Descolonizar nuestra investigación

Una de las principales enseñanzas extraídas de la evolución del trabajo sobre la economía azul de la Universidad de Wollongong (UOW) es la necesidad de estar abiertos a formas alternativas de ver el mundo. Nuestra asociación con el Illawarra Local Aboriginal Land Council y la influencia de nuestros co-investigadores aborígenes nos han llevado a centrarnos en la descolonización de nuestra investigación y en los métodos para descolonizar la toma de decisiones medioambientales. Esto ha implicado en gran medida una serie de talleres con Jade Kennedy, miembro del equipo y titular de conocimientos tradicionales, que fue pionera en el innovador programa Jindaola dentro de la UOW. El programa Jindaola está diseñado para reconciliar y construir relaciones entre diferentes sistemas de conocimiento.

Todo el equipo de investigación mantuvo contactos periódicos y rutinarios con nuestros coinvestigadores indígenas. Indigenous Blue Futures se convirtió en una estrategia transversal del proyecto que influyó en todos los aspectos de su diseño, análisis metodológico y elaboración de informes.

A través de este proceso aprendimos que todos llevamos con nosotros nuestro propio conjunto de valores y suposiciones que siempre influirán en nuestra investigación y en nuestra forma de ver el mundo. Participar en los aprendizajes de Jindaola nos permitió examinar y cuestionar esos valores y suposiciones y nos abrió el camino a formas de pensar más innovadoras y colaborativas.

Fomentar las relaciones entre disciplinas y en toda la comunidad

Los proyectos de Economía Azul de la Universidad de Wollongong (UOW) reconocieron que la construcción de un enfoque basado en la comunidad requiere una inversión en relaciones. Esto significa que dedicamos considerables recursos a crear redes, fomentar las relaciones y darles tiempo para madurar y evolucionar. Esto ocurrió internamente, a medida que íbamos conociendo las distintas áreas disciplinarias que los diferentes miembros del equipo representaban dentro del proyecto. También supuso establecer colaboraciones con socios externos a lo largo del tiempo. La demostración más significativa de ello fue el creciente papel de los socios aborígenes en la investigación. Los socios y coinvestigadores aborígenes participaron en las primeras fases del proyecto y, con el tiempo, esta relación creció y evolucionó hasta el punto de que hoy nuestros socios, el Illawarra Local Aboriginal Land Council, son colíderes del proyecto y están desarrollando futuras colaboraciones con la UOW.

  • Tiempo
  • Compromiso regular
  • Escucha activa
  • Mente abierta

Invertir tiempo y energía en establecer relaciones es difícil de incorporar a las prácticas académicas e institucionales tradicionales. Es importante que la relación se base en los principios de reciprocidad, para que todos los socios se beneficien del intercambio de conocimientos e información.

Balance de la economía azul existente

Antes de embarcarnos en la construcción de una economía azul basada en la comunidad, nos pareció importante entender de dónde venimos y dónde estamos ahora. Examinamos el papel histórico de las empresas marítimas en la costa sur de Nueva Gales del Sur y las relaciones económicas, sociales y culturales de las comunidades de la costa sur con el océano. El resultado fue un "mapa de la historia" de Blue Futures que detalla las diversas formas en que las empresas, los grupos comunitarios y los individuos se relacionan con el océano en nuestra región.

Al "hacer balance" del potencial de la economía azul de una región, el diseño del mapa garantizó que no se diera prioridad a ningún aspecto social, medioambiental o económico sobre otro. En su lugar, el espacio se convirtió en el principio organizador, permitiendo a los usuarios desplazarse por el mapa para conocer lo que era importante para la economía azul de su entorno. En la práctica, esto significaba que las estadísticas de empleo, las obras de arte costeras históricas y los ejemplos de gobernanza oceánica aparecían junto a las nuevas empresas de tecnología oceánica limpia y las industrias marinas establecidas. El mapa hace que estos datos dialoguen entre sí en la mente del espectador, simplemente por su proximidad espacial. Se trata de un primer paso importante para dar mayor relevancia a los datos culturales y sociales en el desarrollo de soluciones de economía azul, que a menudo se pasan por alto en favor de estadísticas cuantificables.

