Gestión integrada de plagas (GIP)

El principal objetivo de la GIP es reducir la infestación de cualquier plaga por debajo del umbral de daño. La compra de plaguicidas químicos suele ser demasiado cara para los agricultores de subsistencia. No obstante, sigue siendo vital algún tipo de control de plagas, ya que una infestación grave puede provocar la pérdida total de la cosecha. En este sentido, el proyecto promueve la aplicación de la GIP, que requiere un seguimiento permanente del estado fitosanitario de los campos, para tomar a tiempo las medidas adecuadas. Para garantizar un huerto resistente, en primer lugar deben aplicarse medidas fitosanitarias y de control biológico de plagas. Las medidas fitosanitarias implican el uso de plantones certificados, libres de plagas y enfermedades. Es importante realizar una poda adecuada, para eliminar las ramas infestadas por la muerte y para prevenir enfermedades como el mildiu, ya que las hojas se secan poco después de la lluvia o el rocío. En caso de plaga, se pueden preparar insecticidas caseros mezclando especias (guindilla, ajo, cebolla, etc.) o plantas tóxicas (nogal, tabaco, etc.) con jabón, alcohol o aceite. Pueden aplicarse para controlar insectos, como pulgones, trips y ácaros. Otra medida para controlar las plagas consiste en proporcionar fuentes de forraje y escondites a sus enemigos naturales.

Las plagas y enfermedades perjudican directamente la producción y la calidad de la fruta, lo que constituye una fuerte motivación para que los agricultores se dediquen al control de plagas. Además, cada vez está más aceptado entre los agricultores que el uso de pesticidas sintéticos es perjudicial para el medio ambiente. Por lo tanto, el enfoque holístico de la gestión de plagas y enfermedades promovido en las sesiones de formación de las escuelas de campo para agricultores fue bien acogido en general. Además, los insecticidas caseros son baratos y la mayoría de ellos no son perjudiciales para el medio ambiente ni para los usuarios.

A lo largo del proyecto ya se han podido identificar algunos aspectos:

  • Muchos agricultores tienden a no tomar medidas proactivas para la gestión de plagas debido a la escasez de conocimientos técnicos/información disponible al respecto.
  • Los pesticidas sintéticos tienen un efecto más rotundo que los caseros, que deben aplicarse repetidamente. Por ello, muchos agricultores siguen prefiriendo los plaguicidas sintéticos y resulta difícil convencerles de las ventajas de los caseros.
Asociación de Cultivos

Las hortalizas o los cultivos forrajeros pueden plantarse entre hileras de frutales, facilitando así los ingresos del huerto desde el principio, cuando los frutales aún no han entrado en producción. Asociar los árboles frutales con hortalizas o cultivos forrajeros es especialmente importante en Tayikistán, ya que las familias campesinas disponen de pocas tierras de regadío y, por tanto, tienen que utilizarlas de forma intensiva. Las hortalizas pueden utilizarse para la subsistencia o venderse en el mercado, mientras que los cultivos forrajeros como la alfalfa y la esparceta pueden plantarse para producir heno. Otras ventajas del cultivo de plantas forrajeras son que éstas crean hábitats y alimentan a polinizadores e insectos beneficiosos. La mayoría de las especies florecen cuando ya han florecido los árboles frutales, con lo que se amplía el suministro de forraje para los polinizadores y se mejoran las condiciones para la apicultura. Además, las plantas forrajeras protegen el suelo de la erosión.

El proyecto forma a los agricultores en las escuelas de campo sobre la gestión de los huertos, incluida la formación correcta de los árboles para dejar espacio suficiente a los cultivos asociados. Los árboles frutales deben formarse con copas longitudinales, consistentes en la prolongación del tallo y dos ramas esqueléticas alineadas a lo largo de la hilera de árboles, lo que permite el cultivo de plantas hortícolas y forrajeras entre ellas.

