Establecimiento de un proceso de diálogo inclusivo: el Proceso de Laponia

El Proceso de Laponia fue un enfoque de diálogo creado y desarrollado por una diversidad de partes interesadas en la propiedad del Patrimonio Mundial del Área de Laponia. Dado que Laponia es un área grande que consta de varias áreas protegidas, establecer un sistema de gestión coordinado en su conjunto ha sido un gran desafío desde su inscripción en la Lista. La Junta Administrativa del Condado de Norbotten y las comunidades y municipios sámi de Jokkmokk y Gällivare comenzaron a preparar sus programas de conservación de forma independiente. El Proceso de Laponia se inició por iniciativa del Gobernador de Norrbotten en 2005 incluyendo a todos los interesados ​​en un proceso de diálogo basado en un conjunto de valores comunes, que llevaría a las partes a ponerse de acuerdo en temas cruciales y los términos en los que el Área Laponia debería ser administrada. Se determinó que todas las decisiones se tomarían por consenso y se solicitaron nuevas regulaciones para los parques nacionales y reservas naturales. En 2006, las partes firmaron un acuerdo común que remitieron al Gobierno, que contenía:

  • Un conjunto de valores básicos comunes
  • Intenciones comunes para varios esfuerzos
  • El establecimiento de una delegación temporal de Laponia
  • Preparativos para el inicio de un grupo de gestión del Patrimonio Mundial con mayoría sámi en el comité.

La voluntad política del gobernador de Norbotten, las organizaciones aldeanas sámi a través de la asociación Midjá Ednam, el interés de los municipios de Jokkmokk y Gällivare y el respaldo de la SEPA fueron condiciones esenciales para iniciar el proceso. La iniciativa nace de la aceptación de las diferentes realidades de las partes involucradas y la fuerte voluntad de co-crear una nueva gestión para el Área Laponia. Además, hubo suficiente financiamiento para el proyecto y cada grupo participó con las mismas condiciones económicas.

  • Para establecer una organización basada en el consenso y desarrollar una nueva forma de gestión, es necesario escuchar a las personas y aprender por qué piensan como piensan y hacen como hacen (son las normas y los valores los que forman sus ideas y prácticas), pero también explicar abiertamente por qué uno está pensando y actuando de la manera en que lo hace. Esto toma tiempo y se trata de aprender unos de los otros y aceptarse.
  • Es un proceso que no se puede hacer en la oficina, se necesita salir y conocer a la gente en su vida cotidiana con regularidad.
  • No se puede apresurar ni pensar en soluciones rápidas.
  • El Proceso de Laponia tomó seis años hasta que todas las partes interesadas involucradas pudieran ponerse de acuerdo sobre una organización común y un plan de gestión. Para realizar un proceso así, es necesario contar con tiempo, financiación y las personas “adecuadas”.
  • Escuchar el uno al otro.
  • Reflexionar sobre las preguntas difíciles y discutirlas con otros representantes, antes de que se tomen las decisiones.