Gestión comunitaria: Un enfoque para el crecimiento sostenible

Solución completa
Actividades del proyecto para desarrollar un sistema comunitario de gestión de la pesca
Katrin Straßburger, Sandra Winter/ W4 Büro für Gestaltung, Frankfurt, Germany

El Programa Global "Pesca y Acuicultura Sostenibles" es ejecutado por la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) en nombre del Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo. Su objetivo es aumentar el suministro de pescado procedente de la pesca y la acuicultura sostenibles y respetuosas con los recursos, fomentando así una dieta sana y variada.

Para proteger los medios de vida rurales, es esencial recuperar los recursos pesqueros. Esto requiere un enfoque holístico que incluya la participación de las partes interesadas, una variedad de habilidades, tiempo y otros recursos, así como la colaboración con otros sectores como el desarrollo agrícola y la gestión de los recursos hídricos. Esta solución explora el enfoque comunitario de la gestión de los recursos pesqueros, destacando la importancia de la participación voluntaria de la comunidad. Al emplear técnicas de evaluación rural participativa, la estrategia fomenta un fuerte sentimiento de propiedad comunitaria en la gestión de la pesca, lo que mejora la disponibilidad de pescado y aumenta los ingresos.

Última actualización: 10 Apr 2025
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Contexto
Défis à relever
Pérdida de la biodiversidad
Cosecha insostenible, incluida la sobrepesca
Gestión ineficaz de los recursos financieros
Falta de seguridad alimentaria
Deficiente vigilancia y aplicación de la ley
Deficiente gobernanza y participación

Los principales cuerpos de agua, como presas o estanques, son recursos inherentemente compartidos que cada miembro de la comunidad tiene derecho a utilizar por igual. La pesca crea puestos de trabajo y sustenta los medios de vida de millones de personas en las regiones rurales, especialmente en Asia y África, al tiempo que contribuye a una dieta nutritiva. Sin embargo, las prácticas pesqueras insostenibles someten a los recursos pesqueros a una presión constante. Las comunidades locales sufren a causa de estas prácticas descuidadas y continuas.

La gestión eficaz de los recursos pesqueros es un reto complejo y polifacético, debido a la participación de diversas partes interesadas a distintos niveles, como los pescadores, los miembros de la comunidad y las autoridades pesqueras locales. Requiere una serie de competencias, tiempo, recursos y apoyo político. Un elemento crucial para garantizar la durabilidad de estas iniciativas de gestión es la participación bien estructurada y sistemática de la comunidad, que en este producto del conocimiento se refiere a los habitantes de las aldeas que recibieron apoyo para gestionar los recursos pesqueros.

Escala de aplicación
Local
Subnacional
Nacional
Global
Ecosistemas
Piscina, lago, estanque
Tema
Adaptación al cambio climático
Incorporación de la perspectiva de género
Marco legal y normativo
Seguridad alimentaria
Medios de vida sostenibles
Actores locales
Pesca y acuicultura
Ubicación
Kampong Thom, Kambodscha
África Oriente y África del Sur
Sudeste Asiático
Procesar
Resumen del proceso

El objetivo central de este proceso es establecer comités operativos y órganos formalizados de gestión de los recursos hídricos cuyos miembros sean elegidos por la comunidad. Éstos pueden garantizar no sólo la durabilidad y aceptación del planteamiento, sino también que las medidas respondan a las necesidades y circunstancias reales de la comunidad. Los comités poseen la capacidad de comprender y gestionar eficazmente los retos a los que se enfrenta su comunidad, aplicando estrategias adaptadas al entorno local. Muchas organizaciones en desarrollo se asocian con estas instituciones locales para llevar a cabo sus proyectos de ayuda a la población local. El principal objetivo es garantizar que el comité cuente con las aptitudes, la información y la mentalidad necesarias para crear una fuerte apropiación y participación de la población local en la gestión de los recursos pesqueros. Fomenta la máxima participación y cooperación de todas las partes interesadas y garantiza que los miembros de la comunidad tengan igual acceso a los recursos dentro de las directrices establecidas. El gráfico de paisaje describe el proceso de entrada en la comunidad, un método sistemático para iniciar una gestión pesquera exitosa y sostenible mediante la elección de un comité de gestión y la ayuda de los comités existentes

