Reforzar las competencias
Taller de formación de pilotos de drones
Sgt Ndione
Se ha desarrollado un importante componente de capacitación de los beneficiarios para mejorar la gestión de la biodiversidad en la red de áreas protegidas. El objetivo era mejorar el sistema de vigilancia ecológica y el nivel de conocimientos sobre especies y hábitats mediante la adopción e integración de nuevas tecnologías (drones y cámaras trampa).
Las expectativas de las comunidades se tuvieron en cuenta en el marco de estos cursos de formación para garantizar la sostenibilidad de las actividades generadoras de ingresos en su beneficio.
Los principales destinatarios fueron los responsables del seguimiento ecológico a nivel de emplazamiento, mientras que a nivel central se implicó a los responsables del sistema de información geográfica de las dos direcciones beneficiarias, con el fin de aplicar y centralizar mejor los datos recogidos sobre el terreno.
Se utilizaron casos prácticos sobre zonas protegidas como ejercicios para los participantes en el marco de un enfoque de aprendizaje práctico.
En cuanto a las partes interesadas locales, los temas se adaptaron a las necesidades detectadas para responder a sus preocupaciones.
La elección de destinatarios adaptados a los temas de formación da mejores resultados en cuanto a la capacidad de los beneficiarios para compartir sus experiencias sobre el terreno. La experiencia ha demostrado que los destinatarios que tenían requisitos previos sobre los temas propuestos compartieron sus comentarios sobre el terreno inmediatamente después de la formación.
La lista de problemas logísticos detectados sobre el terreno, como la actualización de los equipos y la incompatibilidad de ordenadores y teléfonos inteligentes con los equipos (dron, cámara, software), dificultó la realización de trabajos prácticos sobre el terreno.
Como lección aprendida, es necesario gestionar los aspectos logísticos con los objetivos para evitar contratiempos sobre el terreno con el fin de mejorar la eficacia de la formación.
La principal lección aprendida de la capacitación de las comunidades es que se benefician más de las sesiones de formación iterativas y participativas que de las teóricas.