Documentación de experiencias y prácticas
Las entrevistas recogieron valiosa información sobre las experiencias locales.
Amigos de Sian Ka´an, Instituto Tecnológico de Chetumal, The Nature Conservancy
Un equipo técnico elaboró la metodología y los instrumentos para recoger, organizar y evaluar la información. Incluía orientaciones para los recopiladores de datos, un formato para descargar la información, formularios para obtener autorización para publicar las respuestas e imágenes de las mejores prácticas. Se formó a estudiantes de institutos técnicos para que utilizaran y probaran los instrumentos de recogida de datos. Una ONG medioambiental local se centró en la zona norte del Estado, donde entrevistó a directivos de grandes empresas y urbanizaciones turísticas, basándose en la larga relación de la ONG con la industria turística. El instituto técnico se centró en el sur del Estado y entrevistó a propietarios de pequeños hoteles y casas en comunidades costeras. El instituto técnico creó una base de datos con la información de ambas zonas. La base de datos fue revisada minuciosamente por el equipo técnico y posteriormente por expertos locales (arquitectos, ingenieros, biólogos, oceanógrafos) en talleres, por correo electrónico y en entrevistas personales organizadas por las tres organizaciones.
Los expertos se mostraron muy interesados y dedicaron tiempo de calidad a la revisión, reconociendo la importancia del catálogo resultante de su temprana implicación en el proceso. Como institución académica, el instituto técnico organizó un grupo de estudiantes dedicados junto con profesores multidisciplinares para llevar a cabo la encuesta y las revisiones en la zona sur, al tiempo que se creaban capacidades en el proceso.
Dedicar tiempo suficiente a desarrollar los instrumentos y ponerlos a prueba fue crucial para el éxito de la recogida de datos. El equipo no tuvo que volver atrás para recoger más información. Garantizar financiación y tiempo suficientes para todas las fases del proyecto es fundamental. Los socios dispusieron de tiempo y personal para la planificación, el desarrollo de instrumentos, la creación de alianzas, la recogida de datos, la integración de la información y la organización de revisiones por expertos. Estas fases duraron 10 meses. Sin embargo, la edición final y el diseño del catálogo junto con las imágenes y diagramas apropiados y autorizados duraron otros 10 meses, mucho más tiempo del previsto, debido a la falta de financiación y de personal disponible. El retraso puso en peligro la aceptación del producto entre las partes interesadas, cuyo entusiasmo se desvanecerá de forma natural.