Atrayendo tierras privadas y comunitarias a un manejo sostenible

Aprovechando fondos del proyecto, y la existencia de dos esquemas gubernamentales de apoyo al manejo sustentable y protección: i) las Áreas de Protección Privada (APC), y ii) las Unidades de Manejo Ambiental (UMA). Las APC representan, en Veracruz, un esquema de conservación voluntaria, en el que la población se suma a los esfuerzos de la parte estatal, contribuyendo con ello a fortalecer los espacios naturales protegidos de la entidad. En la APC “El Pajaro”, INECC junto con las organizaciones de base local iniciaron una serie de acciones de manejo de 25 ha de manglares. La estrategia involucró trabajo participativo con la gente de las comunidades para incrementar la conciencia sobre lo que significa tener un manglar saludable, y continuó con acciones de capacitación para el manejo de este.

 

Los planes de manejo para la UMA del ecosistema de manglar propiedad del ejido el Tarachi, incluyeron la provisión de equipamiento e infraestructura, y capacitación para realizar las siguientes actividades: i) elementos para la reforestación con especies nativas; ii) un protocolo de conservación y estándares para ser seguidos por las comunidades locales; iii) orientación sobre actividades económicas que podrían desarrollarse sin afectar el ecosistema, entre otros.

Contar con recursos económicos y humanos para poder emplear a las comunidades locales para llevar a cabo el trabajo de rehabilitación;

Contar con el apoyo de la comunidad para mantener las mejoras que se han logrado en el humedal;

Contar con la evidencia suficente para demostrar a las comunidades que el trabajo colectivo realizado en la APC y la UMA, traería beneficios más amplios para las zonas y actividades colindantes a dichas unidades de manejo.

Las APC necesitan consolidarse y proporcionar mayores beneficios a los dueños de la tierra que se suman voluntariamente. Las actividades del proyecto pueden sentar un buen precedente ante el estado para fortalecer estos esquemas de manejo;

Las APC pueden funcionar como espacios de experimentación de buenas practicas, pero se necesita involucrar tanto a la comunidad como a las autoridades locales en su protección y uso sustentable;

Es esencial una buena gestión de la red de ONG y la presencia permanente a largo plazo de los trabajadores de campo necesarios para el desarrollo de la capacidad;

Restauración y reforestación de manglares basado en la evidencia

Al hacer alianza con una asociación civil local con trabajo permanente en el área, INECC pudo enfocar mejor los recursos humanos y económicos en la reforestación de 25 ha de manglar y en el desazolve de 3km de canales para la restitución de los flujos hídricos del humedal.  La reforestación de manglar se realizó mediante la técnica de “chinampas” (montículos de lodo de 1 x 1m) las cuales sirven de plataforma para un óptimo crecimiento de las plántulas de manglar. Esta técnica, utilizada anteriormente en otras áreas vecinas, incluye una fase de monitoreo ecológico con una línea base y puntos de monitoreo fotográfico geo-referenciado para ver la evolución visual del crecimiento mensual de las plántulas en cada una de las casi 6 mil chinampas establecidas.

Además, la participación directa de las comunidades en las actividades proporcionó conocimiento empírico sobre las particularidades del terreno, y mano de obra esencial para abrir, cavando a mano, los canales. La fusión de conocimiento técnico y empírico ha creado evidencia sobre la modificación ecológica del paisaje: el establecimiento de las chinampas eleva el micro relieve del sitio, y los flujos hidrológicos traen nutrientes y oxígeno, creando nichos ecológicos que las especies ocupan para restablecer la cadena trófica.

Contar con apoyo permanente y comprometido de ONGs locales con experiencia en el trabajo social de base comunitaria y conocimiento profundo de la zona; Contar con recursos económicos y humanos para poder emplear a las comunidades locales para llevar a cabo el trabajo de rehabilitación;  Contar con suficiente experiencia y evidencia tecnica empírica para invertir suficientes recursos y tiempo en la reforestación mediante la técnica de "chinampas"; Realizar estrategias de conservación de humedal. 