Bloques de construcción
Evaluación inicial e ingreso en la comunidad

Los enfoques comunitarios se refieren a estrategias que implican a las comunidades locales en los procesos de gestión y toma de decisiones sobre sus recursos naturales. En el contexto de la gestión pesquera, estos enfoques implican a los habitantes locales en la conservación y gestión sostenible de las poblaciones de peces y los ecosistemas acuáticos. Esta participación local ayuda a garantizar que las prácticas de gestión pesquera sean culturalmente apropiadas, ambientalmente sostenibles y económicamente beneficiosas, lo que en última instancia conduce a una mejor gestión de los recursos y al bienestar de la comunidad. Estos planteamientos son especialmente pertinentes para la pesca artesanal en masas de agua naturales, donde los medios de subsistencia de la comunidad están estrechamente ligados a la salud y productividad de los entornos acuáticos.

El proceso de entrada en la comunidad es un método sistemático para iniciar una gestión pesquera satisfactoria y sostenible centrándose en la confianza y la estrecha cooperación entre las comunidades locales y otras partes interesadas. La solución esboza las medidas necesarias para establecer esas cooperaciones y un sistema de gestión pesquera mediante la elección de un comité de gestión. Además, el planteamiento ayuda a los comités existentes o de nueva creación, como los comités de presas o de refugios de peces comunitarios, a desarrollar objetivos y actividades, una administración eficaz y un sistema de seguimiento y evaluación.

Como primer paso, para evaluar la viabilidad de un sistema de gestión de la pesca dirigido por la comunidad, lo más importante es comprender la situación actual de la comunidad en cuanto a la dinámica de poder entre los actores relevantes, como el gobierno local y los representantes de la comunidad. Acudir al lugar adecuado, inspeccionar las instalaciones y mantener reuniones individuales con las partes interesadas forman parte de esta fase del proceso. Estas actividades pueden complementarse con la realización de talleres o entrevistas con todas las partes interesadas.

Factores facilitadores

El objetivo de la fase de entrada en la comunidad es identificar los sistemas existentes de gestión del agua y la pesca. Esto significa reunirse en grupos con los miembros de la comunidad y las organizaciones que gestionan y utilizan los recursos disponibles. Es habitual seleccionar y utilizar algunos de los siguientes instrumentos de evaluación rural participativa: clasificación de la riqueza, entrevistas semiestructuradas, visualización de las necesidades de los distintos grupos, cronogramas, calendarios estacionales, cartografía física y social, y recorridos transectoriales, en los que los miembros de la comunidad y las partes interesadas recorren una zona para observar y documentar sus características y problemas, lo que ayuda a recopilar percepciones e información locales. Se utiliza para identificar posibles problemas de gestión y explotación de los recursos, obtener un conocimiento profundo de los mismos y elaborar recomendaciones que puedan ponerse en práctica. El paseo permite un debate más profundo y específico de las condiciones sobre el terreno, con el fin de comprender el estado general de las masas de agua y la imagen global de la gestión de los recursos pesqueros. Normalmente, este procedimiento también brindaría la oportunidad de profundizar en las opiniones de los grupos de interés locales sobre la cooperación en la gestión de los recursos compartidos y de entablar debates más profundos entre las partes interesadas.

La evaluación inicial y los procedimientos de entrada en la comunidad son pasos importantes que ofrecen información vital para diagnosticar el estado de la comunidad y la gestión de los recursos hídricos y pesqueros, así como un camino a seguir. Tras esta fase inicial, hay dos líneas de actuación viables: crear nuevos grupos comunitarios o reforzar los ya existentes.

Lección aprendida

Las preocupaciones sobre la colaboración y el establecimiento de una gestión conjunta ya pueden abordarse siguiendo los distintos instrumentos de evaluación rural participativa. En el debate se pueden encontrar formas de reducirlas y hacer hincapié en los beneficios del enfoque para todos los implicados, de modo que todas las partes interesadas puedan trabajar juntas por un objetivo compartido.

Además, el paseo puede presentar excelentes oportunidades para encontrar miembros de la comunidad que estén dispuestos y sean capaces de asumir funciones de liderazgo en los comités de gestión de masas de agua u otros cargos que impliquen responsabilidades especiales.