Aunque la asociación de cultivos hortícolas o forrajeros entre las hileras dentro de los huertos no es nueva para la mayoría de los agricultores, la técnica sólo puede aplicarse con éxito dependiendo de varios factores, entre ellos la composición y el diseño del huerto, como las distancias entre los árboles y las hileras, la poda correcta de los árboles, la selección de especies para los cultivos asociados y la disponibilidad de agua de riego e infraestructuras. Comúnmente, los frutales se cultivan con demasiada densidad, lo que reduce la producción de fruta por árbol e imposibilita la plantación de cultivos asociados debido a la falta de luz solar que llega a través de las ramas. Si se dispone de sistemas de riego avanzados, hay que considerar que los árboles se rieguen preferentemente por goteo y las plantas forrajeras por aspersión, lo que requiere instalar dos sistemas diferentes.

Variedades locales o injertadas en portainjertos locales

Es más barato establecer un huerto tradicional o semi-intensivo con variedades locales que uno intensivo basado en plantones importados, ya que las plantas producidas localmente son más baratas y se necesitan menos plantas/ha (aproximadamente 500-600 frente a 2.600-3.125).

Además, un sistema de huerto semi-intensivo basado en variedades locales permite cultivar mejor las hortalizas y plantar forraje entre los árboles. Esto compensa la desventaja de que los huertos establecidos con variedades locales e injertados en portainjertos locales entran en producción más tarde que los intensivos (5-6 años frente a 2-4 años).

Las variedades tradicionales de frutales suelen estar mejor adaptadas a las condiciones climáticas locales y son más resistentes o tolerantes a plagas y enfermedades. Esto implica beneficios económicos, ya que los costes de aplicación de pesticidas se reducen considerablemente, los niveles de producción son estables y se necesita menos agua de riego.

Además, las variedades locales dan frutos durante mucho más tiempo (30-50 años frente a 10-12 años). Se recomienda involucrar a especialistas y consultar con los viveros locales antes de iniciar la reproducción de plántulas de frutales, ya que el injerto requiere cierta experiencia. Los viveros locales pueden establecer colecciones de variedades para esquejes y entregarlas a los fruticultores interesados.

Cuando se les recuerdan las ventajas de las variedades locales de árboles y arbustos frutales durante el intercambio de conocimientos en las sesiones de formación de las escuelas de campo para agricultores, éstos tienden a mostrar interés por diversificar sus huertos con ellas. Los viveros locales o las plantaciones establecidas a partir de variedades locales, como el "parque de manzanos" del distrito piloto de Rasht del proyecto, pueden servir de prueba y motivar visualmente a los agricultores para que diversifiquen sus huertos con variedades locales o variedades injertadas en portainjertos locales.

Promover las variedades tradicionales es todo un reto, ya que a menudo están olvidadas y, por lo tanto, apenas están disponibles. Hay que fomentar los viveros locales que reproducen estas variedades y poner en contacto a los agricultores con ellos. Además, se puede motivar a los agricultores para que produzcan plantones, por ejemplo, creando pequeños viveros comunitarios que se concentren en las variedades locales de árboles y arbustos frutales.

Cuando los agricultores tengan previsto producir frutas de variedades locales no sólo para consumo propio sino también para la venta, deberá realizarse una evaluación del mercado.

Dar forma al cambio - Hacia el programa de adaptación comunitaria basada en los ecosistemas (CEBA) del municipio de eThekwini

La iniciativa CEBA de Durban ha ampliado los enfoques originales de gestión de ecosistemas y reforestación. Para ello se ha adoptado una comprensión más holística del vínculo entre las comunidades y los ecosistemas que sustentan su bienestar y sus medios de vida, especialmente frente a los riesgos del cambio climático. Implica la transferencia de conocimientos relevantes para el clima, la creación de puestos de trabajo locales y el desarrollo de pequeñas empresas, todo lo cual contribuye a garantizar unos barrios más limpios, ecológicos y sostenibles. Como resultado, las comunidades se vuelven menos dependientes de los costosos servicios públicos y, gracias a su participación directa, se convierten en copropietarias de un nuevo sector de economía verde en Durban. Los elementos clave incluyen:

  • La gestión y/o restauración de los ecosistemas locales. Esto se consigue principalmente mejorando, por ejemplo, la regulación del caudal de los ríos y el control de la erosión, lo que puede impulsar la adaptación al cambio climático y la reducción del riesgo de catástrofes.
  • Garantizar que las comunidades comprendan los riesgos relacionados con el cambio climático y cómo adaptarse y gestionar mejor las catástrofes relacionadas con el clima.
  • La mejora de las comunidades locales mediante la creación de "empleos verdes" para los pobres y los desempleados.
  • El establecimiento de asociaciones entre el Ayuntamiento de eThekwini, otras esferas del Gobierno, empresas, ONG y comunidades locales.
  • Proceso de aprendizaje continuo: integración de las lecciones aprendidas de los proyectos locales, como el proyecto de reforestación comunitaria del vertedero de Buffelsdraai y otras medidas piloto en el municipio.
  • Enmarcar la biodiversidad como bioinfraestructura ayudó a situar la AbE en el centro del debate sobre el desarrollo.
  • Apoyo de políticos y dirigentes del municipio.
  • La experiencia adquirida con el desarrollo en curso del Programa Municipal de Protección del Clima de Durban indica que la consecución de la AbE en las ciudades implica ir más allá de la conceptualización de un enfoque uniforme de talla única, de árboles en las calles y parques, hacia una comprensión más detallada de la compleja ecología de los ecosistemas autóctonos y de su capacidad de recuperación en condiciones de cambio climático. Cuando están sanos, estos sistemas proporcionan mejores servicios ecosistémicos, así como puestos de trabajo para las personas empleadas en su gestión.
  • También significa comprometerse con el papel que esta "bioinfraestructura" desempeña en la configuración de la calidad de vida y las oportunidades socioeconómicas de las comunidades humanas más vulnerables.
  • A pesar de los beneficios de sostenibilidad a largo plazo de este planteamiento, su aplicación en Durban ha demostrado ser un reto técnico y un uso intensivo de recursos.
  • La implantación a gran escala de la AbE exigirá cambios en los papeles, responsabilidades y funciones de las instituciones gubernamentales locales existentes.

(Roberts et al. 2012)

Cartografía participativa de recursos digitales

Este bloque se basa en la cartografía de percepción, combinándola con datos digitales y tecnología espacial para producir mapas detallados y útiles de recursos de condados y distritos, documentando el conocimiento comunitario de recursos y atributos. El proceso de cartografía participativa permite que el conocimiento tradicional mejore los datos digitales a nivel nacional y viceversa.

En los talleres se presentó el proyecto; se proyectaron en una pared imágenes de satélite de Open Street maps junto con mapas de percepción en papel, y los participantes trabajaron para transferir puntos de interés de los mapas en papel al SIG utilizando coordenadas para señalar ubicaciones de forma que pudieran verificarse y compartirse. A continuación, se incorporaron a los datos espaciales datos cualitativos sobre puntos de recursos clave. Los mapas se compartieron con los participantes y otras partes interesadas para que dieran su opinión, antes de repetir el proceso para perfeccionarlos.

Los mapas con base local y fundamento científico son útiles en contextos de tierras secas, donde los pastores deben ser capaces de utilizar diferentes recursos en diferentes épocas del año. Estos mapas también demuestran -enun formato comprensible para los planificadores y otras personas- dónde se encuentran los recursos clave, y cómo los proyectos de desarrollo mal planificados/no participativos pueden restringir el acceso de los pastores a los recursos.

Este componente básico era pertinente para los procesos de planificación de los condados y formaba parte integrante del mecanismo del CCCF. Formar parte del mecanismo CCCF significaba que el proceso tendría un resultado tangible, por ejemplo para orientar las inversiones, y estaba a disposición de otros socios para recibir apoyo técnico.

Cuando fue necesario, por ejemplo, cuando las imágenes por satélite cubrían los lugares con nubes, los participantes realizaron rápidas visitas de verificación sobre el terreno en moto, utilizando dispositivos móviles con GPRS para identificar la ubicación de los recursos importantes. Por lo tanto, es necesario elaborar planes de contingencia para la verificación sobre el terreno que funcionen en su contexto.

Determinar la escala adecuada es fundamental; no siempre es apropiado ceñirse a los límites administrativos a la hora de cartografiar, sobre todo en las zonas de pastoreo, donde a menudo se cruzan los límites administrativos para acceder a los recursos. Es importante pensar qué escala es la adecuada en su contexto.

