Para ser efectiva, la gobernanza para la adaptación debe ser multidimensional y participativa, lo que implica involucrar a agricultores, municipalidades, ministerios y otras instituciones públicas en la zona, líderes comunitarios, unidades de salud y educadores en los procesos de gestión del agua y adaptación. En Sumpul esto se logró particularmente a través de los procesos de “aprender haciendo” y de revitalización del Comité Comunitario Binacional de la Subcuenca. La labor y legitimidad local del Comité Binacional se enriqueció con la integración de instancias comunitarias que estuvieron por años desarticuladas y sin mayor participación, como los Comités de Agua, que son importantes en cada comunidad. También se generaron nuevos instrumentos de gestión, se impulsaron liderazgos y la participación activa de jóvenes y mujeres dentro del Comité Binacional, y se realizaron capacitaciones e intercambios de experiencias para el aprendizaje colectivo. Otros aportes a la gobernanza provinieron de los productores que implementaron medidas de AbE en sus fincas (quienes ahora son voceros por los beneficios derivados de dichas medidas) y de las municipalidades (La Palma y San Ignacio) que integraron el enfoque de AbE en sus políticas, con la formulación de Planes Locales de Adaptación.