El grupo trabaja con todas las partes interesadas y afectadas, como la Comisión Ballenera Internacional (CBI), gobiernos locales y federales, empresas, contratistas, pesquerías, operadores turísticos, ONG, prestamistas, instituciones financieras e institutos de investigación. Cuenta con una amplia red de expertos a todos los niveles y recibe pruebas de diversas disciplinas y perspectivas.
A lo largo de los años, el panel ha contribuido a aliviar las tensiones entre los distintos grupos de interés creando un foro abierto de diálogo, sobre todo entre las ONG y Sakhalin Energy. Las organizaciones que hicieron campaña contra la financiación de la empresa participan ahora como observadoras en las reuniones del GTAP.
El WGWAP ha contribuido a aumentar el número de foros en los que se debate la conservación de las ballenas, con la creación de nuevos foros regionales y nacionales en la Federación Rusa. Se han forjado estrechas relaciones entre el WGWAP y la CBI, lo que favorece una visión más amplia de los problemas de la ballena gris. Varios Estados del área de distribución también han adoptado un Memorando de Cooperación sobre Medidas de Conservación para la ballena gris occidental que hace referencia al Plan de Gestión de la Conservación de la CBI/UICN (actualmente en revisión), a la CBI y al WGWAP.
Los vínculos y la capacidad del grupo para relacionarse con un abanico tan diverso de partes interesadas se han forjado a lo largo de varios años. Generar confianza requiere tiempo, voluntad de aceptar pruebas y escuchar los puntos de vista de los demás, y valor para mantener debates difíciles.
Una lección clave aprendida a través de la participación del panel ha sido la importancia de comprender y navegar por las diferencias culturales, ya sean corporativas o institucionales, peculiaridades de nacionalidad, idioma o terminología utilizada para describir retos y soluciones.
Además, aunque el panel se centra principalmente en Sakhalin Energy, también ha demostrado las ventajas de adoptar un enfoque más holístico de la conservación de las ballenas y explorar sinergias y aportaciones a los procesos nacionales y de toda la zona de distribución. Esto implicaría trabajar más estrechamente con los sectores de la pesca, la navegación y el turismo, que también afectan a las ballenas, y abordar los impactos acumulativos. Es necesario que las partes interesadas sigan debatiendo para determinar si el panel es el modelo más eficaz para asumir un alcance significativamente mayor.