los aspectos relacionados con el cambio climático contribuye al diseño de las medidas de adaptación pertinentes.
Evaluación de la vulnerabilidad al cambio climático y el uso del suelo

El objetivo de este bloque es evaluar la vulnerabilidad de la biodiversidad ante factores de estrés climáticos y no climáticos (por ejemplo, cambios en el uso del suelo). La evaluación es un requisito previo a cualquier acción para medir el estado de conservación de la biodiversidad y la resistencia al cambio climático. Estas evaluaciones también ayudan a orientar mejor la identificación de intervenciones adecuadas de adaptación al cambio climático.

La evaluación de la vulnerabilidad al cambio climático y del uso del suelo se realizó mediante visitas al Parque Nacional de Nsumbu y a las ZMG adyacentes, a saber, Tondwa y Kaputwa, entrevistas a informantes clave y mediante revisión documental. Mientras que las visitas sobre el terreno tenían como objetivo obtener información crucial mediante la observación, el estudio teórico se llevó a cabo para aumentar la información sobre el terreno. La evaluación fue dirigida por expertos acompañados por los gestores del parque. En el proceso participaron líderes -hombres y mujeres- de las aldeas adyacentes que conocen mejor el parque y las zonas circundantes.

  1. Inventario de conocimientos tradicionales sobre biodiversidad y cambio meteorológico / climático.
  2. Disponibilidad y acceso a datos científicos de referencia sobre biodiversidad y cambio climático.
  3. Capacidad de visualizar el estado pasado, presente y futuro de la biodiversidad en el contexto de los factores de estrés climáticos y no climáticos.

La revisión de los datos existentes sobre el cambio climático es fundamental para comprender las tendencias pasadas y futuras del cambio climático a escala regional y nacional.

Las visitas sobre el terreno al parque y sus alrededores ayudan a obtener información sobre el estado de los usos del suelo y la biodiversidad / los ecosistemas. En concreto, la observación directa proporciona información sobre las amenazas y retos a los que se enfrenta la biodiversidad y también sobre los signos visibles de sequías, inundaciones, etc. inducidas por el clima.

Las comunidades locales, en particular los aldeanos que llevan más tiempo viviendo cerca o en los alrededores del Parque Nacional, conocen mejor los cambios locales en el clima y la biodiversidad. Por ello, para diseñar estrategias de adaptación adecuadas, es fundamental recopilar esta información para validar y complementar los datos globales y regionales y desarrollar una visión con las comunidades.

Refuerzo de las capacidades de resistencia al cambio climático

El objetivo de este bloque es capacitar a los gestores de los parques en materia de cambio climático mediante talleres centrados en temas muy específicos de las cuestiones relacionadas con el cambio climático que se plantean en los parques.

En 2017 se celebraron una serie de talleres de capacitación en Lusaka (a nivel nacional) y Kasama (a nivel provincial/local) para concienciar sobre conceptos clave relacionados con el cambio climático, incluidos los impactos, la vulnerabilidad y la resiliencia en relación con las áreas protegidas. A los talleres asistieron delegados del Departamento de Parques Nacionales y Vida Silvestre, el Departamento de Gestión de Recursos Naturales, la Administración Provincial del Norte, el Consejo de Distrito de Nsama, el Ayuntamiento de Mpulungu, el Parque Nacional de Nsumbu, ONG (por ejemplo, Conservation Lake Tanganyika - CLT y Frankfurt Zoological Society - FZS) y programas como el Proyecto de Desarrollo del Lago Tanganica (LTDP).

Los talleres proporcionaron a los participantes información y conocimientos clave sobre los aspectos climáticos necesarios en los próximos pasos de la integración del cambio climático en el Plan General de Gestión del Parque.

  1. Disponibilidad de partes interesadas, motivadas y comprometidas
  2. Capacidad de comunicación eficaz
  1. El desarrollo de capacidades no debe ser un acontecimiento puntual, sino una empresa continua destinada a mejorar la capacidad tanto de los gestores de los parques como de las partes interesadas, incluidas las comunidades locales que viven junto a las áreas protegidas.
  2. El compromiso y la mayor capacitación de las comunidades son importantes para la sostenibilidad de la solución.
  3. El proceso debe ir acompañado de un seguimiento y una evaluación que garanticen la mejora real de la concienciación y la capacidad.
Gestión de un entorno urbano habitable mediante la colaboración público-privada

La visión y los conceptos de Minato Mirai 21 se han plasmado mediante la colaboración público-privada conforme al acuerdo básico de 1988 entre los propietarios de tierras y otras partes interesadas de todo el distrito central. En particular, el acuerdo permite a los terratenientes tomar una fuerte iniciativa en la formulación de normas locales para un desarrollo equilibrado. Asimismo, el acuerdo impone a todos los promotores de oficinas la obligación de proporcionar en sus propiedades una determinada cantidad de espacios públicos abiertos y plantas de actividad social. Además, estipula normas y reglas detalladas sobre el diseño de los edificios, como la escala mínima del solar, la restricción de altura, las circulaciones peatonales y los retranqueos de los muros exteriores.

- Iniciativas de gestión de zonas operativas

- Directrices de diseño urbano

La creación de un consenso entre los sectores público y privado durante la fase de planificación puede facilitar la firme iniciativa de los propietarios de los terrenos a la hora de formular normas locales para las reurbanizaciones y la posterior gestión sostenible de las zonas.

Lograr una gobernanza ecosistémica para la adaptación

La gobernanza para la adaptación requiere de una visión ecosistémica, donde las acciones implementadas en campo para una mayor resiliencia de los recursos naturales se enfocan más en proteger los servicios ecosistémicos de la cuenca hidrográfica (bosque-agua-suelo) y menos en responder únicamente a las problemáticas encontradas a nivel de fincas individuales. Por ello resulta clave la priorización de zonas de restauración, puesto que debe ser en función de mejorar la captura de agua y también la productividad (los medios de vida locales). Los tres tipos de medidas de AbE implementadas en la cuenca del Río Goascorán fueron: 1) restauración de nacientes de agua, 2) conservación de suelos, y 3) sistemas agroforestales. Esta combinación reconoce la interdependencia de los componentes bosque-agua-suelo y permite a las comunidades evidenciar cambios positivos en plazos intermedios, lo que aumenta la confianza en las “soluciones naturales” adoptadas para la seguridad hídrica y alimentaria. La gestión territorial con visión de cuenca o microcuenca también contribuye al enfoque ecosistémico que se requiere para un desarrollo sostenible, es decir, uno que sea adaptativo ante el cambio climático.

  • El cambio climático y en particular la disponibilidad del agua para consumo humano y uso agrícola son factores que preocupan a la mayoría de los actores de la microcuenca, lo que hace que aumente su disposición a priorizar acciones que favorezcan las zonas de recarga hídrica y la disminución del riesgo ante eventos extremos.
  • Una vez implementadas, las medidas de AbE priorizadas hicieron palpables las mejoras en las condiciones de las zonas de recarga hídrica y en la capacidad organizativa y de gobernanza de las comunidades, ayudando igualmente a consolidar el concepto de que la cobertura forestal es un “seguro colectivo” ante el cambio climático.
  • La auto-motivación de las comunidades (por el agua y sus medios de vida) y el liderazgo de actores locales claves son factores determinantes para alcanzar una buena gobernanza para la adaptación y el éxito en la aplicación de medidas de AbE.