El destinar suficientes recursos económicos para el pago de jornales de la gente de las comunidades que trabajan en las acciones de restitución de manglares y flujos hidrológicos, es una de las fórmulas más exitosas para garantizar el interés de la misma gente por mantener dichos espacios protegidos, e incluir otros nuevos en este tipo de acciones; Abrir y mantener canales dentro del sistema de manglar para facilitar los flujos naturales entre las fuentes de sal y agua dulce es un componente clave para reducir los problemas de salinización, así como para garantizar que se mantenga un manglar saludable; Los problemas para los sistemas de manglar pueden verse exacerbados por eventos climáticos como tormentas tropicales que destruyen partes de los manglares. Sin embargo, los problemas crónicos pueden ser causados por actividades río arriba, como una reducción en los caudales de los ríos, debido a la extracción excesiva de agua para fines agroindustriales y pecuarios, que aumenta los problemas de salinidad y contaminación de los sistemas de manglar.

El Comité de Investigación Agropecuaria Local

El Comité de Investigación Agropecuaria Local (CIAL) se constituyó en 2000 y sus miembros fueron escogidos en una asamblea comunal. Los criterios que establecieron los mismos comuneros para elegir a los investigadores locales se basaron en ciertas características como ser observadores, comprometidos, responsables y puntuales. El CIAL se inició con 16 miembros entre varones y mujeres. Su creación se basa en los principios de la Investigación Acción Participativa (IAP). El CIAL y el IM inicialmente realizaron una investigación participativa entre 1999 y 2001 para recuperar pastos para ganado vacuno, comenzando con una ha cedida por la comunidad para tal fin y terminado con 10 ha gracias al creciente interés de los comuneros.

En 2010 el CIAL se reactivó con 24 integrantes para realizar investigaciones denominándose "Buen pasto, Buena agua”. En 2014 el CIAL se institucionalizó en la comunidad, siendo parte de su organigrama como uno de sus comités especializados y quedando inscrito en el reglamento interno de la comunidad. Es un comité muy activo, que está en diálogo permanente con sus directivos y con toda la asamblea para informar los avances de la investigación y sus propuestas, de esta manera pueden tener el respaldo para los trabajos necesarios por medio de las faenas comunales.

  • El compromiso de sus integrantes (aunque algunos jóvenes tuvieron que retirarse debido a sus otras obligaciones).
  • El soporte y respaldo de sus dirigentes comunales.
  • El nivel de gobernanza de la comunidad, que se ve reflejado en: (i) su nivel de planificación, la comunidad elaboró su Plan de Desarrollo Comunal; (ii) la Institucionalización del CIAL en el organigrama y reglamento interno de la comunidad; y (iii) la capacidad de gestión de los líderes comunales, quienes lograron apoyo externo (p.ej. maquinaria pesada) para implementar las acciones.
  • El proceso de la institucionalización del comité tomó mucho más tiempo de lo previsto, desde su constitución en el año 2000 hasta su reconocimiento en el estatuto como asesores técnicos de la comunidad en los temas de pastos y agua.

  • El empoderamiento y fortalecimiento de las capacidades de los miembros del comité en el uso de equipos de monitoreo de la calidad de agua y en la interpretación de los datos fue clave.

  • La iniciativa respondió a una necesidad prioritaria de la misma comunidad, como es el agua, respondiendo a problemas que tenían desde el año 1970. Como mencionan los miembros del CIAL, “siempre nos preguntábamos y preguntaba a otras instituciones por qué el color del agua y el olor, el sabor había cambiado y nadie nos daba respuesta, hasta que logramos entender y mejorar la calidad de nuestra agua” (Vicente Salvador).

  • Se requiere preparar representantes alternos para el comité, puesto que demanda mucha dedicación de tiempo, por lo que algunos integrantes muy empoderados dejaron el comité debido a sus otras obligaciones. 

