Las áreas protegidas como determinantes ambientales en el ordenamiento territorial.

Las áreas protegidas en el contexto urbano se convierten en un determinante ambiental de la planificación y el ordenamiento del territorio, que al ser normas de superior jerarquía blindan estos espacios frente a los cambios que puedan pensarse en relación con los usos del suelo diferentes a la conservación y preservación de la biodiversidad y dependencia a voluntades políticas para su gestión.

  • Permiten orientar a las administraciones municipales en torno al uso del suelo al interior de las áreas protegidas, garantizando espacios verdes que ayuden a la adaptación y mitigación de los efectos de cambio climático y respondan a los retos de las ciudades resilientes, sostenibles y biodiversas.
  • Reducen la aparición de conflictos socioambientales alrededor de los ecosistemas estratégicos en las áreas urbanas.
  • Favorecen el cumplimiento de los objetivos de Desarrollo Sostenible y las metas AICHI del Plan Estratégico del Convenio de Diversidad Biológica.

Que las áreas protegidas sean determinantes ambientales del ordenamiento del territorio es la posibilidad más clara que existe para evitar la alteración, degradación, o desaparición de ecosistemas estratégicos en el contexto urbano, favoreciendo el derecho colectivo al ambiente sano, en tanto estas no pueden ser desconocidas por las administraciones municipales ni por las voluntades políticas de turno.

 

Ahora bien, no sólo basta con la incorporación de éstas dentro de las herramientas de planificación, para posicionar la designación, regulación y administración a fin de alcanzar objetivos específicos de conservación en las políticas públicas y que exista un compromiso eficaz frente a estas. Es necesario la coordinación y articulación interinstitucional para lograr un manejo efectivo de las áreas protegidas en un escenario particularmente denso en conflictos e intereses como es el paisaje urbano.

Relacionamiento estratégico para la gestión de las áreas protegidas en el contexto urbano

El relacionamiento entre actores (institucionales, ciudadanía, académicos y sector privado) permite la creación de mecanismos de administración y co-manejo que responden a las necesidades del área protegida y al manejo efectivo en el marco de la ejecución de los Planes de Manejo contribuye en la gobernanza ambiental de las áreas protegidas.

  • La optimización de los recursos y capacidades institucionales en la implementación de los planes de manejo de las áreas protegidas para su gestión efectiva.
  • La definición de los roles y competencias de los diferentes actores con respecto de las áreas protegidas, permite una mayor claridad en cuanto a las instancias de acción y participación en su gestión, control y seguimiento.
  • Fortalece la participación ciudadana, las alianzas interinstitucionales de carácter gubernamental, comunitario y privado.
  • Reconocimiento de las acciones, saberes e iniciativas de la ciudadanía en torno a la conservación y protección de estos espacios estratégicos para el mantenimiento de la biodiversidad y la preservación de los servicios ecosistémicos.
  • El co-manejo potencia el diálogo interinstitucional y el intercambio de saberes para desarrollar una construcción conjunta de las áreas protegidas, que permitan el fortalecimiento de la confianza entre los actores alcanzando niveles de buena gobernanza.
  • El aporte de la empresa privada contribuye a la sostenibilidad de las áreas protegidas urbanas, a la vez que es potencialmente funcional a las acciones de responsabilidad ambienal del sector privado.  
Estrategias lúdicas, pedagógicas y comunicativas para la apropiación social de las áreas protegidas.

La garantía de conservación de las áreas protegidas urbanas, más allá del ejercicio técnico y jurídico de declararlas, es un robusto proceso de involucramiento social. Para ello  ha sido fundamental que se desarrollen acciones y estrategias para fomentar la lúdica y la educación ambiental en torno a las áreas protegidas, ampliando una conciencia colectiva sobre la importancia de su conservación, no sólo para la bidioversidad sino para la calidad de vida en la ciudad.
La apropiación de conceptos socioecológicos se convierte en un factor clave para alcanzar los objetivos de conservación de las áreas protegidas. En la medida en que los actores se comprometan y reconozcan los valores y servicios ecosistémicos que prestan este tipo de espacios para lograr el desarrollo sustentable de las ciudades, se garantiza la permanencia en el tiempo de estos espacios en condiciones deseables para la conservación de la biodiversidad y de la amenidad, el disfrute, bienestar y salud física y mental de todos.

La continuidad de los procesos de apropiación social a partir de la educación ambiental y la comunicación pública para la biodiversidad, brindan herramientas para la gestión y el co-manejo adecuado de las áreas protegidas, facilitando acciones articuladas entre todos los actores: institucionales, ciudadanía, académicos y sector privado.

  • Las estrategias de educación ambiental y de dinamización a través de actividades como los recorridos interpretativos, yoga, tejido, avistamiento de aves, etc, permiten un mejor aprendizaje, comprensión y apropiación de las áreas protegidas en la medida que se construye otro tipo de relación entre los seres humanos y la naturaleza y la búsqueda de una visión biocéntrica de la vida donde se reconocen las interdependencias.
  • Se fortalecen y brindan otras herramientas educativo-ambientales, así como otras acciones de conservación que se venían desarrollando por parte de los ciudadanos y otros actores antes de la declaratoria.
  • La incorporación en la ciudadanía y el gobierno de algunos conceptos a partir del diálogo de saberes ayudan a la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad.
  • La acción participativa como eje fundamental para lograr el éxito en la gestión de las áreas protegidas.
  • Se involucran otros actores y sectores en la estrategia de conservación de las áreas protegidas, incluidas las Universidades y empresas, que realizan aportes a partir de sus intereses y capacidades específicas. 
Área Metropolitana del Valle de Aburrá
Estrategias lúdicas, pedagógicas y comunicativas para la apropiación social de las áreas protegidas.
Relacionamiento estratégico para la gestión de las áreas protegidas en el contexto urbano
Las áreas protegidas como determinantes ambientales en el ordenamiento territorial.
Área Metropolitana del Valle de Aburrá
Estrategias lúdicas, pedagógicas y comunicativas para la apropiación social de las áreas protegidas.
Relacionamiento estratégico para la gestión de las áreas protegidas en el contexto urbano
Las áreas protegidas como determinantes ambientales en el ordenamiento territorial.
Área Metropolitana del Valle de Aburrá
Estrategias lúdicas, pedagógicas y comunicativas para la apropiación social de las áreas protegidas.
Relacionamiento estratégico para la gestión de las áreas protegidas en el contexto urbano
Las áreas protegidas como determinantes ambientales en el ordenamiento territorial.
Generación de alianzas y búsqueda de recursos económicos