Desarrollo de comités existentes o nuevos

Cuando se preste apoyo a sistemas y comités de gestión ya existentes, se recomienda evaluar la situación del grupo revisando el número de sus miembros, los estatutos o reglamentos existentes, incluidos los objetivos, la estructura de gestión y las actividades. A continuación, evalúe la capacidad del comité de gestión para cumplir sus obligaciones previstas, ya sea mediante entrevistas y cuestionarios individuales o debates en grupo. Si las organizaciones existentes no son operativas, puede ser necesario colaborar con las autoridades pesqueras locales para reactivar la estructura actual y garantizar que estas organizaciones reciben apoyo para cumplir sus tareas. Esto puede hacerse mediante la revisión de los estatutos, la ayuda para el registro en las administraciones pesqueras, la identificación de objetivos de recaudación de fondos o la captación de nuevos miembros.

Se recomienda formar un grupo local mediante elecciones si no existe ya ninguno. Es necesario informar a la comunidad y a las partes interesadas sobre las próximas elecciones (por ejemplo, mediante reuniones comunitarias, encuentros en las aldeas y otros actos) y encontrar posibles candidatos para el comité que dirigirá la gestión de los recursos pesqueros de la comunidad (por ejemplo, hablando con miembros influyentes de la comunidad y contactando directamente con los candidatos pertinentes). A la elección deben asistir los representantes del gobierno local, las partes interesadas y el público.

Tras la elección, es importante proporcionar al comité recién elegido apoyo técnico para ayudarle a establecer su estructura de gestión durante su primera reunión. Esto incluye definir funciones como las de secretario, contable, dirigente y vicedirigente.

Factores facilitadores

Para apoyar con éxito los sistemas de gestión y los comités existentes, primero es necesario acceder a la situación actual para determinar qué tareas los miembros se sienten seguros de gestionar con eficacia y cuáles requieren apoyo adicional. De este modo, el apoyo puede organizarse en consecuencia. Por ejemplo, apoyo a la creación de una estructura de gestión (comité) cuya tarea general sea formular las normas y estatutos y el plan de gestión de la pesca, y supervisar su aplicación.

El comité recibirá ayuda para redactar los estatutos del grupo. Estos estatutos describen los objetivos, funciones y obligaciones del comité. Este documento también se utiliza para el registro, que es el proceso por el que el comité obtiene el reconocimiento oficial de las autoridades competentes. Los estatutos actúan como garantía de que el comité se ha constituido de conformidad con las leyes gubernamentales aplicables.

Lección aprendida

Para el proceso de elección, es crucial subrayar la importancia de la participación de las mujeres en este proceso. Las mujeres son una parte importante de la comunidad y quizás tengan otros puntos de vista y prioridades sobre las distintas tareas que se llevan a cabo. Una representación amplia a través del comité significa que se debe apoyar a las mujeres para que participen en el establecimiento de sus estructuras de gestión y asuman ellas mismas funciones de gestión.

Apoyo a la mejora de las capacidades

Una vez evaluadas las necesidades de capacitación, es el momento de impartir las formaciones relativas a la gestión, por ejemplo, la normativa estatal, la creación de estatutos reconocidos oficialmente y la supervisión, y sobre temas técnicos como las prácticas pesqueras legales y el patrullaje.

Factores facilitadores

Especialmente los nuevos comités suelen carecer de la capacidad operativa necesaria para actividades profesionales como la creación de un plan operativo, la organización de reuniones eficaces y la contabilidad básica. Para evaluar la necesidad de desarrollar las capacidades antes de impartir la formación, deben utilizarse herramientas de evaluación.

Lección aprendida

Las herramientas de evaluación no deben ser innecesariamente complicadas. Un simple cuestionario podría calificar las capacidades de una persona en relación con cada tarea, mientras que un debate en grupo sobre los puntos fuertes y débiles del comité debería reflejar de forma realista sus demandas reales de capacidad.

Los cursos de formación deben utilizar materiales concisos y fácilmente comprensibles, a ser posible en el idioma local, y debe proporcionarse apoyo regular, asistencia práctica y seguimiento, para ayudar a los alumnos a aplicar y retener los nuevos conocimientos. La sesión de formación debe ser breve, de entre medio día y un día de duración. Es importante reconocer que los miembros del comité se ofrecen voluntarios para ayudar a la organización. Para respetar su compromiso, el tiempo programado para las sesiones de formación debe ser el mínimo posible. Los planes de formación también deben ser lo suficientemente flexibles como para adaptarse a los horarios de los miembros del comité de gestión.