Delimitación y Manejo del Área de Conservación Privada Bosques de Neblina y Páramos

La Comunidad de Samanga ha delimitado una parte de su territorio como área de conservación privada. El reconocimiento de un área de conservación, mediante Resolución Ministerial firmada por el Ministerio del Ambiente, es una modalidad para asegurar las acciones de protección y aprovechamiento sostenido de los recursos naturales y los servicios que proveen el bosque nublado y páramos para beneficio directo de la comunidad de Samanga, y de manera indirecta a todos los usuarios de la cuenca media y baja. Gracias al ACP se ha logrado gestionar pequeños proyectos para implementar actividades productivas sostenibles (para reducir los impactos negativos sobre el bosque y páramo) y para señalizar el área de conservación, actualmente ya delimitada en terreno y señalizada. Además, se han logrado acuerdos en asamblea comunal para sancionar a las personas que causen daño o atenten contra el ACP.

  • Liderazgo y organización de la comunidad para el cumplimiento de acuerdos.
  • Compromiso por parte de la comunidad para conservar los páramos y bosques altoandinos.
  • Continúo patrullaje y establecimiento de sanciones para castigar acciones que atenten contra la conservación del ACP.
  • Implementación de actividades de conservación y desarrollo sostenible.
  • Los acuerdos de conservación deben ir acompañados por alternativas sostenibles que generen bienestar e ingresos a las familias locales.
  • La comunidad de Samanga había tomado acuerdos comunales para controlar la tala, quemas y sobrepastoreo en el bosque y páramo (desde el 2000). Este interés y demanda local por conservar se ha fortalecido y formalizado mediante el reconocimiento de su área de conservación privada con una resolución del Ministerio del Ambiente (en el 2013).
  • El ACP ha significado una oportunidad de desarrollo para la comunidad de Samanga, cuentan con proyectos en marcha en productos lácteos, reforestación, investigación de los servicios ecosistémicos del bosque y páramo, propuesta turística, entre las principales.
  • Es necesario el respaldo y acompañamiento de las instituciones locales para apoyar a la comunidad en la gestión del área de conservación y en la generación de propuestas alternativas.
Transparencia, responsabilidad, exactitud, exhaustividad y registro independiente de terceros

En la Granja Porto Bonito, el proyecto promueve la cría de animales salvajes, la rehabilitación y liberación de animales salvajes, la recuperación de la pesca, la selección de semillas, el vivero y la plantación de especies de árboles autóctonos de la zona, la cría de polinizadores, la rehabilitación de la belleza paisajística, la educación medioambiental y el ocio para visitantes, socios, empresas participantes, estudiantes y otros. Porto Bonito fue abordado por primera vez en 2008 - solía ser un rancho ganadero, y en 2012 el proyecto comenzó a aceptar participantes. El personal está capacitado para medir, informar y verificar MRV los créditos ambientales que se generan a partir de las prácticas de gestión, como los créditos de carbono forestal. El proyecto promueve la reforestación de pastizales y zonas degradadas para restaurar la biodiversidad y aumentar el secuestro y almacenamiento de carbono, generando créditos de carbono forestal. Esos créditos se transfieren a las empresas participantes. Todo el proceso se registra de forma independiente en la Plataforma Estatal de Empresas con Bienes y Servicios Ambientales y Ecosistémicos de Mato Grosso (www.pnbsae.com.br).

Personal con capacidad para desarrollar metodologías de MRV e infraestructura local que permita la formación de consultores y auditores. existencia de la plataforma para el registro independiente en el Estado de Mato Grosso. infraestructura local para la difusión y divulgación del proyecto, instalaciones que permitan el acceso de visitantes al lugar y a los sitios.

Es necesario proporcionar formación específica y los recursos necesarios para que el cambio climático sea un tema aceptable para los profesionales y el público en general. Hemos realizado varias sesiones de formación y hemos participado en muchos eventos diferentes a lo largo de los 5 años de ejecución de las actividades antes de alcanzar un nivel de entendimiento común con el registro independiente y tener un flujo fluido de documentos y procesos. Es necesario prestar mucha atención a la articulación y promoción de asociaciones adecuadas y se debe invertir en la promoción de iniciativas conjuntas, reuniones, conferencias y actividades similares de difusión y divulgación.