Este elemento fundamental fue posible gracias a un equipo multidisciplinar comprometido a trabajar más allá de los compartimentos disciplinarios tradicionales. Los artistas colaboraron con geógrafos, economistas y científicos medioambientales para reunir una amplia variedad de materiales visuales y textuales que se incluyeron en el mapa.

Subestimamos la duración del proceso. Se necesitó mucho tiempo para reunir los recursos digitales, los derechos de uso de las imágenes (tanto de empresas como de artistas y museos/archivos) y para probar diferentes estilos de storymaps que se adaptaran mejor a la escala del proyecto y a la variedad de fuentes.

La recopilación de diversas fuentes de datos en un mapa accesible al público y fácil de navegar permitió que este elemento constituyente llegara a un público más amplio, tanto a escala local como mundial, que un informe escrito tradicional o un comunicado de prensa textual. El mapa educó a diversos públicos sobre los conceptos de "economía azul" y "futuro azul", que muchos considerarían ideas amorfas o de nicho, alejadas de su vida cotidiana.

Intercambio de experiencias entre pares

Uno de los primeros objetivos que tuvo AESAC como organización fue promover la replicabilidad de su modelo productivo sustentable, apoyando en la capacitación de otros grupos de productores en la región del Bajío. Los talleres que brindaron sus miembros tuvieron un efecto multiplicador muy importante cuando otros productores en la región se sintieron identificados y sintieron más confianza en compartir sus experiencias y preguntar sus inquietudes. Las parcelas de los socios funcionaron como parcelas demostrativas, donde podían mostrar los resultados de las prácticas implementadas y así motivar a otros productores a iniciar procesos de mejora y acondicionamiento de sus áreas productivas.

  • Las capacitaciones se hacen en las comunidades cercanas, lo que brinda un ambiente de confianza y cordialidad.
  • AESAC rediseñó un manual preparado por el INIFAP sobre los 5 ejes de sustentabilidad, eso permitió tener un manual más sencillo, con menos texto y más gráfico, lo cual resulto más comprensible y atractivo a los productores.
  • El hecho de que las capacitaciones e intercambio de experiencias sea conducida por productores facilita mucho la comunicación y la confianza para experimentar nuevas prácticas en sus terrenos.
  • El tipo de ejemplos de buenas prácticas que utilizan los productores de AESAC, les parecen claras y lógicas a los productores que son capacitados.
  • El proyecto además enseñó a los socios de AESAC a cómo documentar y formalizar las sesiones de capacitación con sus pares, como parte del fortalecimiento de sus capacidades de gestión.
Promoción de la experimentación campesina

Los técnicos de INIFAP y otras organizaciones han acompañado a los productores de Apaseo el Grande desde hace muchos años, capacitándolos e impulsándolos a buscar sus propias soluciones a la problemática particular de sus parcelas.

 

Con el tiempo, los productores aprendieron que su parcela tiene necesidades particulares dependiendo de su ubicación, tipo de suelo, condiciones del clima, entre otras cosas, y que las "recetas" que a veces encuentran en los libros no siempre funcionan igual para todos. Esto los motivó a continuar experimentando con diferentes prácticas dentro de los cinco ejes de sustentabilidad que habían aprendido, y a anotar las combinaciones que les brindaban mejores rendimientos de producción a menor costo. Esto ha sido el corazón de la experiencia de AESAC.

 

Aprendieron también a compartir sus experiencias y a dar recomendaciones a otros productores que se resistían al cambio, pudiendo organizar talleres de capacitación inclusive en otras comunidades.

  • La buena relación de los productores con los técnicos que los acompañan, junto con la apertura de éstos a permitirles buscar sus propias soluciones en lugar de encasillarlos en la ortodoxia.
  • El valor de los productores para ensayar métodos no conocidos previamente por ellos, a riesgo de reducir sus ganancias cuando los resultados no eran los esperados.
  • La demostración de que el método funciona: en un año de gran sequía, los socios de AESAC obtuvieron mayores cosechas que sus vecinos, lo que pronto atrajo más productores interesados.
  • Poder demostrar que cada quien tiene mucho que contribuir al proceso de los ejes sustentables da un gran valor de autoestima a los productores de AESAC.
  • Es importante entender que las condiciones ambientales, suelos y manejos son muy diferentes entre todos los productores, lo cual resulta en datos de producción diferentes.
Fortalecimiento de la organización social

El grupo de productores interesados en seguir implementando las prácticas de producción sustentable que habían aprendido, buscaron organizarse de manera más formal, entendiendo que juntos podían acceder a más apoyos y tener una personalidad propia ante diferentes instituciones.

