Asociación de Cultivos

Las hortalizas o los cultivos forrajeros pueden plantarse entre hileras de frutales, facilitando así los ingresos del huerto desde el principio, cuando los frutales aún no han entrado en producción. Asociar los árboles frutales con hortalizas o cultivos forrajeros es especialmente importante en Tayikistán, ya que las familias campesinas disponen de pocas tierras de regadío y, por tanto, tienen que utilizarlas de forma intensiva. Las hortalizas pueden utilizarse para la subsistencia o venderse en el mercado, mientras que los cultivos forrajeros como la alfalfa y la esparceta pueden plantarse para producir heno. Otras ventajas del cultivo de plantas forrajeras son que éstas crean hábitats y alimentan a polinizadores e insectos beneficiosos. La mayoría de las especies florecen cuando ya han florecido los árboles frutales, con lo que se amplía el suministro de forraje para los polinizadores y se mejoran las condiciones para la apicultura. Además, las plantas forrajeras protegen el suelo de la erosión.

El proyecto forma a los agricultores en las escuelas de campo sobre la gestión de los huertos, incluida la formación correcta de los árboles para dejar espacio suficiente a los cultivos asociados. Los árboles frutales deben formarse con copas longitudinales, consistentes en la prolongación del tallo y dos ramas esqueléticas alineadas a lo largo de la hilera de árboles, lo que permite el cultivo de plantas hortícolas y forrajeras entre ellas.

Aunque la asociación de cultivos hortícolas o forrajeros entre las hileras dentro de los huertos no es nueva para la mayoría de los agricultores, la técnica sólo puede aplicarse con éxito dependiendo de varios factores, entre ellos la composición y el diseño del huerto, como las distancias entre los árboles y las hileras, la poda correcta de los árboles, la selección de especies para los cultivos asociados y la disponibilidad de agua de riego e infraestructuras. Comúnmente, los frutales se cultivan con demasiada densidad, lo que reduce la producción de fruta por árbol e imposibilita la plantación de cultivos asociados debido a la falta de luz solar que llega a través de las ramas. Si se dispone de sistemas de riego avanzados, hay que considerar que los árboles se rieguen preferentemente por goteo y las plantas forrajeras por aspersión, lo que requiere instalar dos sistemas diferentes.