Propiedad principal Fracción del programa de RSE

Green Farm CO2FREE (www.greenfarmco2free.com.br) desarrolló el concepto de fracción de propiedad principal para la conservación, creando un club de RSC para las empresas participantes. Con ese enfoque en las finanzas, invierte en proporcionar servicios ecosistémicos a las empresas participantes, entre ellos carbono, agua, biodiversidad, marketing ecológico y otros.

una propiedad privilegiada situada dentro de la zona tampón de un Parque Nacional, bien conservada y lo suficientemente grande como para permitir la implementación de la conservación a gran escala y la mejora de los servicios ecosistémicos a las empresas y otras partes interesadas. Programas de RSE en fase de planificación, desarrollo o ejecución por parte de empresas y otras partes interesadas

Las empresas están dispuestas a invertir en programas de RSE, pero carecen de los conocimientos y habilidades adecuados para identificar, entre las oportunidades disponibles, las que ofrecen los mejores resultados en términos tanto de marketing como de impacto medioambiental positivo. Hay que hacer un gran esfuerzo para promocionar el propio proyecto y sus beneficios antes de llegar al público adecuado, y la decisión debe provenir de los niveles administrativos superiores. normalmente, los directivos y otros miembros del personal tienden a evitar participar en actividades de proyectos a largo plazo con terceros por un sentimiento de autoconservación (cuando el agente externo tiene éxito, parece que el personal interno ya no es necesario). para evitarlo, ahora buscamos interactuar y dejar que la solución la diseñe el propio personal interno, convirtiéndolo en propietario del proyecto.

Integración de la gestión forestal integradora

Para aplicar con éxito el enfoque, la gestión forestal sostenible e integradora no sólo debe ponerse a prueba y practicarse sobre el terreno, sino también integrarse en las estrategias nacionales, los planes de desarrollo y la planificación y el seguimiento de la gestión forestal a largo plazo. En consecuencia, es tan importante trabajar con los arrendatarios forestales a nivel local como integrar el enfoque a nivel nacional.

El enfoque de Gestión Forestal Conjunta se incorporó al Código Forestal de Tayikistán en 2011. De este modo se crea la base jurídica para su aplicación y se acelera su difusión a otras partes del país. Desde 2016, se practica una gestión forestal más integradora para la que se ha establecido un diálogo intersectorial. Este diálogo intersectorial facilita abordar los retos medioambientales, económicos y sociales más allá del mandato de la agencia forestal. El seguimiento forestal y la planificación de la gestión se están reforzando mediante el apoyo a la unidad de inspección forestal. Sólo si se dispone de un sistema de planificación de la gestión forestal y de una estructura de supervisión de los bosques se podrá extender a todo el país un enfoque como el forestal integrador y evitar la mala gestión, la corrupción y las infracciones a gran escala de la normativa (por ejemplo, el pastoreo en parcelas forestales).

El enfoque de la GCM sigue un planteamiento multinivel, dirigido a los niveles nacional, regional y local, que ha demostrado ser necesario y, en consecuencia, exitoso.

Una solución teóricamente sólida sólo puede ser tan buena en la práctica como su sistema subyacente de planificación de la gestión y supervisión, así como su apoyo político.

Perspectiva paisajística

Al aplicar una perspectiva paisajística a la gestión forestal, se tiene en cuenta el ecosistema en su conjunto. Para esta solución, se ha prestado especial atención a la biodiversidad, la adaptación al cambio climático y la gestión de los pastos.

Una parcela forestal diversa tiene múltiples beneficios para el arrendatario forestal. En primer lugar, el arrendatario dispone de una cosecha diversa que contribuye a la seguridad alimentaria y nutricional. En segundo lugar, la diversidad de especies reduce el riesgo de plagas y aumenta la fertilidad del suelo. En tercer lugar, los bosques diversos proporcionan un hábitat para los polinizadores, que son cruciales para los árboles frutales y de frutos secos.