 

Con apoyo de la GIZ, formaron una Asociación Civil llamada Agricultores en Ejes Sustentables A.C. (AESAC), que es una organización llevada enteramente por los productores de Apaseo el Grande. Adicionalmente al desarrollo y consolidación de capacidades técnicas de los productores, AESAC contempla el desarrollo de capacidades administrativas y de gestión. Mediante esta acción se busca generar en los productores las capacidades gerenciales necesarias para lograr una administración eficiente, así como las capacidades para lograr la sostenibilidad financiera de la organización y el acceso futuro a recursos públicos y privados para continuar y mejorar el modelo de producción en beneficio de los productores y la biodiversidad.

  • Había una conciencia e interés en el grupo de productores de formalizar sus esfuerzos en una organización que pudiera obtener financiamiento.
  • La formalización de la Asociación permitió su registro ante la oficina de Hacienda y eso permitió la obtención de una cuenta bancaria.
  • La capacitación y asesoría constante del equipo de administración de GIZ fue indispensable para avanzar en el proyecto, tanto para la adquisición de bienes como para la comprobación de gastos.
  • Siempre es necesario que los socios de AESAC aporten recursos y mano de obra para valorizar los apoyos que reciben.
  • Hay que ser constante y tener mucha paciencia.  Estos tipos de proyectos son de largo plazo y pocos gobiernos e instituciones están dispuestas a participar, por lo que es el interés de los socios lo que mantiene el trabajo.
  • Los socios han aprendido a reconocer sus errores y a enfrentar los desafíos que implica crear una organización de raíz. Esto no ocurre en muchas comunidades campesinas.
Acompañamiento Técnico

En 2013  el Sistema Nacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (SINAREFI) junto con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) iniciaron un programa de capacitación mensual a los pequeños productores de la comunidad de Ojo Zarco, en el Municipio de Apaseo el Grande, Guanajuato. Se organizó un banco comunitario de semillas y se formó un grupo de productores custodios de semillas de maíz criollo.

 

En un inicio muchos productores acudieron a las capacitaciones con la esperanza de recibir un apoyo económico, pero cuando el Dr. Aguirre del INIFAP propuso que cada productor realizara experimentos para conocer las mejores condiciones para su parcela, fue que se empezó a consolidar un grupo de los más interesados en la zona. Con los experimentos se comparaba la siembra "tradicional" con la que aplicó un cambio de práctica, respecto a datos de producción de grano y esquilmos. Los resultados en el color y tamaño de las plantas animaron los productores pero los resultados en productividad fueron determinantes.

 

El proceso de capacitación es muy lento pero efectivo en la zona de agricultura semiárida de temporal. Se llevan de 6 a 7 años para tener buenos resultados cuando solamente se tienen recursos propios de los pequeños productores.

  • El programa de capacitación realizado por SINAREFI e INIFAP permitió que los productores comprendieran la importancia de los 5 Ejes. A pesar que el programa no duró más de 3 años, los productores pudieron continuar replicando las buenas practicas aprendidas.
  • La capacidad asociativa de los pequeños productores y sus habilidades para la experimentación en sus propias parcelas.
  • El involucramiento de los jóvenes de la comunidad en las acciones de monitoreo.
  • El manejo de herramientas digitales ha sido fundamental para la buena implementación de proyectos de cooperación, pero más aun para no detener las actividades durante el período de pandemia.
  • El continuo acompañamiento técnico de personal del INIFAP dio un respaldo muy importante al desarrollo de los 5 ejes de sustentabilidad que ahora componen el modelo de producción que adoptaron los productores de Apaseo el Grande.
Articulación con las comunidades nativas y campesinas y autoridades del ámbito

Las comunidades nativas y campesinas que se localizan en el ámbito de la RNM son aliados y participan en las actividades de vigilancia al interior de la RNM, en la zona de amortiguamiento y en el paisaje asociado a la RNM que utiliza cada comunidad. La información generada permite que se planteen estrategias conjuntas de acción para la protección de los ecosistemas o su uso sostenible por las comunidades y esta información a su vez es compartida con las autoridades para convocar, de acuerdo con sus competencias, su acción frente a la amenaza.