Devolver los mapas a quienes ayudaron a construirlos es fundamental, pero la tecnología puede ser un obstáculo. Dejar los mapas a las comunidades suele significar tener que imprimirlos.

La adopción y el uso de Open Maps fueron muy rápidos, incluso entre quienes no tenían experiencia previa en el uso de la tecnología digital: el modelo del terreno en 3D, que ofrecía vistas laterales de características familiares, fue de gran ayuda en este caso.

Fondo para el Cambio Climático del Condado de Isiolo

El Fondo del Condado de Isiolo para el Cambio Climático (ICCCF, por sus siglas en inglés) es un mecanismo financiero gestionado localmente (descentralizado), que permite la toma de decisiones a nivel de condado y de distrito sobre las inversiones para hacer frente a los desafíos del cambio climático. El mecanismo, que se puso a prueba en Isiolo (2011-12) en el marco del entonces Ministerio de Estado para el Desarrollo del Norte de Kenia y Otras Tierras Áridas, se amplió en 2013 a los condados de Garissa, Kitui, Makueni y Wajir y, a partir de 2018, está siendo extendido a todo el país por la Autoridad Nacional de Gestión de la Sequía, dependiente del Ministerio de Devolución y ASAL. Las inversiones a nivel de distrito en Isiolo apoyadas por la CCCFC incluyen rehabilitación, vallado, diques de arena, talleres, financiación de radios comunitarias y mucho más.

La toma de decisiones es participativa:

  • Los WAPC se forman mediante un proceso de investigación pública y consenso; los miembros masculinos y femeninos se seleccionan en función de su integridad, dedicación, conocimiento de la zona y compromiso de informar a la comunidad.
  • Los WAPC identifican las inversiones prioritarias que se presentan al Comité de Planificación del Condado de Isiolo (CAPC) para su revisión (el CAPC no puede vetar las propuestas que cumplan los criterios de inversión acordados conjuntamente).
  • Una vez aprobadas, las inversiones se abren a licitaciones competitivas. El adjudicatario recibe los pagos por fases, en función de la finalización certificada de la fase anterior.
  • La nueva Constitución de Kenia exige una gobernanza descentralizada (local, ascendente) y la integración del cambio climático, principios básicos del CCCF.
  • El compromiso de la Dirección de Cambio Climático, el Consejo de Gobernadores, la Autoridad Nacional de Gestión del Medio Ambiente y el Tesoro Nacional en la ampliación del mecanismo CCCF está dirigido por la Autoridad Nacional de Gestión de la Sequía, que garantiza la integración del mecanismo en la planificación nacional y de los condados.
  • Los condados reservan entre el 1 y el 2% de su presupuesto de desarrollo para apoyar el CCCF.
  1. Las comunidades impulsan la planificación y la elaboración de presupuestos: a través del Comité de Planificación del Cambio Climático de Distrito (WCCPC), las comunidades locales influyen en la elaboración de presupuestos y garantizan la ejecución de inversiones sostenibles de alto valor.
  2. El CCCF está anclado en la gobernanza descentralizada (local) y la apoya: El mecanismo del CCCF ha dado lugar a la creación de comités de desarrollo de distrito, y en los distritos piloto del CCCF existentes se puede otorgar al WCCPC el mandato de ejecutar el programa de desarrollo a nivel de condado; los comités de planificación del cambio climático de condado actúan como unidades de coordinación técnica fundamentales que garantizan la armonización de las actividades relacionadas con el cambio climático.
  3. Enfoque en los bienes públicos: las inversiones en bienes públicos en todos los condados están aportando numerosos beneficios económicos y han reforzado las economías locales, apoyando los medios de subsistencia u otros servicios importantes.
  4. Inclusión: El CCCF es un mecanismo inclusivo, diseñado para incluir a todas las categorías sociales, así como a expertos técnicos, lo que significa que las estructuras críticas de planificación son inclusivas y las inversiones son eficaces para todos, incluidos los grupos vulnerables como las mujeres y los jóvenes.
Desarrollar una visión y una hoja de ruta clara hacia el 100% ecológico

Al iniciar estas políticas, la integración de la agricultura ecológica y agroecológica en todo el estado se consideró una estrategia para preservar el ecosistema del estado y la salud de sus ciudadanos. El gobierno estaba (y sigue estando) convencido de que esta decisión reportaría enormes beneficios socioeconómicos, ayudaría a los jóvenes a permanecer en la tierra y atraería turismo sostenible local y extranjero, al tiempo que abriría oportunidades para llegar a mercados ecológicos de primera calidad.