Planificación y ejecución operativas

Una vez reconocido oficialmente el comité y claras las capacidades de sus miembros, es necesario iniciar la creación de un plan de desarrollo. Este plan de desarrollo incluye una visión clara del futuro, esboza el curso de acción y los resultados previstos. Todos los miembros del comité deben participar en la creación de esta imagen conjunta del futuro de sus masas de agua y de las prácticas de gestión previstas para alcanzar esta imagen conjunta.

Un objetivo de este tipo podría ser la lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) en la masa de agua que gestiona el comité. Por ello, el comité de gestión evalúa la situación inicial de la masa de agua y de las actividades pesqueras, elabora planes de patrulla y organiza actos de sensibilización para informar a la comunidad de las nuevas normativas.

En caso necesario, el comité de gestión puede solicitar ayuda a las autoridades competentes, como los jefes de comuna, las administraciones pesqueras o los departamentos provinciales de agricultura y pesca. Además, el comité apoyado puede recopilar datos pesqueros, documentar todas sus patrullas y registrar o notificar cualquier incidente de pesca INDNR que se produzca en su zona. Para ello, pueden utilizar formularios en papel o, si han recibido la formación adecuada, tabletas o teléfonos móviles.

A continuación, el comité debe aprender a convertir su plan de desarrollo en un plan de acción mensual. Esto puede hacerse siguiendo el mismo proceso que se utilizó para establecer su plan de desarrollo, sólo que durante un mes cada vez. Con ayuda externa, pueden determinar lo que pueden hacer en los próximos treinta días.

Por último, hay que establecer un sistema sencillo de seguimiento y evaluación. Por lo general, se trata de supervisar el progreso de las tareas enumeradas en su plan de acción. Esto incluye registrar cualquier desviación del plan, documentar las modificaciones realizadas y llevar un registro de los gastos asociados a cada actividad. El comité debe reunirse al final de cada mes para revisar el trabajo del mes anterior y programar el siguiente.

Factores facilitadores

Un proceso de revisión periódica ayuda a garantizar que el comité mantiene el rumbo y puede ajustar sus estrategias según sea necesario.

Lección aprendida

El seguimiento periódico de los avances y las revisiones de las tareas y objetivos de los comités fue un factor de gran éxito de los comités ya implantados en Camboya.

Cooperación de la comunidad y las autoridades

El uso del enfoque descrito simplifica la vinculación formal de un grupo comunitario con las autoridades y capacita a estas organizaciones para ayudar a gestionar de forma sostenible los recursos naturales. Fomentar y preservar vínculos positivos es importante, ya que los organismos gubernamentales suelen ser los encargados de gestionar los recursos naturales, como la pesca. Cuando un comité supervisa este recurso, debe responder ante estas autoridades y asumir su responsabilidad. El comité no pretende restar autoridad al gobierno en la gestión de los recursos, sino colaborar con él en beneficio de la comunidad.

Factores facilitadores

Por lo tanto, establecer un canal formal de comunicación frecuente entre los grupos comunitarios, los organismos gubernamentales y otras partes interesadas es crucial para evitar malentendidos y garantizar un reparto claro de funciones.

Según las evaluaciones en curso, los comités tienen potencial para tener éxito con una asistencia técnica adecuada tanto del proyecto de desarrollo como de las entidades gubernamentales estatales y locales pertinentes. Esto implica que la comunidad y las organizaciones gubernamentales estén informadas de la limitada asistencia externa para la aplicación del enfoque que puede proporcionarse, por ejemplo, a través de un equipo de proyecto.

Lección aprendida

Además, fomentar el sentido de pertenencia entre el comité y los miembros de la comunidad anima a los voluntarios a aportar sus limitados recursos a la comunidad. La clave del éxito reside en reforzar la gestión del comité para que sus miembros puedan funcionar como un equipo. En consecuencia, una fuerte apropiación, una buena comprensión de las tareas del comité y un fortalecimiento de su gestión orientado a la demanda contribuyen al éxito de todo el equipo.

Impactos

La aplicación del método participativo para mejorar las capacidades y aptitudes de los comités de gestión comunitaria produce impactos tanto tangibles como intangibles:

Sociales: El primer efecto es el proceso de aprendizaje comunitario, sobre todo entre los miembros del comité de gestión, que han desarrollado nuevas habilidades. Ahora organizan actos comunitarios, celebran reuniones, crean redes y redactan informes para las autoridades gubernamentales, mostrando sus competencias y capacidad de organización. La colaboración entre los miembros de la comunidad les permite planificar y realizar conjuntamente actividades de gestión como las patrullas rutinarias. Además, el comité puede recopilar datos de pesca y registrar o notificar cualquier incidente de pesca INDNR dentro de su zona. En caso necesario, pueden solicitar ayuda a las autoridades competentes.