Ha sido importante el relacionamiento positivo con las comunidades del paisaje asociado que ha permitido un cambio de posición de las comunidades y un mejor enlace con las autoridades del entorno para con los objetivos de la RNM y esto hace que el trabajo de respuesta a las amenazas sea más articulado.

El trabajo articulado ha permitido fortalecer las capacidades de los comuneros que son contratados como guardaparques y de los que forman parte de los comités de vigilancia. Las informaciones sobre las amenazas son articuladas también con las autoridades que tienen competencias fuera de la RNM, para coordinar acciones hacia la conservación y aprovechamiento sostenible de los ecosistemas y recursos.

Eficiencia en resultados de la vigilancia y control con un sistema de manejo de información (Implementación del aplicativo SMART)

En la Reserva Nacional Matsés, la vigilancia y control se orientan a: a) la reducción de prácticas no sostenibles de aprovechamiento de los recursos naturales, y b) la reducción de ingresos a zonas y sectores no permitidos según la zonificación del área protegida. Para generar respuestas más rápidas y eficientes ante las amenazas se vienen utilizando el aplicativo SMART que permite hacer más eficiente la colecta y sistematización de datos recogidos durante las actividades de vigilancia y control.

La RNM ha adoptado el programa SMART (traducido al español, herramienta de recojo de información y monitoreo espacial), que permite la sistematización y organización de los datos, particularmente de las amenazas al área protegida. Antes de la adopción de SMART, los datos de los patrullajes tardaban o no llegaban a sistematizarse, quedándose en cuadernos de campo y hojas de datos, por lo que no era aprovechada y utilizada para apoyar la gestión de las ANP en forma oportuna.

La implementación del aplicativo SMART, luego del proceso de capacitación ha tenido una rápida aceptación entre el personal guardaparque y los especialistas de la RNM, debido a que es posible observar casi en tiempo real la información que es recogida en campo y esto permite una comunicación más fluida entre todo el equipo para generar respuestas a las amenazas.

Sectorización para la vigilancia y el control

En base a sesiones de trabajo con el personal guardaparque, conocedores del territorio, la Reserva Nacional Matsés ha dividido su área en sectores según su vulnerabilidad a las amenazas, para implementar las acciones de vigilancia que permitan el seguimiento de amenazas actuales o potenciales. Esto ha permitido redireccionar los esfuerzos para no vigilar exclusivamente el interior de la RNM sino la zona de amortiguamiento y paisaje asociado donde se originan las amenazas.

Considerando que las amenazas no son uniformes en el espacio se propuso la sectorización en función a criterios de: a) amenazas, b) accesibilidad al área protegida, c) centros poblados, d) recursos de interés y e) zonificación. Estos criterios permiten diferenciar los sectores según la vulnerabilidad del ANP.

En el caso de la Reserva Nacional Matsés, se han identificado ocho sectores, tres de ellos tienen un nivel de vulnerabilidad bajo, ya que no se han reportado amenazas, son de difícil acceso, no existen centros poblados y la zonificación del área protegida restringe ciertos usos a pesar de la existencia de recursos de interés. Otros tres sectores, tienen un nivel de vulnerabilidad alto, se han reportado amenazas y existen centros poblados colindantes, cuentan con fácil y múltiples accesos, cuentan con recursos de interés que vienen siendo aprovechados, y la zonificación permite el uso de recursos bajo ciertos lineamientos. Finalmente, los últimos dos sectores, tienen un nivel de vulnerabilidad medio, principalmente porque si bien cuentan con amenazas y centros poblados cercanos al área protegida, además del aprovechamiento de recursos, la accesibilidad es limitada.