El compromiso político de apoyar la agricultura ecológica en Sikkim comenzó en 2003. Ese año, el Ministro Principal de Sikkim, S.E. Pawan Chamling, anunció su visión de que Sikkim fuera el primer estado ecológico de la India. En una declaración histórica ante la Asamblea del Estado en 2003, S.E. Chamling anunció "una iniciativa política largamente esperada de declarar Sikkim como Estado totalmente orgánico". La declaración de 2003 fue acompañada de la creación de un plan de acción que contenía diversas medidas políticas, entre ellas la eliminación gradual de los insumos sintéticos y el apoyo a la producción y el uso de fertilizantes orgánicos y semillas orgánicas, junto con el desarrollo de capacidades de los agentes de extensión, los agricultores y los jóvenes.

En 2003 aún no había un acuerdo claro sobre cómo avanzar hacia el objetivo de un estado totalmente ecológico. Para avanzar en este objetivo, en 2004, el gobierno elaboró una política de trabajo y, en agosto de 2010, puso en marcha la Misión Orgánica de Sikkim para aplicar el plan de acción y las políticas relacionadas con la agricultura ecológica en el estado, con el objetivo de convertir todo el estado en ecológico para el año 2015.

La hoja de ruta que detallaba claramente todas las medidas necesarias para alcanzar el objetivo de convertirse en un estado totalmente orgánico en 2015, fue clave, junto con la creación de la Misión Orgánica de Sikkim, para lograr la visión de Sikkim de convertirse en el primer estado 100% orgánico del mundo. La Misión Ecológica de Sikkim -con su objetivo de convertirse en un estado totalmente ecológico- es el primer compromiso político visionario de este tipo por parte de un estado de la India y, de hecho, del mundo. Al aplicar esta estrategia política, Sikkim demuestra que está tomando todas las medidas necesarias para invertir la lógica económica imperante que favorece formas de producción de alimentos que no tienen en cuenta las aportaciones de la naturaleza. Este plan de acción, junto con sus políticas conexas, es único por su audacia. Notablemente, permitió a Sikkim alcanzar su objetivo de convertir todo el estado a la agricultura orgánica para diciembre de 2015. Es la primera vez en la historia que un Estado se fija un objetivo tan ambicioso y lo consigue.

Potencial como modelo transferible

A pesar de ser un estado pequeño, el liderazgo visionario de Sikkim está recibiendo una gran atención en India y parece destinado a resonar en todo el mundo. Los países y estados vecinos muestran gran interés por reproducirlo y muchos otros países, sobre todo de Asia, invitan a Sikkim a intercambiar sus experiencias.

Bután ya ha establecido una nueva hoja de ruta para convertirse en un estado 100% ecológico en 2023, y ahora varios estados indios están interesados en seguir el deseo del Primer Ministro de la India de que todo el norte del país se convierta a la agricultura ecológica. A principios de 2018, Uttakarand se convirtió en el segundo estado indio en prometer un apoyo más amplio a la agricultura ecológica para sus 1,6 millones de agricultores, anunciando un plan de acción respaldado por aproximadamente 189 millones de euros de financiación federal para los próximos tres años. La agricultura ecológica puede ayudar a la India a alcanzar sus propios objetivos de desarrollo sostenible, entre ellos duplicar los ingresos de los agricultores rurales para 2022, si más estados indios adoptan el modelo de agricultura ecológica de Sikkim.

  • El compromiso político fue clave. El apoyo político a la agricultura ecológica en Sikkim comenzó en 2003 y se consolidó en 2010 con el diseño de la Misión Ecológica de Sikkim.
  • Constancia y perseverancia: El objetivo se alcanzó en tan solo 12 años.

Era fundamental contar con pleno apoyo político y diseñar una hoja de ruta que detallara claramente todas las medidas necesarias para alcanzar el objetivo de convertirse en un Estado totalmente orgánico en 2015.