Económicos: Gracias a la gestión y conservación de los recursos hídricos, incluidas las prácticas de observación y control, la mayor eficacia de los comités se traduce en una disminución significativa de la pesca INDNR. El resultado es un aumento de las capturas permitidas por pescador, así como de la disponibilidad total de pescado a largo plazo. Este impacto económico potencia la pesca como fuente vital de ingresos y alimentos para las comunidades rurales.

Medio ambiente: Las actividades y la vigilancia periódica de las masas de agua, junto con las prácticas pesqueras sostenibles dentro de los límites naturales, contribuyen a mantener los recursos hídricos y los hábitats pesqueros para las generaciones futuras.

Beneficiarios

Las nuevas capacidades de gestión mejoran los medios de subsistencia de las comunidades rurales y fomentan la igualdad de género. Una gestión eficaz reduce la pesca ilegal y aumenta la disponibilidad de pescado como fuente de alimentos e ingresos a largo plazo para los pescadores artesanales.

Objetivos de Desarrollo Sostenible
ODS 1 - Fin de la pobreza
ODS 2 - Hambre cero
ODS 5 - Igualidad de género
ODS 11 - Ciudades y comunidades sostenibles
ODS 14 - Vida submarina
Historia
Un grupo de nueve miembros de la comunidad con sombreros está sentado en cuclillas frente a un estanque. Están soltando pequeños alevines de un cuenco en el estanque.
La Sra. Han y otros miembros de la comunidad liberan alevines en su estanque de refugio comunal para aumentar la población de peces.
© GIZ / Lim Sophorn

El pescado constituye una parte importante de la dieta camboyana. Sin embargo, la continua pérdida de hábitats saludables está provocando escasez de pescado de agua dulce, incluso en el pueblo de la Sra. Seng Han, en la provincia de Kampong Thom. El proyecto de Acuicultura Sostenible y Gestión Comunitaria de Refugios de Peces (SAFR) proporcionó apoyo técnico para mejorar el estado de estos recursos naturales y, a su vez, aumentar la productividad pesquera de las comunidades locales.

"Hace veinte años había muchos peces en nuestros canales, arrozales, estanques y lagos; teníamos pescado más que suficiente para comer. Pero hoy en día el pescado escasea", afirma Seng Han.

En 2021, Han fue elegida miembro del comité de gestión del CFR. Trabaja activamente con los otros nueve miembros, que desempeñan diversas funciones, como presidenta, coordinadora de divulgación, tesorera, etc. Tras un año de duro trabajo, los esfuerzos de Han y su equipo han dado resultados tangibles y positivos, ya que la densidad de peces y las capturas en el sistema de arrozales del CFR han aumentado constantemente.

"Este año nuestros pescadores pescan más que en años anteriores, así que tenemos más pescado para el consumo doméstico...", dijo Seng Han.

La Sra. Han reveló que se esfuerza por educar y convencer a sus conciudadanos para que comprendan mejor el concepto y la gestión de los CFR y cómo este sistema puede beneficiar directamente a su comunidad.

"Movilizar los recursos de la comunidad no es fácil cuando la gente no entiende en qué les beneficia el CFR, pero yo quiero que la gente de mi comunidad, especialmente nuestros hijos, tengan suficiente pescado para comer, así que no me doy por vencida", dijo Seng Han.

Los estudios de seguimiento biológico en curso del proyecto indican que, de marzo a septiembre de 2021, la biomasa de peces ha aumentado un 12%, mientras que las capturas han pasado de 0,25 kg a 6 kg por hogar y semana. El CFR para el que trabaja la Sra. Han beneficia a 1.133 hogares y contribuye directamente a aumentar la seguridad alimentaria de su comunidad.

La Sra. Han es prudentemente optimista dados los resultados positivos obtenidos hasta la fecha. Sin embargo, reconoce que hay que seguir trabajando para garantizar un resultado verdaderamente sostenible a largo plazo, ya que inevitablemente quedan por delante más retos, como mantener una buena calidad del agua en la estación seca, mejorar la resistencia a las inundaciones mediante árboles y plantas acuáticas sanos y adaptar sus planes comunitarios.