Acciones que generen el compromiso de todos los actores relevantes en el desarrollo del proyecto (organización ejecutora del proyecto, autoridades del área protegida, comunidades locales, visitantes, sector empresarial).

Búsqueda de financiamiento de distintas fuentes (cooperación internacional, donantes privados, gobiernos, etc.).

 

Comunicar adecuadamente la problemática a resolver y su importancia para mantener a los actores involucrados en el proyecto.

Disponibilidad de recursos de fundraising. Interés de financiadores en la conservación de áreas protegidas.

 

 

El financiamiento es uno de los factores fundamentales para que la solución pueda ser llevada a cabo y para que pueda ser replicada en esta y otras áreas.

Biodiversidad en instrumentos de ordenamiento territorial

la planificación de las áreas protegidas y sociecosistemas para ser factible debe incidir en los instrumentos de ordenamiento territorial

Ya se menciona la inclusión de planeación u ordenamiento territorial en la gestión de conservación de la naturaleza, en la gestión de riesgo y en salud pública.

No son sinonimos: 1) planeación de ecosistemas con planeación del  ordenamiento territorial, 2) ecosistema no es igual a territorio.

Todo ordenamiento territorial deberia ser ambiental.

Para integrar las áreas protegidas al ordenamiento territorial, es necesario la visión y análisis integral del territorio, por ello deben identificarse y contribuir en la gestión de articulación de ecosistemas, programas de CBD, UNESCO y por supuesto las aspiraciones, visiones y formas propias de concepcion y regulacion de los territorios de las comunidades etnicas y locales

 

Sinergia y complementariedad entre enfoques fundamento gestión territorial efectiva de la biodiversidad

Con el ánimo de abordar los desafíos que afronta la sociedad en términos sociales, económicos, ambientales y culturales, se han adoptado a nivel mundial y suscrito por los Estados, compromisos en diferentes agendas, cada una, con enfoques de intervención particulares (derechos, ecosistémico, urbano-regional, prevención de desastres y gestión de riesgo y/o cambio climático).  ¿cuál de estos enfoques es procedente para la gestión territorial efectiva de la biodivesidad y la inclusión social? Todos. La realidad de los territorios es diversa, compleja y poseen problemas y potencialidades muy concretas, que requieren del trabajo cooperativo, concurrente, complementario y multiescalar de actores sociales e institucionales  para armonizar y concretar las acciones propuestas en los instrumentos de planeación, de tal manera que den respuesta a las necesidades identificadas, de tal manera que se prevengan y gestionen conflictos socioambientales, se avance en la conservación de la naturaleza y bienestar humano. Combinar los enfoques de derechos, ecosistemico, urbano-rural, de gestión de riesgo y cambio climático, es necesario para gestionar de manera integral y pertinente los territorios  

Ratificación, cumplimiento compromisos Marco Sendai, Convenio Diversidad Biológica, Convención Cambio Climático, Nueva Agenda Urbana, Convenio 169 OIT. Institucionalidad sólida y Sistemas de: Prevención y Atención de Desastres y Gestión de Riesgo, Nacional Ambiental, Áreas Protegidas, Cambio Climático, Ciudades. Personal con conocimiento y experiencia. Existencia Comité Especial Interinstitucional Comisión Ordenamiento Territorial de Colombia desde 2012. Existen acuerdos Parques Nacionales, autoridades ambientales, comunidades étnicas y sectores  

Colombia es un multiterritorio, donde coexisten diferentes conceptos de territorio: del Estado nacional (república unitaria, descentralizada en entidades territoriales, donde ejerce soberanía); étnico indígena (existen 115 etnias, cada una amalgama ancestralidad, origen, cosmovisión, relacionamiento con la madre tierra); étnico comunidades negras, afrocolombianas, palenqueras y raizales donde ancestros, la naturaleza, el río, el mar determinan comportamiento solidario; territorio fronterizo donde ecosistemas y la cultura trascienden los límites político administrativo de las naciones. La gobernanza territorial requiere diálogo entre gobernanzas (áreas protegidas, agua, recursos naturales y alimentaria), hacia logro legitimidad, sinergia entre procesos, gobernabilidad, pertinencia política públicas, concreción participación, diálogo de saberes y buen vivir. La planeación ambiental, étnica, campesina, urbana, rural, deben dialogar para lograr territorios viables. Coliderazgos, alianzas, trabajo cooperativo entre autoridades ambientales, investigadores, academia, entidades territoriales, líderes comunitarios, sectores instituciones.

Gisela Paredes-Leguizamón
Sinergia y complementariedad entre enfoques fundamento gestión territorial efectiva de la biodiversidad
Biodiversidad en instrumentos de ordenamiento territorial