Utilización de un marco flexible basado en métricas para la aplicación

El marco flexible y basado en métricas del Programa de Compra de Alimentos de Calidad anima a las grandes instituciones públicas a medir y luego modificar sus compras de alimentos. Al adoptar el marco, las instituciones de servicios alimentarios se comprometen a mejorar su sistema alimentario regional aplicando normas de compra significativas en las cinco categorías de valores:

  • Economía local: el Programa de Compra de Alimentos Respetuosos apoya a las pequeñas y medianas empresas agrícolas y de procesamiento de alimentos locales.
  • Sostenibilidad medioambiental: el Programa de compra de alimentos ecológicos exige a las instituciones que al menos el 15% de los alimentos procedan de productores que empleen sistemas de producción sostenibles.
  • Mano de obra valorada: la Política de Compras de Good Food promueve unas condiciones de trabajo seguras y saludables y una remuneración justa para todos los trabajadores y productores de la cadena alimentaria.
  • Bienestar animal: la Política de compra de alimentos saludables promueve un cuidado sano y humano de los animales de granja.
  • Nutrición: Por último, la Política de Compra de Buenos Alimentos promueve la salud y el bienestar mediante la descripción de las mejores prácticas que ofrecen raciones generosas de verduras, frutas, cereales integrales y alimentos mínimamente procesados, al tiempo que reduce la sal, los azúcares añadidos, las grasas saturadas y el consumo de carne roja, y elimina los aditivos artificiales.

El Programa de Compra de Alimentos de Calidad está considerado a escala nacional como la política de adquisición de alimentos más completa y basada en métricas del país. La verificación, la puntuación y el reconocimiento son componentes centrales. Cuando una institución se inscribe en el Good Food Purchasing Program, el personal del Center for Good Food Purchasing trabaja con ella para recopilar información exhaustiva sobre las prácticas de compra y servicio alimentario.

Para convertirse en Buen Proveedor de Alimentos, la institución de servicios alimentarios tiene que cumplir al menos el nivel de referencia (equivalente a un punto) en cada uno de los cinco valores. Si se alcanzan niveles aún más altos, se obtienen más puntos. La acumulación de puntos en todos los valores se utiliza para calcular y conceder una clasificación por estrellas. Los criterios de compra de referencia y de nivel superior se establecen en las Normas de Buena Compra de Alimentos, que se actualizan cada cinco años, la última vez en septiembre de 2017. Hay cinco niveles de estatus de buen comprador de alimentos (de 1 a 5 estrellas) que corresponden a un rango respectivo de puntos. Para alcanzar un nivel de 5 Estrellas, la institución debe lograr 25 o más puntos. En junio de 2018, cinco de 27 instituciones han logrado una calificación de estrellas, entre ellas el Distrito Escolar del Valle de Boulder que logró 5 Estrellas en 2017 y el Distrito Escolar Unificado de Oakland que logró 4 Estrellas en 2016. Al cabo de un año, se espera que los compradores aumenten la cantidad de Good Food que adquieren.

Objetivos

Adoptado por primera vez por la ciudad de Los Ángeles en 2012, el Good Food Purchasing Program ® crea una cadena de suministro transparente y ayuda a las instituciones a medir y luego hacer cambios en sus compras de alimentos.

Sus objetivos son:

  • Aprovechar el poder adquisitivo de las grandes instituciones para fomentar una mayor producción de alimentos producidos de forma sostenible, una alimentación sana, el respeto de los derechos de los trabajadores, el trato humanitario de los animales y el apoyo a la economía de las pequeñas empresas locales.
  • Desplazar el mayor número posible de dólares hacia la Buena Alimentación para lograr una economía de escala.

Es el primer modelo de contratación que apoya por igual los cinco valores del sistema alimentario (economía local, sostenibilidad medioambiental, mano de obra cualificada, bienestar animal y nutrición) y, por tanto, anima a multitud de organizaciones a unirse para alcanzar objetivos comunes.

En sólo seis años, el Programa de Compras de Alimentos de Calidad ha logrado un impacto notable.

Este programa ha desencadenado un movimiento nacional para establecer políticas similares en localidades grandes y pequeñas, y ha inspirado la creación del Center for Good Food Purchasing.