Tayikistán es propenso a las catástrofes, agravadas por la sobreexplotación de los recursos naturales y el cambio climático, que tiene fuertes repercusiones. Los corrimientos de tierras y las sequías son fenómenos comunes, pero su frecuencia e intensidad han aumentado considerablemente. La cubierta forestal en las laderas y a lo largo de las riberas de los ríos es una importante estrategia de adaptación y reducción del riesgo de catástrofes.

Además, el ganado pasta con frecuencia en zonas forestales, ya que los pastos escasean y la limitada tierra disponible se utiliza en exceso y se degrada. El pastoreo forestal reduce la cubierta vegetal, obstaculiza el sistema radicular y dificulta la regeneración natural de los bosques. Por lo tanto, el pastoreo debe abordarse junto con los arrendatarios forestales e identificar soluciones que vayan más allá de la prohibición del pastoreo en los bosques.

La aplicación de una perspectiva paisajística permite abordar multitud de problemas, dificultades y riesgos para la comunidad. En consecuencia, el enfoque ha ganado en aceptación por parte de las comunidades locales, ya que tiene en cuenta los retos medioambientales, económicos y sociales.

La experiencia ha demostrado que las delimitaciones políticas de las tierras no suelen corresponderse con los límites de los ecosistemas. Las zonas asignadas para la repoblación y forestación no suelen abarcar todo un ecosistema, sino que forman parte de un ecosistema mayor con el que la zona forestal interactúa y comparte recursos. Por consiguiente, la gestión forestal debe tener en cuenta las implicaciones e interacciones con el ecosistema más amplio del que forma parte la parcela forestal. Como varios tipos de uso de la tierra y derechos de uso de la tierra interactúan en un ecosistema del que son responsables diferentes organismos ministeriales, el establecimiento de un diálogo intersectorial para fomentar la coordinación y cooperación de todos los actores implicados a nivel de paisaje ha demostrado ser un éxito. Dentro de la implementación del JFM en Tayikistán, se ha establecido un intercambio bianual, en el que intercambian profesionales, ministerios relevantes y organizaciones tanto locales como internacionales. Esta plataforma de intercambio no sólo es apreciada por los socios, sino que también ha ayudado a incluir la perspectiva del paisaje. Por lo tanto, una plataforma de intercambio es muy recomendable.

Enfoque de Gestión Forestal Conjunta (GFC)

La Gestión Forestal Conjunta (GFC) es un enfoque de gestión forestal participativa que permite a la población local -ya sean individuos o grupos- implicarse en la gestión forestal y apoyar la rehabilitación de los bosques naturales degradados a largo plazo. Estos individuos firman un contrato por los derechos de uso de la tierra con las Empresas Forestales Estatales por un periodo de 20 años, con posibilidad de prórroga. De este modo, se anima a los arrendatarios a gestionar y rehabilitar de forma sostenible su parcela forestal, que suele tener una superficie de 1 a 2 hectáreas. Además del contrato, los planes de gestión y anuales sirven como herramientas para la planificación de la gestión forestal y para el seguimiento de las actividades y los resultados. Son elaborados conjuntamente por las Empresas Forestales del Estado y el arrendatario respectivo para cada parcela individual. Las tareas típicas especificadas en el plan anual son las medidas para proteger la parcela del pastoreo del ganado, la plantación de árboles, la tala y la poda. Además, el plan anual especifica las cuotas de cosecha de las Empresas Forestales Estatales y del arrendatario forestal de acuerdo con un principio de reparto equitativo definido en el contrato. El plan de gestión, elaborado para un periodo de 5 años, especifica objetivos a largo plazo, como la instalación de un canal de riego o la diversificación de la parcela forestal.

Mientras que los derechos de uso de la tierra en Tayikistán suelen concederse por un periodo corto (normalmente para una sola temporada), el contrato de 20 años con las Empresas Forestales Estatales permite al arrendatario desarrollar un plan de gestión forestal a largo plazo. El enfoque de gestión forestal conjunta se introdujo por primera vez en Tayikistán en 2006 y desde entonces ha ido ganando reputación. En 2011, el enfoque se formalizó y ancló en el código forestal nacional.

La experiencia ha demostrado que para la introducción de la gestión forestal conjunta es indispensable el apoyo de facilitadores externos (por ejemplo, personal de campo o una ONG local). Ambas partes contratantes, el arrendatario forestal y la Empresa Forestal Estatal, necesitan tener una comprensión clara de sus derechos, normas y obligaciones. Por lo tanto, se recomienda encarecidamente la presencia sobre el terreno de facilitadores experimentados y cualificados que conozcan bien el enfoque y el contexto local. Además, los facilitadores deben guiar a los arrendatarios y al personal de las empresas forestales estatales a lo largo del proceso de selección de una zona forestal, presentación del enfoque a las comunidades, selección de los arrendatarios forestales, delimitación de las parcelas individuales, celebración del contrato y elaboración de los planes anuales y de gestión. Además, la creación de grupos de arrendatarios forestales ha dado buenos resultados, sobre todo porque en Tayikistán los grupos comunitarios son relativamente comunes. Conjuntamente, los arrendatarios forestales realizan actividades como la tala, la poda o el vallado.

Seguimiento de la población de camachuelo de las Azores y éxito de la restauración

Cada cuatro años se realiza el "Atlas del Priolo", en el que 50 voluntarios cuentan todos los priolos del mundo en uno o dos días. Este Atlas permite hacer una estimación más sólida del tamaño de la población de priolos.

Anualmente, un técnico del proyecto realiza un censo de priolos en mayo y junio, y en septiembre un censo de juveniles para evaluar el éxito reproductor de la especie. Cada cuatro años se realiza también un censo invernal. Este seguimiento permite evaluar las tendencias poblacionales del ave y actuar con rapidez si se detecta algún problema.

La evolución de la vegetación autóctona se evalúa anualmente en todas las zonas de intervención, comparando la composición de cuadrados aleatorios de 10 x 10 metros de vegetación entre las zonas restauradas y las zonas de control. También se hace un seguimiento de las nuevas plantaciones para evaluar su éxito e identificar problemas. Cuando una zona de intervención presenta otras cuestiones delicadas, como la proximidad de conducciones de agua, se ponen en marcha nuevos sistemas de seguimiento, por ejemplo análisis del agua, para garantizar el éxito y la seguridad de todas las intervenciones.

Por último, también se supervisan las repercusiones socioeconómicas del proyecto en términos de inversión y prestación de servicios ecosistémicos.

  • Financiación de la Comisión Europea a través del Programa LIFE;
  • Apoyo científico por parte de un consejo asesor.
  • Una buena planificación y una ejecución regular de las acciones de seguimiento son esenciales para obtener resultados buenos y sólidos;
  • El apoyo científico a las acciones de seguimiento es muy importante, sin embargo, y dado que las acciones de conservación reales son prioritarias, este seguimiento debe adaptarse a la menor disponibilidad de recursos económicos y de tiempo para llevarlas a cabo. A veces, es necesario encontrar formas más sencillas de obtener las respuestas que necesitamos para seguir trabajando a pesar de no ser totalmente rigurosas desde el punto de vista científico. Este es el caso de la evaluación de la provisión de servicios ecosistémicos, que se realiza en términos cualitativos, con alguna valoración cuantitativa y monetaria, cuando se dispone de la información necesaria.
  • Las acciones de seguimiento permiten identificar las mejores prácticas, redefinir nuevas intervenciones y mejorar la eficacia, pero también son una buena herramienta de comunicación, que nos permite mostrar la importancia y el éxito del proyecto y presentarlo al público en general. El Atlas do Priolo se ha convertido en un gran evento de comunicación y compromiso.